|No, no es mi tipo.| •JJK & ___ • |

•20: No me abandones•

—¿Y bien?—me cruce de brazos—¿uno de ustedes dirá algo o se quedarán boquiabiertos el resto de la noche?

Jungkook comenzó a mirar a Jin con unas ganas de querer asesinarlo en ese preciso momento.

—Si Jungkook...—Enunció Jin con algo de ironía—¿tienes algo que decir?

La tensión que había en la habitación era muy desagradable, de hecho me estaba causado una ansiedad gigantesca.

—No realmente. —Respondió Jeon mientras se daba una media vuelta en dirección a la ventana. 

—Bien. —Comentó Seok Jin con algo de molestia— Tú lo quisiste así.

Jin me tomo de la mano y ambos salimos de la habitación, Jungkook se quedó observando por la ventana.

—¿Que haces Jin?—pregunté confundida—¿a dónde me llevas?

—Solo guarda silencio ¿si?—fue lo único que respondió.

Caminamos unos segundos y finalmente nos detuvimos, estábamos fuera de la habitación de la vez pasada, en la que Jungkook me había pedido no entrar jamás y en la cual conocí su lado tóxico.

—Vamos, entra...—Dijo Jin mientras me abría la puerta—te explicaré todo adentro.

La confianza que le tengo a Seok Jin es tan grande que no dude en si entrar o no y solo entre, sin preguntar absolutamente nada.

Todo seguía igual que la vez pasada, las fotos en la repisa, la cama ordenada, la puerta del baño entreabierta...

—¿Quién es esta chica?—le pregunté a Jin mientras agarraba una de las miles de fotografías que allí se encontraban.

Jungkook apareció del pasillo y apoyo su hombro en el marco de la puerta captando nuestras miradas.

—Jungkook—pronunció Jin—última oportunidad... ¿Le dices tú o yo?

Jungkook soltó un suspiro y comenzó a caminar en dirección a mi lentamente, provocando que unos escalofríos recorrieran mi espalda.

—Quiero que sepas que lo que te diré ahora, es algo pasado ¿entiendes?—agarro mis manos—por favor, no te alejes de mi...

—Ah, en serio esta situación me esta asustando. —exhale.

—Déjanos solos. —Ordenó Jungkook con un tono de voz frío.

—No. —Respondió cruzado de brazo—Me quedaré para le cuentes las cosas como realmente son, sin mentiras.

—No te estoy preguntando, te estoy ordenando. —Añadió Jeon algo enfadado, Jin lo sacaba de quicio.

—¿Quién eres tú para darme órdenes ah?—remató Kim.

Jungkook estaba a punto de responderle, pero yo no permitiría eso nuevamente.

—¡Dejen de pelear!—grite llamando la atención de ambos—Me están poniendo nerviosa y estoy comenzando a creer que lo que Jeon me tiene que decir es algo estúpido, algo como que le asustan las moscas o que sé yo.

—Lo siento. —Dijeron a coro.

Jin tomó asiento a los pies de la cama que allí se encontraba mientras Jungkook y yo nos mirábamos fijo.

—Ella es Park Yena...—tomó una de las foto.

—Era Park Yena.—Añadió Jin—¡Superalo gilipollas!

—¡Jin, cierra la puta boca!—advertí.

—Tiene razón, era Park Yena,—su expresión cambió—ella y yo estuvimos en una relación por muchos años. Todo iba tan bien, pero comenzamos a tener problemas y pronto lo nuestro se acabó.