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-¿Que haremos ahora? - Dijo Adam con una expresión de miedo en su rostro

-No lo sé, pero debemos salir de aquí rápido antes de que nos encuentren-

Dejamos todo ordenado de la misma forma que estaba anteriormente, a excepción de la carpeta 207, me aseguré de sacar un par de documentos para investigar más a detalle por mi misma.

-Apresúrate- Dijo Adam al notar que en las cámaras de seguridad se podía ver al director camino hacia la oficina.

Salimos rápidamente y fuimos a la biblioteca, era el lugar más cercano al que estaba permitido la entrada de alumnos.

- Hola chicos, ¿Necesitan ayuda?- Dijo Jessica acercándose a nosotros

Jessica es una de las mejores alumnas, las personas suelen nombrarla como "Ratón de biblioteca" ya que pasa la mayor parte del tiempo aquí.

- No, gracias- Dijo Adam amablemente

Al escuchar las palabras de Adam; Jessica volvió a centrarse en su lectura.

De repente comencé a sentir mareos, todo el lugar empezó a verse en tonos verdes y oscuros, miré a mi alrededor asustada, Adam y Jessica habían desaparecido.

De pronto un frío comenzó a sentirse en mi brazo derecho, justo donde tenía el número. Un ruido extraño se hizo presente dentro del silencio aterrador que se había creado, era como un sonar de buque.

Revisé mi celular, este no tenía señal alguna; noté algo extraño, la hora, el reloj marcaba las 7PM.

¿No sé suponía que estábamos en horario de clases?.

No atiné a nada mejor que salir de la biblioteca, necesitaba irme del lugar y buscar ayuda.

Me dirigí al pasillo con rapidez, en el fondo se veía una figura pequeña, me acerqué con lentitud, un llanto se hizo audible.

Era un niño pequeño, sentado en el piso, y observándolo con detenimiento...

-No te acerques- Dijo susurrando entre sollozos para luego decir... -No quiero verla otra vez, no dejes que me encuentre por favor-.

-¿De quién hablas?- le respondí mientras me acercaba con detenimiento.

-No puedo decírtelo, solo ten cuidado-

-¿Por qué?- Dije tocando su hombro para consolarlo.

El niño giró su cabeza rápidamente mirándome directo a los ojos, los tenía blancos, y estaban rodeados por manchas negras en su piel.

El niño giró su cabeza rápidamente mirándome directo a los ojos, los tenía blancos, y estaban rodeados por manchas negras en su piel

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-¡Te dije que no te acerques!- Dijo gritando, con un aspecto horroroso, para luego desaparecer.

[SOS] Escuela de EnfermosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora