Capítulo 1

801 59 8
                                    

Siempre lo veo sonreír, ser amable con los demás, a pesar de lo dañado que ha sido, siempre está dispuesto a ayudar a otros, esos colores tan hermosos. Por Dios es tan perfecto, y cuando menos me lo esperaba, termine enamorándome de él.

Pero no creo tener una posibilidad, hay mejores que yo, dispuestos a ayudarlo, no me elegiría a mí, ni siquiera hablamos. Sólo me queda observarlo desde lejos, y callar este amor que siento por él.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Era un día nuevo, y se llevaría a cabo una junta por parte de ONU en su sede. Dicha junta iniciaría a las 7:30am y sólo faltaban 15 minutos, ya casi toda la sala estaba llena de las representaciones de los países, muchos platicaban entre sí, otros simplemente estaban en sus celulares, pero había alguien en especial que no podía dejar de observar la puerta, Canadá, el bicolor estaba al pendiente pues quería ver a su crush, al que alegra sus días, quería ver a México, pues el amor que ha estado sintiendo por el latino se ha logrado intensificar, y había tomado la decisión de que hoy sería el día en el que por fin le dirigiría la palabra. Estaba nervioso, quería gritar y cuando se dio cuenta la junta había iniciado, pero, no había luces del latino, y eso era raro ya que México siempre llegaba a tiempo, a veces dos minutos antes de que iniciarán las juntas, pero nunca tarde, así que el de hoja se preocupó.

-Bien iniciaremos la reunión – Canadá estaba a punto de hablar para decirle a la organización que él latino aun no llegaba y no se podía iniciar sin él. Sim embargo la puerta se abrió dejando ver al tricolor, un poco alterado. – Me puedes explicar porque la tardanza.

-Pues verás, el pinche coche se descompuso a unas cuadras y pos' valió madres y tuve que correr. – el latino estaba enojado, y no solo por el coche, desde que despertó su suerte le ha jugado en su contra.

Primero no encontraba su traje de la junta y tuvo que ponerse unos pantalones de mezclilla pegados, con una camisa blanca de maga corta y unos tenis "corverse", no desayuno, y bueno el tráfico no ayudo y la gota del vaso fue el coche que no quiso seguir andando.

-Y ¿Por qué no este vestido adecuadamente? – ONU era estricto con la vestimenta y bueno en general con la apariencia de los contries, pues al ser las representaciones deben verse impecables.

-Wey cállate, no estoy de ánimos para tus reproches, así que inicia esto y ya. – y sin más se dirigió al único asiento disponible, entre el amante del hockey y el vodka.

Al tomar asiento se perdió en sus pensamientos, ignorando por completo todo lo de a su alrededor.

Mientras tanto el canadiense estaba muy nervioso, su amor platónico estaba sentado a su lado, sentía mucha emoción, ahora solo tendría que entablar una conversación con él, fácil, ¿Verdad?

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora