¡Hey, hey, hey! Vengo aquí con un nuevo fanfic, el cual es mi última aportación para la semana DabiHawks de este año, es para el día 4: Se conocieron como niños/adolescentes; debo decir que esa semana ha sido muy fructífera jaja, no había hecho tantos fics para una week de alguna pareja pero es que este día me dio tantos feels que dije "JALO". De una vez aviso, este fanfic contiene temas sensibles como violencia a un menor, adicciones, heridas, sangre y peleas explícitas así que, avisados están; para mayor disfrute, de preferencia lean los últimos capítulos del manga auqnue si no los han leído, no hay problema.
Todos los créditos a Kohei Horikoshi, yo solo usé a los pj's y la imagen no es mía, créditos a su artista (en twitter es XtlusArt).
Recuerden que seré muy feliz si dejan rw's, favs y follos.
¡Gracias por leer!
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Los días desde que entró a la Comisión de Seguridad Pública de Héroes eran una mierda ¿A quién engañaba? Si los entrenamientos con su padre los creía duros, en la Comisión, los espartanos estarían hasta aterrados de ellos.
Despertaba temprano, desayunaba una comida hecha por un nutriólogo especial para su quirk, se lavaba los dientes e iniciaba con su entrenamiento, el cual iba desde usar su quirk dentro de una piscina sin salir a respirar hasta que la piscina estuviera evaporada o usar sus llamas en una cámara donde medían el oxígeno suministrado.
Comía un aperitivo, luego la comida junto a niños tan cansados y exhaustos como él antes de ir a las clases teóricas particulares de la tarde, las cuales eran su alivio hasta que, al terminar el snack vespertino, tenía que volver a entrenar por unas cuatro horas hasta la hora de la cena donde ya no veía a varios niños porque escuchaba que habían ido a la enfermería, o muerto; se bañaba y, finalmente, iba a la cama a dormir para al día siguiente despertar adolorido, listo para la brutal rutina que le esperaba.
Tras varios meses casi aislado al ser hijo de Endeavor, la Comisión decidió integrarlo con los demás chicos ya que pensaban que su falta de mejoría seguramente era por no sentir competitividad alguna o por falta de estimulación ya que, a pesar de comer en la cafetería con los demás, todos tenían prohibido el acercársele así que su interacción con alguien era a través de gestos que tenía con un chico rubio que rondaba su edad y tenía unas preciosas alas rojas; ya que ambos sabían lenguaje de señas y morse, cuando sus movimientos eran demasiados sospechosos para los guardias que les cuidaban, iniciaban a conversar por medio de golpeteos de sus cubiertos con la mesa, el nombre del chico era Takami Keigo y tenía once años, igual que Fuyumi aunque lucía incluso mayor que él o, más bien, es que él lucía menor debido a su estatura heredada de su madre.
—Es Todoroki Touya, hijo de Endeavor, desde hoy se integrará con ustedes—El albino hizo un pequeño movimiento de cabeza cuando su nombre fue dicho, sonriendo sigilosamente al chico rubio que estaba en esa ¿Clase? El cual le sonreía con complicidad y agitaba ligeramente sus alas.
"Casualmente" se sentó en el asiento frente al rubio debido a su baja estatura, finalmente ser pequeño le dejaba algo bueno; en la secundaria a la que había entrado le tocaba sentarse hasta atrás y no veía demasiado porque le bloqueaban todo además de que sus compañeros le resentían por ser hijo de Endeavor, siendo internado en ese lugar porque cuando quiso activar su quirk para defenderse de los abusones, éste simplemente no encendió hasta que estaba realmente golpeado, quemando seriamente a sus compañeros y a sí mismo.
Ahora, en vez de clave morse, la comunicación fue a través de las plumas de Keigo, las cuales transportaban los papelitos que se enviaban de manera sigilosa y eficaz, siendo el tópico de su primera conversación lo alegres que ambos se sentían debido a que estaban en el mismo grupo y finalmente podrían hablar sin tener que parecer ninjas a punto de hacer algún jutsu.
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Fénix
FanfictionTal como el fénix renacía de sus cenizas tras incendiarse por completo, él lo hizo. Touya murió y de sus cenizas Dabi nació pero, aun bajo esos lagrimales dañados y sonrisa cínica, algún día hubo un niño que sonreía al ver las películas de All Might...