El sol caía en la Sociedad de Almas mientras las nubes se pintaban de tonalidades azules y anaranjadas. Ya todos estaban regresando a sus hogares, pues había terminado la jornada laboral. Muchos irían a descansar temprano para la celebración que habría al día siguiente.
Apenas había pasado un mes desde que había finalizado la guerra contra Aizen. Lo habían sellado completamente, y la cámara de los 46 lo sentenció a pasar veinte mil años en el nivel más bajo de la prisión subterránea. Desde el fin de la guerra, todas las divisiones se encontraban ocupadas, sobre todo con el tema de las reconstrucciones, es por eso que muchos estaban felices por la celebración, al fin tendrían el descanso y la razón para celebrar y divertirse que no tenían desde hacía mucho tiempo.
En la décima división, Hana y Rangiku se encontraban en la oficina del capitán dejando preparadas las últimas cosas. Era la primera vez en bastante tiempo que acababan con todo el trabajo.
Hana se puso a revisar por décima vez la lista de todo lo que necesitaban, pues no quería olvidarse de nada, después de todo, ella era quién había organizado el evento del día siguiente.
Rangiku: Hana, deberías dejar todo, ir a cenar y a dormir temprano, mañana es un día importante.
Hana: Lo sé, pero estoy muy nerviosa como para dormir.
Tōshirō: *Entrando a la oficina* Esta vez deberías escuchar a Rangiku. *Les da un bentō a cada una y se sienta en su silla a revisar papeles mientras come el suyo*
Hana: También tú, Shirō-chan. Yo tengo que estar alerta por si alguno de los bebés llora...
Rangiku: No te preocupes por ellos, puedo llevarlos a la tercera división y los cuidaremos junto con Gin.
Hana: Oh, no, mira si empiezan a llorar en la noche, no quiero molestar a las personas, menos de una división que no es la mía, yo tengo que hacerme responsable de ellos.
Tōshirō: *Sin gustarle la idea de que estén con Gin* Será mejor que se queden aquí.
Rangiku: Esta bien, pero no sé alarmen, yo los cuidaré.
Tōshirō: *Mira un reloj y se pone de pie*
Hana: En ese caso, si...
Rangiku: Ustedes descansen tranquilos, yo me ocupo del resto.
Hana temía olvidarse de algo, era su boda después de todo. Ya estaba todo listo. El capitán y la tercera oficial se habían encargado de dar la gran noticia a todos sus allegados algunos días atrás. Rangiku, Momo, Rukia y Yumichika habían acompañado a la novia a buscar su vestido. Discutieron bastante entre ellos sobre qué tipo de vestido debía usar su amiga, pero finalmente fue la tercera oficial quien encontró el vestido perfecto, y sus amigos estuvieron de acuerdo. Habían decidido tener una boda estilo occidental.
Luego de cenar y de revisar todo en la oficina, la pareja fue hasta la habitación del capitán y se acostaron en la cama, abrazados.
Hana: Estoy nerviosa, Shirō-chan, no quiero que nada salga mal.
Tōshirō: No tienes nada que temer, ya verás que todo saldrá perfecto. *Cierra los ojos* Ahora haz silencio y duérmete.
Hana: Tch, siempre eres tan amargado... *Molesta, cierra los ojos e intenta dormirse*
Tōshirō: *Sonríe, la abraza por la cintura y le da un beso en la cabeza* Te amo. *Susurra*.
Hana: ...También yo.
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💙Todo por Amor💙 3ª Temporada ~Tōshirō Hitsugaya~
FanfictionHan pasado años desde la traición a la Socieda de Almas por parte de tres capitanes y una tercera oficial. En la sociedad de almas todo es paz y tranquilidad. Luego de la guerra, se formó una alianza con los arrancar y se llegó a un acuerdo de paz...