-Cállate Niall, él no es mi novio, ni si quiera lo conozco.
-Sería un gusto, conocerte mejor.-Respondió el moreno, mientras me miraba y caminábamos hacia mi casa-¿Cómo te llamas?
-Niall.-Dijo mi estúpido hermano, que no paraba de reír.
-Eso creo que ya lo sabe Niall.-Comente mirando hacia delante.-Me llamo Annabela… Annabela Fisher ¿Y tú?
-Zayn, Zayn Malik. Y asique él es tu hermano.-Dijo “Irónico” pensé.
-Pues sí, pero aun creo que es adoptado.-Respondí riendo.
Seguimos riendo con Zayn, ya que Niall se reía de cualquier cosa, hasta que llegamos a mi casa. La verdad es que la estaba parando muy bien con Zayn, “A pesar de que lo trataste mal” acoto mi subconsciente, solo tome la opción de ignorarla.
Cuando llegamos a mi casa, mi mama no estaba, y Chris tampoco.
-¡Mama!-Grito Niall tumbándose en el sofá.
-Shh… Cállate estúpido, no hay nadie.-Dije- ¿Quieres pasar Zayn?
-Está bien, solo déjame avisarle a Peter.-Respondió mientras entraba-¿Hola Peter? Escucha no voy a poder volver, se me cruzo un percance… No idiota… Oye ya cállate ¿Si? Solo llamaba para avisarte, que estarás solo… Okey, si yo voy a la noche… Adiós.
-¿Con soy un percance?-Dije riendo.
-No, no me refería a eso.-Respondo- Ya sabes, si le decía que me iba a quedar en tu casa, él hubiera empezado a decir obscenidades.-Dijo metiendo las manos, en el bolsillo de su pantalón.
-Okey, está bien.-Dije- ¿Quieres tomar algo?
-Em… Bueno.-Respondió mirando a Niall, dormido en el sofá-¿Él va a estar bien?-Dijo señalando a Niall.
-Sí, seguramente. Ven vamos a sentarnos, no quieres estar con el cuándo despiertes.-Dije yendo hacia la cocina, mientras el me seguía- Muy bien ¿Quieres cerveza, agua, gaseosa, que?
-Gaseosa, por favor-Respondió, sentándose en una banqueta de la barra.
-Toma.-Le di un vaso con gaseosa- ¿Y, bien? ¿Qué es lo que haces, aparte de trabajar en ese bar?-Dije tomando mi gaseosa, mientras me sentaba.
-Estudio Diseño Gráfico, en la “University of London” (La Universidad de Londres) ¿Y tú?
-Estoy terminando la secundaria.-Dije con una sonrisa, que mostraba mi orgullo.
-¿¡Annie!?-Grito Niall, desde la sala de estar.
-¿Qué pasa Niall?-Le respondí, mientras miraba a Zayn.
-¿Me ayudas, a subir?
-Vale, ya voy.-Dije dejando el vaso, en el lavavajillas-¿Me ayudas Zayn?
-Claro, Annie.-Respondió riendo y yo lo fulmine con la mirada-Okey, okey ¿Solo Annabela?
-Sí, solo Annabela, ahora ayúdame con el.-Dije caminando hacia la sala de estar.
(***)
-Bueno, ya se durmió.-Después de haber luchado con Niall, para que tomara una ducha, lo pude lograr. Mientras Zayn reía y se burlaba de mí, por no poder meterlo en la ducha.
-Si bueno, yo me voy a ir.-Dijo, señalando la puerta.
-Okey
-Ah por cierto ¿Me das tu número?
-Claro.-Le di mi número y luego se fue, fui a ver a Niall, pero el dormía tan plácidamente, que no me iba a parecer raro, si en cualquier momento empezaba a largar saliva por la comisura de sus labios.
Baje hacia mi habitación, y me senté en el sofá, busque el control remoto, me puse a ver dibujitos animados, y en eso sonó mi celular. Era un mensaje de texto, de un número desconocido.
“Hola Annabela ¿Qué haces? Zayn xx.” Su mensaje me hiso sonreír, la verdad yo no era de encariñarme con chicos que apenas conocía, pero Zayn parecía un chico bueno, si a pesar de que trabajara en un bar, no por eso iba a pensar mal de él.
“Hola Zayn, veo tele ¿Y tú? Annabela xx.”
Si se preguntan, por qué no le decía que me llame Anna, es solo porque me llama así las personas en quien más confió y si, nadie me dice Annie, solo Niall cuando esta borracho y también me lo solía decir mi padre Bobby, cuando era una niña, lo cual fue hace más de nueve años, ahora nadie lo hace.
“Nada, recién llego a casa ¿Cómo está tu hermano, adoptado? Hahaha. Zayn xx.”
“El sigue durmiendo y mis padres aun no llegan, me aburro. Annabela xx”
Así seguimos mandándonos mensajes, con Zayn hasta, que se hicieron la una de la mañana y yo me despedí de él. Subí a mi cuarto, me puse el pijama, me lave los dientes y me fui a la cama.
-¡Anna! ¡Anna!- Cuando abrí los ojos estaba Niall, sentado en mi cama y yo estaba sudando y con lágrimas en mis ojos- ¿Otra vez tienes pesadillas?
-Niall, nunca se fueron.-Dije secando, las lágrimas de mis ojos.
-Anna, tienes que hacer algo… No pued…
-Niall, no empieces ¿Si?-Lo interrumpí, mientras acomodaba mi cabello con las manos-Solo… Solo, no empieces con eso.
-Está bien, lo siento.-Dijo parándose- Es solo, que no me gusta verte así sabes que aria cualquier cosa, por sacarte esas pesadillas.
-Si Niall, lo sé, algún día se irán, algún día…
-Bien, mama ya hizo el desayuno.
-Okey, ahora bajo.-Le respondí, saliendo de la cama, mientras el salía de mi habitación.
Me puse el uniforme, del colegio y baje. Por suerte hoy era viernes, podría quedarme despierta, sin tener que sufrir esas pesadillas.
Baje las escaleras y ahí estaba mama, haciendo el desayuno, me senté en una banqueta, y comí mi desayuno.
-Hola hija ¿Cómo estás?
-Hola mama, bien ¿Y tú?
-Bien, Niall me conto, que tuviste pesadillas de nuevo.-Dijo sentándose frente a mí.
-Sí, lo sé, pero por favor, no empieces con eso hoy mama.
-Okey, solo te quiero decir que no puedes seguir así hija.
-¡Lo se mama! ¡Lo sé! ¿! Tú te crees, que si pudiera sacarme, estas pesadillas de mierda no lo aria!? Por supuesto que lo aria, ya no aguanto más, estas pesadillas, que me atormentan, todas las noches, pero lo siento, no puedo hacer nada.-Dije levantándome de mi asiento y buscando mi mochila, para irme al colegio.
-¡Oye! ¿Te llevo?- Me pregunto Niall, antes de salir de la puerta de mi casa.
-No Niall, gracias.-Dije y cerré la puerta, para irme y perderme en mis pensamientos.
Estuve mal con mi madre, lo sé pero es que mi familia es tan, insoportablemente absorbente, que no pueden dejar de decirme que tengo que ir a un psicólogo, pero lo que ellos no entienden, es que no quiero ir a un lugar, con una señora, que por supuesto, no conozco y contarle toda mi mierda. No. Si yo pudiera borrar, todo mi pasado, mis pesadillas y problemas, seria ridículamente feliz. Yendo por la calle, con una estúpida sonrisa y sabiendo que todo está bien, pero en lugar de eso, tengo que tener esa estúpida sonrisa y fingir que todo está bien, esa es la diferencia.