La noche era bastante fría, hacia un par de horas que había regresado de la uni y me encontraba haciendo stream de Duck game con unos amigos de un foro. Las risas eran constantes y unas 37 personas veían el stream; el ambiente era agradable y las partidas eran muy divertidas, así seguí un tiempo más hasta que decidí cerrar el stream.
Me levanté y fuí directo a dormir, el hacer streaming de noche era bastante agotador, habían pasado 3 días desde que me dormí en la uni, y no quería que volviera a pasar algo así, tras seguir pensando un poco, me dormí.
Desperté, se podían escuchar ladridos de perros y algún auto pasando, exceptuando eso, la mañana era tranquila, observé el reloj y me levanté lo más rápido que pude, tenía 20 minutos para llegar a clase; me vestí y tomé una rebanada de pan blanco para después salir corriendo a la escuela.
Llegué a la estación del tren bastante agitado, comencé a jadear, tener hambre y correr no era buena combinación, fue entonces que un tren llegó e inmediatamente subí a él. De forma algo extraña, el transporte estaba bastante lleno, fue subir y quedar atrapado entre todo un bulto de personas, mi estómago comenzó a hacer ruidos para pedir que comiera algo, entonces alguien comenzó a hablarme.
–Vaya que tienes hambre– dijo aquella voz
–Si, en realidad no desayuné– comenté bastante apenado.
La conversación quedó solo en eso, hasta que ví que era Jade quién me estaba hablando; mi vergüenza comenzó a aumentar de forma drástica, quería desaparecer; entonces Jade interrumpió:
–Toma– dijo mientras me ofrecía la mitad de un subway –Si lo comes al menos no tendrás que dormirte otra vez–.
De nueva cuenta la vergüenza que ya sentía se incrementó; tomé la mitad del subway y empecé a comerlo en silencio.
Habían pasado un par de estaciones, el subway estaba realmente bueno que, en vez de comerlo rápidamente, comencé a disfrutar cada bocado. El tren se detuvo de manera abrupta, a tal punto que, tanto Jade como Yo, caímos al suelo del tren, ambos nos levantamos y fue que me dí cuenta que está era la estación de la uni, y sin pensarlo dos veces, me bajé del tren jalando a Jade para que también pudiera bajar.
–Perdona, pero ésta es la estación–
–Ya...no te preocupes– comentó ella –No te vuelvas a dormir– dijo riendo para después irse.
Aquel chiste me pareció un poco gracioso, aunque las risas no duraron, ya que llegaba tarde a clase; guardé un trozo pequeño del subway y comencé a correr.
Cuando llegué al aula me percaté que la clase había sido cancelada por el propio profesor y que solo habían unas pocas personas en el aula, empecé a observar todo el aula con detenimiento buscando alguien con quien hablar, pero no había ningún conocido, únicamente algunos compañeros dormidos y otros charlando. Decidí sentarme y comencé a escuchar música mientras jugaba con en mi teléfono.
Pasó una hora y poco a poco el aula se iba llenando, Alvin llegó al aula junto con Jasper, y así una conversación empezó:
–¡Buenas!– comentó la pareja de tórtolos al unísono
–¿Tienen que gritar cada vez que saludan?–
–No, pero me gusta molestarte– comentó Alvin con excesiva alegría
–Eso lo tengo bastante claro desde que te conozco– dije
–¿Desde cuándo son amigos?– preguntó Jasper
–Desde la secundaria– contesté con alegría –El fue el único que quiso hablar conmigo tan abiertamente–
–Si..– dijo Alvin
–Que buena amistad tienen ustedes dos– dijo ella –Oh, no veo a Jade, ¿No la haz visto?– me preguntó
–La encontré en el tren esta mañana, supongo que no tarda en llegar–
–Ya veo...bueno será mejor que me vaya, no quiero llegar tarde a mi clase–
Así Jasper se fue del aula; Alvin y yo comenzamos a charlar sobre algunos videojuegos y temas varios hasta que el profesor entró al aula con un aura bastante macabra, mi mente se preparaba para pasar dos horas maratónicas de sufrimiento y aburrimiento.
Aquel sufrimiento había terminado, tener clases sobre historia era bastante sinsentido en una carrera de programación; giré para ver qué hacía Alvin, y para mí sorpresa, estaba dormido, decidí tomar su teléfono y mandarle un mensaje a Jasper para que fuera a recogerlo; tomé mis cosas y me dirigí a la cafetería a comprar algo para comer y que, con suerte, no me diera alguna enfermedad.
Tras comprar unas galletas y un refresco, comencé a comer y disfrutar de unos divertidos tweets sobre temas diversos. Unos veinte minutos habían pasado y observé como una cantidad considerable de gente estaba afuera de la cafetería, salí y lo único que pude ver fue como Jade estaba llorando mientras un tipo comenzaba a insultarla; me quedé inmóvil, las palabras que aquel tipo pronunciaba eran bastante graves y fuertes, entonces un señor llegó a parar el disturbio y Jade salió corriendo, el tipo fue "detenido" y llevado a servicios estudiantiles.
Comencé a buscar a Jade por todo el campus, pero no tuve éxito, la siguiente clase estaba por comenzar y finalmente regresé al salón solo para encontrarme un Alvin bastante indignado
–¿Por qué no me despertaste tu mismo?–
–Porque tenía hambre– contesté bastante tranquilo
–En ese caso me hubieras despertado y los dos hubiésemos comido algo–
–Ya...pero mi hambre me dijo que era mejor decirle a tu novia–
La profesora encargada del grupo entró al aula y comenzó a dar un aviso:
–Bien, como ya saben, el equipo de fútbol americano del campus va a hacer una fiesta de bienvenida dentro de dos días para aquellos alumnos que acaban de comenzar sus estudios universitarios, bueno, la invitación está hecha para todo aquel que quiera ir, y cabe recalcar que, aunque el viernes el día laboral, no habrá ninguna actividad referente a las clases presenciales, así que se tomará como día de descanso; una vez dicho eso, comencemos la clase–.
De nueva cuenta la clase había terminado, empezaba a tomar mis cosas para irme del aula cuando Jasper apareció
–Los dos, ayúdenme a encontrar a Jade– nos pidió con un claro tono de preocupación
–¿Que ocurrió?– preguntó Alvin
–Parece ser que su novio rompió con ella y no paró de insultarla–
Los tres salimos corriendo del aula y tras unas pocas palabras me separé de ellos para buscarla, aunque había visto toda la escena no pensé que realmente fuese algo así. Comencé a buscar cerca de la cafetería, en algunos jardínes, distintos laboratorios pero no lograba encontrarla por ningún lado; entonces me dirigí al mismo lugar donde había dormido hace un par de días, me recosté y comencé a observar los árboles, algún manzano, robles y un par de abetos decoraban el jardín, entonces ví una sombra al pie de uno de los árboles, me levanté y comencé a caminar hacia aquel lugar; conforme me iba acercando la imagen se hacía más clara hasta que finalmente llegué donde estaba Jade.
Unos cuantos segundos pasaron, me senté a su lado en silencio mientras ella sollozaba. La puesta de sol iba avanzando y algunas estrellas se podían ver ligeramente, entonces decidí hablar:
–Hola..–
Jade no sé inmutó y contestó con un simple movimiento de su mano
–Me enteré de lo que pasó, creo que no es buena idea que te excluyas de los demás–
–...¿Tú que sabes?...–
–Puede que no mucho, pero se que está actitud no es buena–
Jade se quedó quieta un momento, entonces explotó
–¡¡Entonces ¿Cómo se supone que debo actuar?; la persona que quería me dejó!!–
Me quedé en silencio, comencé a pensar en mis frases, entonces proseguí:
–¿Por qué te terminó?–
–Por no hacer lo que el me mandaba–
–Jade..puede que no sepa mucho del amor, pero lo que pasó fue lo mejor–
–¡¿Cómo demonios fue lo mejor?¿Qué insinúas?!–
–Cuando un noviazgo se torna en ese sentido, lo mejor es dejarlo. Se que te duele lo que pasó y cómo pasó, pero fue lo mejor–
–Entonces ¿Que se supone que debo hacer ahora?– dijo mientras comenzaba a llorar
–Eso necesitas encontrarlo por ti misma, aunque creo que esto es el primer paso–
Tomé el trozo de Subway que me había dado y lo puse en su mano.
Ella comenzó a llorar mientras poco a poco iba comiendo el emparedado; el silencio se apoderó de la situación, algunos pájaros cantaban mientras más estrellas asomaban por el horizonte; decidí levantarme pero sentí un jalón en mi brazo:
–Quédate un poco más–
Me volví a sentar y ambos observamos como más estrellas aparecían por el horizonte hasta que Alvin finalmente nos encontró, fue entonces que nos levantamos.
Comenzamos a despedirnos en la entrada del campus, entonces Jade me tomó del brazo y dijo:
–Gracias por quedarte–.
Una ligera sonrisa se mostró en mi rostro para después despedirme e ir de camino a mi apartamento
