Capturando tu sonrisa [COMPLETA]

CAPITULO 8: CALEIDOSCOPIO=SECRETO

POV Montserrat

Camino por el centro comercial hace más de diez minutos, recorro cada tienda ya de memoria y decido sentarme en una banca para esperar a mi modelo. Mientras observo a la gente caminar por los alrededores, pienso lo que llevo recordando desde que empezó el mes.

Faltan sólo trece días de la muerte de ella. Sigue doliendo pero el dolor es soportable, tanto años sintiendo su pérdida que ya se vuelve habitual.

No se preocupen, ya comprendí con mucha madurez- lo que no tenía cuando falleció- que desde hace tiempo, ella no va a volver por aquella puerta de mi vieja habitación a decirme con tanto entusiasmo; mi chica flash favorita he vuelto, te traje un recuerdo.

Si estuvieras aquí conmigo, ¿estarías orgullosa de mi?

Por estar tan sumida en mis pensamientos, no me doy cuenta que tengo una persona sentada a lado mío. Mi mente se despeja del pasado y mi corazón bombardea con familiaridad.

-Hola bellota- siento un hormigueo en mi oreja por el susurro de mi modelo, dedico voltear y silbo por instinto al encontrarme tremendo manjar en mi campo de visión.

Sus ojos grisáceos me observan pícaro acompañado con su sonrisa seductora. Repaso todo su atuendo con descaro, su aspecto es diferente, no tiene su gorra vinotinto habitual con sus gafas de sol oscuras, sino un gorrito de lana ocultando casi todo su cabello chocolate, unos lentes dorados sin cristales y una camisa con un pantalón muy casual.

Si no fuera un modelo reconocido, diría que es un chico sexy común y corriente que me acompaña esta mañana.

-¿Decidiste cambiar tu aspecto hoy?- es lo único que encuentro decir porque siento mi boca reseca.

¡Vamos!, no es mi culpa si todo el tiempo está delicioso. Hoy provoca raptarlo y comérselo entero.

Creo que cuando lo estaba escaneando con mis avellanas, él hizo lo mismo porque su mirada quedó atrapada en el escote de mi franela gris holgada, chasqueo los dedos para que sepa que lo pillé en el acto e inmediatamente su vista se alza y me sonríe abiertamente.

Que hombre tan descaradamente sexy.

-Me impresiono que no traías tu cámara colgada– no responde mi pregunta sino se justifica por su desvío de miradas, su sonrisa no vacila.

Andas de chistocito el niño.

Bueno, de niño no tiene nada.

–Si claaaaro– digo sarcástica sacándole una risa– y para "saciar tu curiosidad" no la traje porque no la vi necesario, igualmente tengo mi cámara del teléfono para cualquier emergencia– le guiño un ojo coqueta, él niega la cabeza divertido por mis ocurrencias– bueno, ahora responde mi pregunta anterior que fue ignorada.

–Escogiste el mejor centro comercial, aquí casi todos las estrellas pasan desapercibidos- alzo mis cejas sorprendida, eso no lo sabía- pero igual no debo ser muy llamativo, aunque tu...- deja la oración incompleta cuando su mano cae en mi muslo desnudo (gracias a todos los santos que decidí traer un short negro) obteniendo una carga eléctrica en todo mi cuerpo.

Siempre me ha gustado esa sensación de electricidad que tengo cuando su tacto choca con mi cuerpo, aunque me reprocho porque no debo sobrepasar los límites del profesionalismo.

Querida, tu quieres que te dé duro contra el muro aceptémoslo.

Gracias por recordarmelo consciencia.

De nada, solo que no se te olvide que tu ya lo besaste más de una vez y disfrutaste sus caricias.

-¿Estamos listos entonces?- decido no prestarle más atención a mis pensamientos, él palmea mi muslo dando a entender que sí y se levanta ofreciéndome su mano, obviamente yo la acepto con gusto para volver a sentir su piel con la mía.