Lágrimas de amor. KOOKMIN • One shot.

I

—Llénate de valor y dile lo que sientes, ¿qué puedes perder haciéndolo?— Susurré para mí mismo mientras me sentaba en el suelo con los audífonos puestos, listo para escribir lo que sería una declaración de amor.

¿Qué tal si comenzamos con un "Perdón por molestarte?

O... ¿Qué tal con un "Hola JungKook, no quiero molestarte pero necesito decirte algo"?

Comencé a escribir dejándome llevar por una de mis canciones favoritas, "Me and my broken heart". Era una de esas canciones con las que te identificas por más que no te haya pasado lo que en esta se relata y, en caso de que te haya pasado, te sientes tan presente que te llega al corazón y te rompe en mil pedazos.

Me dejé llevar y en un determinado momento comencé a derramar lágrimas. Me sentía tan débil e indefenso que sabía que con un simple mensaje haría estallar mi corazón, al igual que un rechazo.

¿Sabes? No he parado de pensar en ti JungKook, en esta relación de mejores amigos que tenemos. Me siento confundido pero a la vez feliz, demasiado feliz.

Me haces sentir completo y amado como nadie, creo que nunca había sentido esto con alguien y si es así, espero que puedas disculparme porque no lo recuerdo.

Me sentí tan bien, tan extasiado... Tan yo que fue como una bajada de una montaña rusa darme cuenta que mis sentimientos por ti habían cambiado, nada era como antes.

Éramos los mejores amigos del mundo, nos complementábamos el uno al otro y de la noche a la mañana, sentí que eras algo más para mi, y todo en tan solo días.

Desde ahí nunca te dije nada, ya que no le veía futuro a lo nuestro, tu vives en el fin del mundo y yo en el comienzo, pero eso no quita que no pueda sentir, enamorarme y amar.

No te he dicho las millones de veces que he querido darte un abrazo como alguien más que un mejor amigo, besarte, cantarte, acariciarte... todo. Y puede que lo esté exagerando, perdón por eso.

Realmente te quiero y espero que cuando leas esto sepas que tienes un espacio muy grande en mi corazón.

Con amor, Park JiMin.

El tiempo se detuvo cuando toqué el botón de enviar, mi respiración comenzaba a entrecortarse y decir que estaba nervioso era poco.

¿Qué iba a hacer? ¿Qué iba a pasar? Tantas preguntas estaban arrasando mi mente y de repente me sentí mareado.

En el momento en el que JungKook leyó mis mensajes pero no contestó, mi mundo se derrumbó por completo.

¿Había hecho todo en vano?

Las lágrimas comenzaron a bajar por mis ojos, mejillas y terminando en mi boca dejando su típico sabor salado, me sentía tan estúpido e inútil que no pude evitar soltar un gemido de dolor.

¿Por qué? ¿Por qué me dejé llevar por mis sentimientos?

Tiré el teléfono lejos y me incorporé sentándome, me cubrí el rostro con mis manos y suspiré rendido.

Suponía todo lo que estaba pasando, pero siempre está ahí la mínima esperanza de que esa persona pueda corresponderte como deseas y tengan su final de princesas.

Pero no siempre es así.

Ya no dolía, ahora ardía y quemaba, quemaba como si estuviera bajo el fuego y este nunca me matara. Todas eran balas que iban a mi cuerpo y nunca llegaban a mi corazón, porque eso significaría matarme con rapidez.

Una de esas balas estaba a punto de estrellarse en mi hombro, la peor de todas.

El rechazo de JungKook.