Amor Unilateral.

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Merlín estaba limpiando los establos como siempre le solía ordenar Arturo, estaba cansado, y las ganas de usar magia para hacer todo más rápido le tentaban, pero no podía ser descubierto por Uther, sino, todo por lo que ha luchado se desvanecería en segundos.

Cuando por fin termino, decidió dar unas vueltas por el pueblo pues había logrado terminar antes de lo previsto, y un tiempo libre de trabajos forzado, estudios de magia y luchas con seres mágicos le haría bien, pues lo tenían harto. Se encontró con Guinivere, la morena le dio cierta platica mientras llevaba el cesto de ropa de Morgana. Se despidió del siervo de Arturo y fue a sus deberes. Cuando se fue, Merlín se quedo pensando en como la persona que más amaba en el mundo estaba enamorado de ella, se sintió culpable por permitir que sus sentimientos intervinieran en su misión y en la felicidad de Arturo, pues sabia que el príncipe jamás le correspondería, si bien estaba enamorado de una sirvienta de color de piel, jamás podría estar con un hombre, menos con un chico larguirucho como él.

Su amor era unilateral.

Estaba tan perdido en sus pensamientos que no se dio cuenta que alguien a paso veloz se interponía a en su camino. Esta persona llevaba una capa azul, cubriéndose la cabeza con la capucha como si no quisiera que alguien le viera. Inevitablemente ambos chocaron.

-Lo siento mucho- se disculpó el joven hechicero.

-No te mortifiques- le contesto una voz femenina. La chica se bajo la capucha, dejando ver su rostro, tenia unos bellos ojos azules, y una melena rubia que le llegaba a los hombros. -Fui yo la que no se fijo por donde iba.-

Merlín se quedo a apreciar a la chica, parecía tener unos 20 años, y sus ojos y cabello le recordaban al príncipe de sus sueños.

-Soy Merlín-

-Un gusto Merlín, que raro, mi nombre igual inicia con M, soy Melinda, Melinda Warren. Acabo de llegar a Camelot-

-Un placer- dijo extendiéndole la mano.

De pronto, llego Arturo y paro su caballo enfrente de ambos, alzo una ceja mirando con confusión, (y algo más) como Merlín le sujetaba la mano a la chica, y le dedicaba una de esas sonrisas bobas que solo le dedicaba a él, o eso quería pensar.

-Merlín, no es tiempo de estar con tu novia, tienes que pulir mi armadura y llevarme la cena.-

Acto seguido Arturo bajo de sus caballo, estaba molesto porque Merlín se sonrojo cuando le escucho decir la palabra novia.

-Soy el príncipe Arturo señorita, ¿no cree desperdiciar su tiempo con este idiota?-

-Alteza, no mal interprete, nos acabamos de conocer, soy Melinda, seré la nueva sirvienta del castillo.- Otorgándole la mano, por muy molesto que estaba Arturo no fue descortés y la recibió dándole un beso en la mano.

Melinda dio un respingo extraño, como si algo la hubiera lastimado, asustando a los dos que la acompañaban, tuvo los ojos cerrados por unos segundos y luego volvió en si.

-Lo lamento- se limito a decir.

Merlín ahora era el celoso, pues si bien fue un acto desinteresado y formal, él quería saber que se sentiría tener los labios de Arturo besando su piel. En sus adentros el pelinegro lloraba de impotencia, pues sabia que jamás seria posible, Arturo no lo miraba de esa forma como con Gwen, y nunca lo haría.

-Espero que te apures Merlín.- dijo Arturo marchándose -No quiero llegar y ver que no has hecho nada.

-Y bien, ¿Cuando será la boda?- comento en risa la rubia.

-¿De-de que hablas?

-Hay por favor, no soy tonta, pude ver como lo mirabas.

-No sé de que hablas.- Dijo en un sonrojo muy notable.

-Tranquilo, yo sé lo que se siente ser diferente, no te juzgare si te gustan los chicos.

Al oír eso Merlín pudo ver algo claro en su mente.

No le gustaban los chicos, solo le gustaba Arturo.

-No es posible, él es el príncipe, yo solo soy un sirviente tonto.-

-Así que ya no lo niegas-

-¡Él no me gusta!

-Ajá si.-

-Aunque así fuera, es imposible-

Melinda se acerco a Merlín y le toco el hombro, cerro sus ojos y al abrirlos dijo

-Nada puede llegar a ser imposible, si le das el tiempo para ser posible.

Merlín no entendió muy bien su consejo, pues el sabía que lo que sentía, era sólo un amor unilateral.




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⏰ Última actualización: Jun 14, 2020 ⏰

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El destino nos unió (Merthur)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora