Todo comenzó un lunes, mi primer día de universidad.
Mi nombre es Annelisse Müller, tengo 18 años de edad, soy una chica promedio, rubia, alta, cabello largo y labios rojizos. Si, algo cliché, pero que le iba a hacer.
Me levanté a las 9:00 AM, fui a lavar mi cara, dientes y quitar la mascarilla que me había colocado la noche anterior. Era un día bastante lindo, por lo cual me sentía de buen humor. Puse una canción mientras me maquillaba y arreglaba mi cabello, era el primer día de clases, debía estar decente.
Luego de vestirme con una falda de corte alto color blanca, un top negro y unos botines también negros, baje a preparar mi desayuno. Puse a tostar pan y me serví un vaso de jugo de naranja. Después de unos minutos ya estaba lista para mí primera clase del día.
Encendí el coche, y conduje hasta la universidad, quedaba a unas calles, por lo que llegue bastante rápido. Estudiaba psicología, algo que me apasionaba bastante desde que le daba consejos sobre amor a mis amigas cuando sus estúpidos novios las dejaban. Estacione el coche, vi a mi alrededor, muchos estaban con sus móviles escuchando música, otros se saludaban, mientras que otros solo caminaban con cara de pocos amigos, tal vez yo estaba muy entusiasmada.
Le mandé un mensaje a mi mejor amigo Anton preguntando dónde estaba, ya tenía 3 meses sin verlo, luego de irme a visitar a mi abuela en su pueblo natal. El ya debería haber llegado, o tal vez se quedó dormido, como siempre. De pronto siento unos brazos presionar mi cintura y alzarme.
—Me extrañaste, mocosa?—dijo Anton mientras me abrazaba.
—¡Obvio si, tonto!— grite mientras le correspondía el abrazo.
— Yo también te extrañe Anne, vamos a clases?— Asentí mientras caminábamos.
—¿Y que tal todo? ¿Nervioso?— pregunté.
—Para nada, en realidad estoy bastante emocionado— Respondió, Anton era bastante entusiasta, yo también, pero el me ganaba, siempre le encontraba el lado bueno a todo, nunca dejaba de tener esa linda sonrisa en su rostro.
Anton es un chico lindo, tiene el cabello negro y largo, es alto, su piel pálida y suave, y sus ojos de un color gris.
—¿Quieres que almorcemos juntos?, Hay un sitio que me gustaría probar, dicen que es muy bueno— Le digo mientras pongo carita de niña pequeña.
—No me pongas esa cara Anne, tenemos tres meses sin vernos, me hace falta estar con la mejor amiga de todas— Me dijo con una sonrisa en su cara, sin duda tengo suerte de tenerlo.
Nos conocimos en el jardín de niños, y desde entonces hemos sido grandes amigos, no sé que haría sin el, es como un hermano para mí.
—Gracias, te adoro, pero hemos llegado, nos vemos luego, si?— le dije mientras caminaba despidiéndome con la mano, Anton estudiaba derecho, por lo que el también debía ir a su salon.
—¡Adiós Anne, te adoro!— me dijo antes de entrar.
Cuando pase por la puerta pude observar a mis compañeros, algunos ya estaban en sus lugares, otros solo charlaban de pie, por lo que supuse que el profesor aun no llegaba. Tome asiento al lado de una chica , se veía de mi edad, de piel un poco más oscura que la mía, cabello corto y color marrón, ojos en un tono verde con toques de marrón claro, sin duda era muy linda. Cuando termine de acomodar mis cosas, preguntó:
—Tambien es tu primer día?—
—Así es, mi nombre es Annelisse, pero puedes decirme Anne— asentí mientras sonreía.
—Yo soy Nicolette, un placer—
Cuándo iba a responder, entro un señor ya pasado de edad, con maletín, y unas gafas. El profesor, su nombre era Luis, luego de la presentación, empezó a anotar unas pautas para nuestro primer trabajo de investigación que sería en pareja- y yo que pensé que sería tranquilo, por ser el primer día, ah- . Después de anotar, Nicolette me preguntó:
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°Zerstörung°
Random¿Creerías que tú hombre ideal, el que te bajaría la luna, las estrellas y toda la galaxia podría convertirse en el causante de tus peores pesadillas? La respuesta sería un sí, nunca terminamos de conocer a las personas... Llegué al infierno disfraza...