𝐪 𝐮 𝐢 𝐧 𝐜 𝐞

1.2K 229 89
                                    

fargan relación

la combinación de todos mis sentimientos apenas podían hacerme caminar, sólo me arrastraba por los pasillos mientras toqueteaba mis labios como si hubiesen sido bañados en oro puro, fue una sensación tan exquisita que nunca había sentido con algui...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

la combinación de todos mis sentimientos apenas podían hacerme caminar, sólo me arrastraba por los pasillos mientras toqueteaba mis labios como si hubiesen sido bañados en oro puro, fue una sensación tan exquisita que nunca había sentido con alguien, ni con mi novia.

mierda.

-dulce.. -dije al aire, sintiendo como mis belfos se ensuciaban tras susurrar su nombre, lo que hice no era digno de admirar, y debía cambiar eso lo más antes posible.

ahora que recuperé fuerzas, comencé a correr de vuelta hacia el escenario, rezando para nadie que haya visto el beso le estuviera contado, aquello debía salir de mis labios, no quería que alguien que no tenía nada que ver en esto, le pusiera leña al fuego de una manera tan idiota.

los jueces se despedían entre ellos al igual que los bailarines, me sorprendí, eso significaba que no había pasado mucho tiempo desde que alexby salió corriendo del lugar y yo intenté ir a buscarlo, pero yo lo había sentido como si hubiesen pasado horas.

el efecto del amor.

-gracias, nos vemos -escuché otro tono de voz con el que se dirigía a los señores, fruncí el ceño, era más dulce, con una pizca de inocencia, ¿desde cuándo no me trataba así?

esperé unos minutos detrás de las enormes cortinas para que se terminara de despedir de todos, pero demoraba más de lo habitual, haciendo que poco a poco perdiera la paciencia. en cuanto finalizó en último agarre de manos con la animadora, llevó sus ojos hacia mi y corrió con una sonrisa en su rostro, parecía contenta, y me alegraba por ella.

-fargan, me dijeron que tuve opiniones muy buenas -habló mientras me abrazaba y acariciaba mi espalda, yo correspondí aquel primer gesto, siempre hacia bien una muestra de afecto. -bueno, me dijeron que debía controlar mi vocabulario, pero todo bien.

aclaré mis cuerdas vocales al toser. -dulce, tengo que decirte algo muy importante.

su rostro cambió de actitud al fruncir sus cejas y labios, ahora más atenta a mis palabras. se alejó un poco de mi para mirarme fijo a los ojos mientras sacudía un poco su vestido, aquello sólo lo hacía de distracción para que la curiosidad no le carcomiera por dentro. -dime, fargan.

los nervios nublaron mi vista, logrando que comenzaran a parecer cada momento bello que tuve con ella en su tiempo, lindos recuerdos que sólo se quedarán con ese nombre, porque aunque mi cerebro me estuviese jugando una mala pasada, esta vez debía escuchar a mi corazón, que latía en una sintonía muy distinta y más agradable cuando estaba con alexby, dándome a entender de quien realmente estaba enamorado. el corazón no tiene ojos después de todo, y por eso lo hace más mágico.

-lo siento, pero siento que lo mejor para nosotros es terminar -sus ojos se abrieron más de lo normal al escuchar aquellas palabras que en su momento prometí nunca soltar. -ambos sabemos que ya no sentimos lo mismo, lo veo en tu mirada, en mis sentimientos -parecía neutra a la conversación, sin una pizca de tristeza o felicidad, hasta me atrevería a jurar de que se veía un poco enojada. -por lo que no debemos alargar una relación que no va a prosperar, cortemos por lo sano, ¿vale?

bajó la mirada a sus pies, perdiéndose en ellos, como si no me hubiese escuchado nada de lo que dije, supuse que fue una noticia inesperada, y tal vez le dolió más de lo que me imaginaba, haciéndome sentir mal. me acerqué a ella para darle un abrazo en señal de compasión, pero nada más acerqué uno de mis pies a su cuerpo, sus uñas encarcelaron pequeñas partes de mi camisa y me atrajeron a su rostro envuelto de una emoción indescriptible.

-fargan, te juro que si me dejas por el puto de alexby, me las vas a pagar -su mirada penetrante intentaba comerse la mía, nunca había visto aquella actitud tan tóxica por parte de mi, ahora, ex novia, y eso me hacía cuestionarme varias cosas del pasado. -no me puedes cambiar por un gay, ¿me oíste?

siempre me había molestado escuchar cada comentario denigrante hacia mi mejor amigo, pero ahora que hice visible mis sentimientos, cada palabra hiriente que era dirigida hacia él, me dolía el doble, por lo que no permitiría que vuelvan a insultarle, no importa que tan amigo mío fuese.

-tú has lo que quieras, pero no trates así a alex, ¿oíste?, él no merece tratos tan bajos sólo por no ser igual de mierda que tú -tragué saliva. -y por último; yo decido con quien o no estar, ¿vale?, y he decidido no estar contigo -frunció el ceño e hizo berrinches en un último suspiro para intentar ser tierna y le perdonase por lo que había dicho, pero no iba a caer tan fácil, ya no. -mejor pírate, que estoy cansado.

voces aumentaban y disminuían a la vez en los pasillos que estaban a un lado de nosotros, la chica había dejado de amenazarme luego de unos minutos en los que mis oídos se hicieron sordos, no quería perder tiempo valioso escuchando sus amenazas vacías, debería aprovechar cada minuto en una disculpa para que alexby supiese que todo lo que sentía por él era verdad, que no era una etapa como le había dicho hace unos días en el cine.

soy tan idiota.

-oye, no llores...

la venda en los ojos que nunca me dejaron quitarla, me hizo casi perder al único chico quien siempre estuvo para mi. siempre que me comportaba como un gilipollas y cometía alguna estupidez, ahí estaba para arreglar mis problemas mientras me retaba, siempre que tenía que desahogarme, ahí estaban sus brazos sin peros ni reclamos, me esperaba con una sonrisa triste en la cara para acariciar mi espalda mientras descargaba todo en su cuerpo, y extraño tanto eso.

-perdón -me reí sin ganas, intentando quitarle la incomodidad a la situación, y de paso para retirarme las pequeñas y chivatas lágrimas que paseaban por mis mejillas. -me vino la pena, ya sabes.

su pequeño cuerpo abrazó el mío en un intento de consuelo, yo sonreí, hace mucho tiempo no sentía eso, un cariño puro, sincero, y sabía que sólo en él lo encontraría. sus brazos envolvieron de forma leve mi cintura, su mejilla se acolchó en mi pecho, y cuando sintió mi corazón acelerarse ante su muestra de afecto, sus comisuras se elevaron en una tierna y suave sonrisa. -tranquilo, fargan -cerró sus ojos en cuanto sintió mis brazos en su cuello, quería sentir su aroma combinarse con el mío, era un sentimiento inexplicable, pero sabía que siempre quería experimentarlo. -no tienes que decir nada, ya entendí que no fue tu culpa aquel arrebato que tuviste hace un rato -nuestros rostros se miraron entre ellos al unísono, haciendo crear una burbuja agradable que nadie estaría dispuesta a romper. -porque, después de todo, lo de adentro no se controla -y cuando tocó mi corazón para que me diera cuenta de lo que estaba hablando, le besé, interrumpiendo su habla.

y esta vez, dejamos que nuestros colores del alma se explayaran, burlando a la timidez que amenazaba el separamiento de nuestros labios, sólo sonreíamos, felices a la vida, y a aquel momento tan bello que nos regaló en un ambiente tenso, para desestresar nuestros cuerpos.

y esta vez, dejamos que nuestros colores del alma se explayaran, burlando a la timidez que amenazaba el separamiento de nuestros labios, sólo sonreíamos, felices a la vida, y a aquel momento tan bello que nos regaló en un ambiente tenso, para dese...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
contemporary ; fargexby Donde viven las historias. Descúbrelo ahora