Al llegar al famoso bar de la esquina pudimos ver muchas caras "conocidas" ya que la mayoria eran del instituto.
-¡Chicas, venid aquí hay sitio!- Dijo Max con una voz muy grave
-Ya vamos -dijeron Alejandra y Sara a la vez
Al llegar a la mesa nos sentamos, y casualmente yo y Lucas estabamos uno al lado del otro.
-¡Camarero!-Chilló Sara
-¿Si?
-¿Puede tomarnos nota?-Preguntó Marcos mientras se tocaba una cicatriz de la barbilla
-Claro ¿que quieren?
-1 de carne, 2 de jamon....
Al acabar el camarero se fue a prepararlo.
-Bueno...y...¿que tal el primer dia de instituto te ha gustado?-Me preguntó Lucas sin que nadie mas le escuchara
-Eh...muy bien la gente es muy sociable -Dije intentando ocultar una risita nerviosa
-¿1 de carne? ¿y 2 de calamares? ¿y....?-Nos interrumpió el camarero
Al terminar el segundo plato intenté alcanzar una servilleta con tan mala suerte que le dí un codazo al vaso, derramando todo el agua sobre su ropa y parte de la mia.
-¡Ah!...em... lo siento mucho de verdad -Dije sonrojándome
-Oh! No tranquila-Respondió él
-¿Seguro?,¿quieres alguna servilleta para limpiarte?
-No hace falta en serio tranquila-Dijo guiñandome un ojo.-Está bien - le dije -¡Bueno yo me voy !-dije yo aun sonrojada -Necesito cambiarme
-Espera yo tambien lo necesito.Hasta mañana chicos -Dijo Lucas
-Adios -Dijeron todos
Durante el camino a casa charlamos sobre los estudios y nuestras relaciones amorosas que visto lo visto ninguno podiamos presumir. Cuando ibamos a separarnos para ir a nuestras casas, insistió en acompañarme y yo accedí encantada. Al llegar a la puerta de mi casa nos dimos dos besos y sin separarnos nos despedimos con un "hasta mañana" pudiendo sentir su cálido aliento sobre mi cuello lo que hizo que un escalofrío recorriera todo mi cuerpo.
Pero de repente al girarme empecé a oir gritos de Lucas y algo tapó mi visión y seguidamente caí inconsciente
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"Zipi y Zape"
Teen FictionNoa y Emma eran dos amigas que se conocian desde pequeñas y desde siempre eran apodadas como "Zipi y Zape" debido al radiante rubio de Emma que contrastaba con el intenso marron avellana del pelo de Noa. Ellas comenzaban su ultimo año de instituto...