12 1 4
                                    

Luego de por fin atravesar el Desierto de Puré Instantáneo, ambos caminaron durante 3 horas hasta encontrarse con el enorme y peligroso Volcán de Chocolate.

- ¿Hay que... pasar por esa cosa? - pregunta Young Mirko, a quien la idea de atravesar un volcán no le parecía muy buena.

- Sí, tranquilo, va a ser fácil - le dice Billie totalmente confiada.

- Entonces... ¿Lo rodeamos? - las palabras de Mirko hacen reír a la chica.

- No, tonto. - empieza a caminar y él la sigue - Hay que pasar por arriba.

- ¿¡Cómo!? - se altera el chico, casi se desmaya del susto.

- Así - Billie silva y el Conejo de Pascua los toma a ambos con sus grandes manos para luego lanzarlos con mucha fuerza.
Loa gritos de terror de Mirko se debían escuchar hasta en otra dimensión, mientras Billie parecía de lo más calmada.
Finalmente los dos aterrizaron en el borde del volcán, Mirko intentaba recuperar el aliento mientras la muchacha se acomodaba la ropa y el cabello.

- ¿Viste? No fue... - dejó de hablar en cuanto sintió sus piernas temblando, estaba resbalando. Intentó usar sus brazos para mantener el equilibrio y logró tomar una de las manos de su compañero, quien la mira extrañado y al darse cuenta de la situación se altera y entra en pánico.

Con ambas manos sujetó a Billie y usó todas sus fuerzas tratando de hacer que la chica no caiga. Estaba totalmente asustado. No sabía cómo iba a continuar con la misión sin Billie a su lado. Finalmente logró salvarla y la retuvo entre sus brazos, con algunas lágrimas cayendo de sus ojos.

- Gracias... - dice Billie sorprendida, aún atónita y con la respiración agitada por casi haber muerto. Mirko no dice nada y la abraza con más fuerza, acariciando su suave cabello.

Luego de unos segundos, se separan y sus miradas se cruzan, haciéndolos sonrojar, miran a otro lado para disimular.

- Bueno... ¿Ahora qué? - pregunta Young Mirko avergonzado.

- Tenemos que cruzar al otro lado del volcán - explica ella.

- ¿Cómo lo vamos a hacer sin el Conejo de Pascua?

Antes de que alguno pudiste decir cualquier cosa, la mitad de un huevo de chocolate aterrizó justo enfrente de ellos, flotando sobre el caliente chocolate derretido del volcán. Mirko se muestra confundido ante esto y Billie ríe un poco mientras se sube al "bote".

- Vamos a ir en esto. - explica - Dale, subí.

Dudoso, el chico se sentó junto a ella y el barco de chocolate empieza a moverse.

- El chocolate no se derrite en chocolate... al menos no tan rápido - le cuenta.

En casi media hora llegaron al otro lado del volcán y bajaron del huevo de pascua, que segundos después comenzó derretirse y pasó a ser parte de toda esa lava de chocolate.

- Ahora... ¿Listo para rodar? - cuestiona la chica.

Mirko frunce el ceño con confusión, no obtiene respuesta: Billie ya se había tirado y estaba rodando colina abajo.

- Está loca... - suspiró y se tiró también.

Llegan de nuevo el suelo y se acomodan las prendas, se limpian un poco la cara, se miran y comienzan a reír.

- ¡Estás loca!

- ¡Fue divertido!

Se calmaron y continuaron con su camino.
Estuvieron días andando, comiendo lo que encontraban y conociéndose un poco mejor.

- ¡Llegamos! - exclamó Billie al ver parte del gran faro que parecía una lata de Monster Blanca - ¡Estamos cerca! - empieza a correr emocionada con Mirko detrás. Al llegar todo esta extrañamente tranquilo.

- Parece que llegamos primero - el muchacho sonríe orgulloso.

- ¿Están seguros? - oyeron una horrible voz. Al mirar, se encuentran con la quimera y Meduza.

- Váyanse las dos - dice Mirko desafiante, pero ambas se lanzan a atacarlos, desatando así una intensa y épica pelea.

Voló kétchup, mayonesa, pan rallado y un poco de todo. Hubo golpes, patadas, empujones y más.
Finalmente Billie usa su poder para tirarles mostaza, el aderezo más peligroso de todos, y eso las tiró lejos, muy lejos, tanto que se perdieron.

Inmediatamente, Young Mirko dejó su espada y escudo de lado, y se lanzó al mar. Nadó y nadó, hasta llegar a lo más profundo del Mar de Monster, donde observó algo brillante y se acercó: era el Rubí Caramelizado. Lo tomó cuidadosamente y nadó de vuelta a la superficie.
Se acercó a Billi y le mostró el Rubí, ambos se sonrieron y bailaron para celebrar.

Volvieron al Castillo del Rey Palito de La Selva y le entregaron el Rubí. De un momento a otro, aparecieron miles de riquezas, lo cual obviamente los alegró. Young Mirko le pidió matrimonio a Billie y ella aceptó encantada.
Se casaron una semana después, se construyeron una hermosa casita y luego tuvieron cuatro hijos, un perro, dos gatos y unos peces.

Fin.

brownie-girl unas genias somos 😎

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 28, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Una gran aventura. Mirko y BillieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora