- ¡Dios, enserio no soporto a ese estúpido profesor, ni siquiera dije nada! – Digo con una cara de frustración.
Cuando llego a la oficina veo a su secretaria hablando por teléfono muy coqueta. Cuando nota mi presencia se sonroja y me sonríe con vergüenza cuelga y luego se gira completamente hacia mí y me dice:
- ¿Qué haces aquí cariño?
El profesor Thomas me envió para acá ¡y ni siquiera hice nada!
- Siempre es lo mismo con ese profesor, te entiendo, así era en mis tiempos, toma asiento mientras lo esperas.
Hago lo que me pide y me siento.
Volteo el rostro, y veo como se acerca una persona la cual no esperaba ver en ese momento. Era Chris, el señor Thomas también lo había enviado a la oficina del director.
¿Qué haces aquí? - dije en tono confuso.
- Creo que fue injusto lo que hizo el profesor, así que vine a hacerte compañía.
¿Enserio? No tenías que hacerlo. Es tu primer día, seguro ya te tienen en la lista negra.
- Ñe, soy muy aplicado, los próximos días serán buenos.
Bueno, quizás ser aplicado te salve de la lista negra de ese tonto profesor.
- Puede ser que sí, puede ser que no, todo en esta vida es posible.
Tienes razón- digo con un suspiro cansado
- ¿Y qué hacemos aquí entonces? ¿Esperamos al profesor o nos vamos corriendo a comer algo? porque realmente tengo hambre – dice con una cara bastante absurda.
Mmmm – murmuro pensativa, también tengo hambre y no puedo ignorar ese hecho. Vamonos.
Y pues... nos escapamos. Salimos de la escuela y fuimos a comprar tacos porque pues, resulto que le gustan los tacos tanto como a mí. ¡Pero no! Le prohíbo al amor volver a entrar en mí. Además, lo acabo de conocer, en su primer día de clases fue enviado a la dirección... Lo hizo por mí, pero eso no viene al caso, no se lo pedí.
Luego de eso volvimos a la escuela, y resulto que el señor Thomas se resfrió.
Y tuvo que irse a su casa. Así que volvimos al salón de clases y unas horas después nos fuimos a casa.
En el camino íbamos: Kenzie, Cesar, Alya, Jeremiah, Jazmín y yo. Siempre nos íbamos juntos, solo que esta vez había un nuevo integrante en nuestro circulo, y ese era Chris.
Cada uno se quedó en su respectiva casa y Chris y yo nos quedamos caminando solos.
- Para ser el primer día no fue tan malo. – Dijo Chris con una sonrisa en el rostro.
Sí, fue un buen comienzo. Solo que, para la próxima, no te arriesgues así por mí, se arreglármelas sola. – Dije en tono de orgullo.
- Oh, discúlpeme, señorita Harper. – Dijo el sonriendo y con tono sarcástico.
Llegué a casa, me despedí de Chris, y luego él fue a la suya. Era tan extraño, era muy atento con todo, como si demostrara cierto interés en mí, pobre chico, no quiero ilusionarlo, pero tampoco quiero estar con él, al menos no por ahora, y si es nunca mucho mejor. No estoy dispuesta a pasar por lo mismo otra vez.
Papá tocó la puerta de mi habitación para decirme que ya era hora de cenar. Bajé rápidamente las escaleras, y pues... me tropecé con uno de los juguetes de los gemelos, (estoy harta de decirles que no dejen sus cosas tiradas por la casa) - Dije en mi mente mientras rodaba por las escaleras.
Al llegar abajo, estaba aérea, mareada, adolorida... No podía pararme sola, luego llegó alguien a ayudarme y pensé que era papá.
- Deberías tener más cuidado al bajar las escaleras. – Dijo el entre risas.
Deberías decirles a tus hijos que no dejen sus cosas tiradas. – Dije en tono molesto.
- ¿Hijos? ¿Cuáles hijos? Creo que soy muy joven para tener hijos.
Levanté la mirada, y vi a Chris con una sonrisa burlona en el rostro, me extiende su mano, la tomo y me levanta
Gracias – Digo con el ceño fruncido - ¿Qué haces aquí?
- ¿No sabias? Tu madre nos invitó a cenar para darnos la bienvenida
Oh – Digo sorprendida – Mamá no me había comentado nada.
- Maddie, Chris! – Exclamó mama desde la cocina - vengan ya, la cena esta lista.
Nos dirigimos a la mesa del comedor y tomamos asiento, me doy cuenta de que estoy sentada al lado de mi mamá y Chris se encuentra al frente mío y lo pillo mirándome.
¿Que estará pasando por su cabeza? - digo en mi mente y volteo la cara viendo a papá traer la cena.
- Mmmm huele delicioso – Dicen los gemelos al mismo tiempo, al darse cuenta de lo que hicieron ríen y chocan sus pequeños puños y todos reímos al ver la acción de los pequeños.
- Bueno... - Continuó mi padre.... - ¿De dónde son ustedes?
- Wisconsin -Responde el padre de Chris seguido de una sonrisa.
Y así fue el transcurso de la cena...
Bueno, mama y papa terminé – Digo levantándome de mi asiento para llevar el plato a la cocina.
- Yo por igual – Dice Chris levantándose y siguiéndome hacia la cocina.
Llego a la cocina y empiezo a lavar mi plato para luego dirigirme a mi habitación. Cuando termino y trato de girarme siento la respiración de Chris en mi cuello y los nervios no tardan en llegar.
Chris ¿qué haces? - Pregunto con la respiración agitada.
- Emm no estoy haciendo nada Maddie. ¿Te estoy incomodando?
SÍ, invades mi espacio personal – Dije mirándolo a los ojos.
Me doy cuenta de que sus ojos están sobre mis labios.
- Disculpa – Dice echándose para atrás no quise incomodarte.
Tranquilo no pasa nada – Digo pasando a su lado para irme a mi habitación.
Que fue todo eso y que acaba de pasar – Pienso subiendo las escaleras.
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Yeii Listo el tercer capitulo!
Espero que les haya gustado
Disfrutenlo!
Ig: aslheysa30
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Una Segunda Oportunidad
Teen Fiction¿Podre decir esa palabra de nuevo? Rompieron mi corazón por primera vez y desde ese entonces... Me aterra. Primera historia... ¡Espero que les guste!