Estrellas fugaces.

Parte III: Ruinas.

Día 13.

Siento aquella necesidad de escribir, sólo tener ánimos o ganas para escribir porque hoy solo quiero hacer eso.

 En esta semana fui a jugar basquet con Noelia, hermana de Karen. Conocí a un chico, bah, es obvio que uno siempre va a conocer a alguien pero siempre hay alguien especial, no tengo idea porque acabo de escribir que es especial y porque no quiero borrar esa palabra, en fin, se llama Ariel y desde que lo vi me pareció familiar como también algo me gusta lo debo admitir, pero no es que me encante es solo me gusta y ya; tampoco me gusta porque sea super lindo, a mi me gusta pero va más haya de eso... tiene algo que me gusta, no sé, quizá por su mirada o su voz. En fin, él tiene 14 años, por eso no tiene que gustarme pero a la vez no pienso hacer nada para que deje de gustarme y no sé si yo le gusto, tampoco me importa, o sea... cuando alguien me gusta arriesgo todo y me da igual la edad. Y no voy hacer nada por alejarme de él, ya que una parte mía necesita aferrarse a alguien; y esa parte quiere conseguir aquello que parece ''inalcanzable'' mientras la otra parte también necesita sentir dolor o desamor, por ejemplo si él me gusta más y lo veo con otra chica me sentiré diminuta, aun que también puede que me de igual - que es lo más probable - pero es sólo un ejemplo. En fin, Ariel es quizá un poco más alto que yo o de la misma estatura, cuando jugamos me cubre y lo cubro, hoy sin querer lo arañe y obviamente me disculpe, luego de terminar de jugar nos fumos a sentar con Noelia en un banco que está atrás del aro. Ariel jugo por un rato, le presto a Noelia su celular para que escucharamos música y cuando dejo de jugar, luego de ir a tomar agua, se quedo parado alado mio viendo como jugaban y después se sentó alado mio, Noelia se fué a jugar y yo m quedé ahí con Ariel y del otro lado estaba Matias, hubo un momento cuando Ariel apoyo sus brazos en mi pierna cuando le estaba mostrando algo a Matias y me sentí extraña, bah no fue el único momento también era como si por momentos evadiera mi espacio pero supongo que es algo suyo, ya saben... involuntario de él. La verdad no tengo idea si le gusto o no, supongo que no, que él solamente es así además yo ni siquiera me esfuerzo por gustarle porque estoy callada y hablo muy poco. No termine de escribirlo, es morocho, juega muy bien al basquet, es amable, es muy tranquilo, escucha rap y... y no sé que más, bueno... que se yo.

Hoy uno de los chicos con los que jugamos, amigo de Matias; Ariel; y otros, tenía un chupón en el cuello y se le notaba mucho, lo cual me hizo pensar sobre él y su novia, sobre el fin de semana... fue como si estuviera en la tribuna mirándolo desde el otro lado de la cancha, pensar en su cuello con esa mancha morada e imaginarme a su novia encima suyo, a él sonriendo o quizá con una cara de placer y a su novia también riéndose, de noche... en una plaza o en alguna fiesta, quizá este sabado... ellos así y yo sin nada, fue como también verme a mi misma, y volví a pensar en eso cuando lo vi de nuevo porque se acerco hablar con Ariel, y al principio pensé en Matias, mi compañero, porque este chico, Peter le dicen (no sé porque) es alto y delgado como él, me reía por dentro porque me imaginaba a mi misma con Matias, yo haciéndole un chupón a él, besádolo... y luego en otro momento pensé en lo aburrido que era no tener a alguien, y lo veía de reojo a Ariel que tampoco tenía a alguien quien le hiciera chupones - no sé porque llegue a pensar eso, últimamente pienso muy poco - y deseaba tener algo. A veces necesito tanto de alguien; cualquier cuerpo, no importa el tamaño de sus manos, cualquier detalle... que más la edad, la apariencia o cosas de esas, llegue a un punto en el que me iría de la mano a la salida de una fiesta a pasar la madrugada en cualquier cama, es como si de verdad ya ni me concentrará en lo que tiene que ver con conocer a alguien... es como si los cuerpos hablarán más que las palabras, como si las caricias se hubieran vuelto poesía y los besos... sinceramente me pasa que solo siento deseo y nada más, es decir, no siento amor ¿entienden? Si realmente me gustará alguien de verdad me esforzaría por conocerlo, por decirle ''Nos veamos esta tarde'' y ya, a plena luz del día, sin maquillaje para hablar toda la tarde, pero no es así; siempre de noche, ocultando quien soy pero a la vez no oculto quien soy porque no tengo miedo de que sepan los demás como soy; también creo que si alguien me quiere a estas alturas y se esfuerza en conocerme cedería; y me dejaría conocer, pero ¿De qué sirve el amor si no es mutuo? es como la mesa de tres patas; es como una heladera sin puerta; una mariposa sin alas... es inútil. Pensé en Maxi, me preguntaba que era lo que habrá sentido por mi, estaba segura que sí pensaba en mi... y que piensa en mi de vez en cuando... me preguntó, ahora, si los chicos con los que he estado se habrán sentido utilizados o algo por el estilo, pero supongo que debo dejar de lado esa pregunta... porque me la toparé más adelante muchas veces; el miedo al compromiso supongo que es dificil de superar pero que a la vez estoy dispuesta a superarlo, aunque tengo esa sensación que al ''superar'' aquello perderé y dañaré a muchas personas... es como si aquel miedo me hubiera llevado a ser indiferente con los sentimientos de los demás como los míos porque siempre es un ''no va a durar'' ; ''no lo intentes porque solo lo vas a ilusionar.'' Las últimas veces lo intentaba porque tenía aquel pensamiento de vivir el día a día, dejarme llevar... y no me importaba lo que hacía, de verdad vivía el momento y es fantástico. Me doy cuenta que lo que escribó o escribía no tiene nada de interesante... es solo una vida más, una común y rutinaria vida más; nunca me ocurre nada interesante o tal vez no estoy prestando demasiada atención, creo que Ariel es lo único interesante que me ha ocurrido hasta ahora, en realidad no es él si no como lo veo yo; como lo siento, pero tampoco es muy importante porque si yo quisiera directamente lo dejaría de lado pero lo necesito, y es como si a veces Dios de lanzara un salvavidas; y Noelia es eso, una cosa te lleva a la otra, también el trabajo es algo magnifico de lo cual estoy muy agradecida. Me había olvidado de agradecer.