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Yuri

Me removí incómoda en mí asiento del autobús. Ahora Yoongi no estaba a mi lado era Jin quién dormía al igual que yo. Restregué mis ojos y estiré mis brazos. Yoongi me había quitado los zapatos y tenía una manta cubriéndome. Mi vestido se había subido por debajo de la cobija y mi cabello sujetado por una cola de caballo, estaba hecho un desastre. Necesitaba urgentemente ir al sanitario.

- Cielo santo... - protesté.

- Veo que has despertado - la voz de Jonnie a mis espaldas me sobresaltó.

- Sí... ¿Cuánto dormí? Necesito ir al baño urgente - sobé la parte en dónde está mi vejiga casi llorando.

- Has dormido casi tres horas. No te preocupes, podrás liberar esos líquidos. Pronto llegaremos a la primera parada. Podrás ir al baño - lloriqueé.

- ¿Falta mucho? - el autobús se detuvo.

- Ahí tienes tú respuesta - chillé de felicidad.

La profesora se levantó de su asiento y ordenó ir todos a los respectivos baños. Antes de ir. Tomé a Yoongi de la mano y me lo llevé hasta los baños. Ahí él se separó para los respectivos sanitarios. Al entrar al de las damas, todas las chicas me miraban. Decidí ignorarlas y entrar a un cubículo. Al hacer mis necesidades y comenzar a peinarme más o menos ahí, pude notar como ya no había nadie. Al empujar la puerta, pude notar que esta había sido atascada desde afuera. Suspiré.

- Niñas estúpidas - dije con fastidio.

Al parecer no se dieron cuenta de que los cubículos tenían espacios por debajo. Lo suficientemente ancho para que pasara una persona. Lo hice. Gateé hasta el otro cubículo y abrí la puerta. Me ví en el espejo tenía la coleta aún mal hecha y la corregí. Lavé mis manos y Yoongi entró en el baño.

- ¿Listo? - asentí, pero aún así me acerqué a él y lo abracé.

- ¿Por qué son tan malas conmigo? - pregunté en un susurro sobre su hombro.

- A ver, Yu. Claramente sienten envidia de tí. Eres hermosa. Muy amable, das unas mamadas de miedo - lo golpeé en el hombro -. Lo siento eso no iba ahí. Sobre todo, andas siempre conmigo, sabes que todas se morirían por estar a mi lado como tú. Es por eso.

- ¿Soy hermosa? - asintió.

- La más hermosa de todas - me acarició una mejilla y me besó en los labios.

- Está bien, vámonos Romeo - bromeé un poco jalándolo del brazo hacia afuera.

Caminamos por todo el parqueo de la gasolinera dónde quedamos y subimos al autobús. Me senté en mí asiento y Yoongi a mí lado. Al parecer Jin ya había despertado de su letargo.

- Yoongi, tengo hambre - protesté.

Yoongi sacó de su mochila un paquete de Cheetos y varias sodas. Crucé mis piernas en el asiento y abrí mi lata de soda. Yoongi había abierto el paquete de Cheetos y había compartido con los chicos. Ellos tomaron un poco e intercambiaron un poco de sus bocadillos. Partes de sándwiches y ensalada de pollo, reposaban en el reposabrazos de los asientos.

[...]

Al haber terminado de ingerir caramelos y otros tipos de comida basura. Me quedé dormida otra vez, pero con la diferencia de Yoongi también durmiendo a mí lado. Sentí un ruido y al abrir los ojos pude ver a Jimin tomando una foto de ambos dormidos.

- ¿Puedo verla? - pregunté en un susurro.

- Claro - este me respondió de la misma manera.

El por suerte había traído una cámara Polaroid, ahora la instantánea reposaba en mis manos viendo la hermosa foto. Yoongi dormido con sus cabellos desordenados y su cabeza sobre la mía, era sublime.

Secrets [+18] MYGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora