Memorias I

capitulo 3

 Las paredes eran completamente blancas, Hannan se había despertado hace algunos minutos encontrándose con la pulcra habitación de hospital, solo se sentó ahí esperando que alguien llegara o simplemente esperando a una enfermera. No era su primera vez en establecimientos parecidos, la ultima vez fue porque su hermano se había sobre pasado es noche, dejándola en un estado casi moribundo, pues había discutido con su padre y eso lo había hecho enojar demasiado.

Acaricio sus brazos que ya no estaban cubiertos por ropas grandes o abrigadas, con la bata del hospital pudo ver mejor su cuerpo demacrado, lastimado, lleno de cicatrices y algunos hematomas que no habían terminado de irse. Por esa razón siempre usaba el uniforme de invierno, no quería que nadie viera su asqueroso cuerpo, no quería que nadie preguntara ni se entrometiera, era un martirio en los días calurosos pero era mejor que tener que dar explicaciones o mentir sobre lo que pasaba con ella. Había pensado hasta en usar maquillaje varias veces pero su hermano y su padre tenían la mínima consideración de no causar estragos en lugares visibles.

-Oh, ya estas despierta- Dejando ver a el chico de rubia cabellera, su cara mostraba un mueca de lastima y tristeza, Hannan odiaba esa expresión, siempre odio a las personas que la miraban con lastima o pena, ella no necesitaba la empatía de nadie.

El chico se acerco con esa sonrisa que parecía hacer la habitación mas iluminada- Hace rato estoy despierta...- el rubio se sentó en la silla a lado de la cama y la miro algo pensativo.

-Pudiste haber llamado a la enfermera- dijo haciendo un ademan al botón para llamar a una enfermera que había siempre en los hospitales.

-Quería estar sola- Hannan quiso taparse con las sabanas para esconder su cuerpo lo máximo posible.

Toshinori quiso decirle que era inútil taparse, que el había visto ya ese cuerpo marcado de pies a cabeza, que estuvo tres largos días luego de salir de la escuela esperando que se recuperara, que espero sentado en esa silla, que hasta se había hecho amigo de las enfermeras de todas las veces que la había esperado en ese hospital... pero no dijo nada...simplemente la dejo hacerlo, podía ver que le daba confianza que nadie supiera de esas horribles marcas.

-¿Cómo te sientes? ¿Necesitas algo?- pregunto el mas alto regalándole otra sonrisa gentil.

-Me siento...cansada, con algo de hambre- dijo sintiendo ese vació en su estomago, que indicaba que no había comido desde hace un buen rato.

-Supongo, luego de tres días de dormir- hizo un ademan para levantarse pero la castaña solo paro sus movimientos con la mano, con una mirada que inspiraba preocupación- Te buscare algo para comer y a algunas enfermeras si es posible-.

-Estoy bien, quédate...hazlo luego- dijo sin mirarlo.

El rubio se volvió a sentar sosteniendo la mano de la chica, sus mejillas se había colorado para ese momento, la escena que sin querer se había tornado algo romántica para el rubio que ya estaba algo nervioso.

-E-Esta b-bien p-puedo quedarme- respondía avergonzado mientras que la castaña solo lo miraba con una cara de poker y algo confundida por el tartamudeo.

El hielo ya se había roto y hablaron un poco, mas bien Yagi hablo y Hannan solo contestaba con simple palabras pero funcionaba para los dos, el ambiente era calmado, por primera vez en un largo tiempo la castaña solo escuchaba un dulce voz hablarle como si fuera un ser humano, No como un juguete, No como una bolsa de boxeo, simplemente como si ella de verdad fuera un ser humano. Hannan se dedico a mirar al chico, nunca lo había hecho detenidamente, simplemente lo vio superficialmente las ultimas veces que lo había encontrado...era alto, mucho mas alto que ella, su cabello era rubio, un amarillo bastante vivo y bonito ¿Verdaderamente era japones? Sus ojos eran azules, parecía un héroes salido de un cómic americano eso le pareció algo chistoso para ser sinceros...parecía algo musculado pero no se veía claramente por el uniforme escolar.