Memorias I

Capitulo 1

 Warning: Este capitulo es algo turbio ._.'

-------------------------------------------------------

"Si los héroes existen entonces porque nadie me saca de este infierno"

-Hm, Akiko esto se esta volviendo aburrido...- La chica de ojos afilados y cabello conformadode agua había pateado mucho mas fuerte mientras miraba a su mejor amiga, la cual dirigió su mirada a la chica de cabellos castaños y ojos violetas. Algo en esa chica le producía asco ese rostro estúpido de suplica cada vez que la golpeaban, esas ojeras cansadas, su complexión delgada y pequeña, que siendo casi verano siguiera usando ese largo uniforme de invierno, que tuviera una quirk tan genial y aun así no lo utilizara, simplemente era asquerosa, simplemente era golpeable, molesta.

-Pareciera que no tiene vida ¡Así no es divertido!- Grito la pelirroja mientras se acercaba a las dos chicas que agredían a la mas pequeña.

-Es una lastima, creo que vamos a tener que buscar a alguien mas, este juguete ya se esta por romper- entonces Akiko, la abeja reina de esa banda tomo el cabello de la mas pequeña y empezó a sacudirla- ¿Cuánto puede contener la respiración?

La chica la miro algo confundida hasta que fue arrastrada hasta el retrete donde su cabeza fue metida con fuerza, Hannan intento agarrarse de algo para sacar la cabeza, no era muy buena conteniendo la respiración, pero no había nada de que aferrarse en ese cubículo, termino dando manotazos y golpes al cubículo mientras que sus agresoras charlaban tranquilamente.

-¿Y si la próxima vez traemos a Eiji? Que se divierta con ella y podremos tener mas diversión- Sonrió Inomata apoyada en la puerta del cubículo viendo como Akiko ahogaba a la chica- Oye suéltala creo que esta dejando de respirar- dijo al ver que ya no pegaba manotazos ni hacia movimientos raros para zafarse.

Akiko con una cara de aburrimiento termino soltando a la chica la cual dio una gran bocanada de aire totalmente derrotada "Que asco" estallaron las risas de las tres chicas mientras recogían sus cosas para irse no sin antes llevarse la mochila de la chica.

Se sentía desecha, así era todos los días, no había nada que pudiera sacarla de ese infierno que vivía a excepción de su hermanito Kotaro, un hermoso niño que apenas cumplía un año en ese momento pero aun así era la cosa mas dulce que tenia en su pútrida existencia, era la única razón por la cual ella no cumplía uno de sus mas grandes sueños.

Morir

Ella deseaba con todas sus fuerza MORIR

Pero no podía hacerlo, no dejaría solo a Kotaro con su familia, nunca dejaría que su hermanito pequeño copiara nada de su padre o de su hermano, quería que Kotaro fuera libre, quería salvar a su hermano aun si tuviera que esperar mil años aun así ella no moriría hasta que Kotaro estuviera bien y fuera de peligro.

Se dirigió a los lavabos, se arremango su camisa larga y comenzó a lavarse la cara y cualquier rastro de sangre, y así se fue a buscar su mochila que de seguro había sido tirada a algún baldío cercano o algo parecido.

Camino un largo tramo, busco en los alrededores de la escuela y no se encontraba por ningún lado, lo mas factible era que se la había llevado a casa de alguna para joder sus tareas o algo parecido, no era la primera vez que pasaba. Soltó un suspiro derrotada hasta que lo vio, era un chico alto, algo musculoso, rubio y de unos hermosos ojos azules, llevaba un uniforme de colores grises y verdes. Parecía en compañía de una mujer mucho mayor a el, no podría distinguirla, la mujer estaba a mirando a otra dirección sin dejar que esta viera su cara "Genial se la dieron a sus amigos, de seguro no me lo devolverán".