Pasaron muchos años, aquello que construimos se rompió, se destruyo y ya no es tangible, ya no esta más, me duele saberme rota, sentirme partida en dos. Y que los pedazos aún te amen, me duele esta lejanía pero es lo mejor para los dos. Mi querido regalo del cielo, eso fuiste y seras para mí, no llorare porque termino, sonreiré porque existió.
Me es difícil pensar que ya no somos aquellos niños que jugaban, que se reían, que escribían poesía. Me es difícil ver como todo va cambiando, y lentamente los sentimientos se van secando.
Nunca olvides aquellas conversaciones en la madrugada, en las que nos quedábamos hasta ver el amanecer, en las que nos llamábamos, en las que nos reíamos, teníamos lindos apodos, nuestros planes que quedaron en la nada. Nunca me olvides porque me duele.
Me es dificil aceptar la realidad y ver que tal vez vivimos todo este tiempo en una utopía, ahora debemos ambos seguir caminos separados, y que todo esto quede como una anécdota muy lejana.
