My japanese vampire

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—Las últimas dos clases no te has sentado conmigo ¡Te has sentado con Yuta! ¡Yo soy tu compañera de puesto! —Se quejo Irene quien estaba frente a nosotros, Yuta solto una corta risa y la miro burlón

—Yo soy genial, tu no —La pelinegra le saco el dedo medio y se llevo un regalo del profesor, quedaban unos diez minutos para que terminara la clase pero estábamos sin hacer nada— ¿Vendrás al viaje?

—Saldré de viaje con mis padres, tuvieron que planearlo antes —Apoyo su cabeza en la mesa fingiendo llorar, sin ella el viaje no sería lo mismo y solo estaría con los chicos, que a veces se comportaban como cavernivolas

—Van a salir de uno en uno, cuando los llame para recoger sus exámenes —Dijo él profesor poniendo un montón de papeles en su escritorio, empezo a llamar y a despedirse de los que iban saliendo, fui prácticamente la última en salir y él profesor me vio con una sonrisa cuando me entrego el examen, entendí el porque al ver el resultado— Disfrute sus vacaciones señorita Jones

Todos los chicos esperaban fuera del salón, ansiosos por ver mi prueba, Yuta estaba más tranquilo porque sabía que la nota fue buena

—¿Y? ¿Aprobaste? —Pregunto Mark prácticamente saltando, le di la prueba y grito de la emoción— ¡Nos vamos de viaje!

—Ya lo sabía —Dijo Yuta con una sonrisa, me acerco a él para despeinarme pero solo reí comenzando a caminar a la salida, estaba emocionada, sentía que sería un buen viaje, divertido e inolvidable —Me gusta verte tan emocionada, te ves tierna

—Deja de bromear

—Hablo enserio —Dijo encogiendose de hombros, le di un corto abrazo en agradecimiento— Podría acostumbrarme a esto

—No lo hagas —No quería admitir que abrazarlo me gustaba, no debía por mi bien o si no todos me molestarían por eso— ¡Estoy muy feliz por el viaje!

—Cambiamos el plan, no iremos mañana temprano —Dijo Mark bailando, todos estábamos emocionados por el viaje, unos más emocionados que otros, nos alegraba tener un descanso, el trimestre estuvo muy fuerte

—¿Por qué? —Pregunté sintiendo cómo Yuta me abrazaba por los hombros, por eso le di un golpe en las costillas— Deja de molestar

—Callate —Me acerco más a él, aplicando fuerza a su agarre, no iba a lograr nada intentando alejarme porque él no lo permitiría

—Si nos vamos por la tarde tendríamos que conducir de noche, por eso decidimos que por la mañana —Dijo Tae llegando a su auto, se volteo mirando a Yuta con una sonrisa y dando unas palmadas a su hombro— ¿Puedes llevarla a casa? Debo hacer algo

—No te preocupes, yo la llevo —La sonrisa de Yuta se hizo más grande y mis nervios también, desde hace un tiempo él chico comenzo a ponerme nerviosa, Irene decía que me gustaba pero no podía aceptarlo, no quería aceptar que ese lindo japonés me gustaba

—No es necesario, puedo irme yo sola —Dije tratando de ocultar mis nervios, ambos chicos se negaron y poco después iba caminando junto a Yuta. Los nervios no se iban, las manos me sudaban y el color carmesí de mis mejillas no quería desaparecer, Yuta era muy observador por lo que se daría cuenta pronto y eso no me gustaba

—¿Sabes? He notado que ahora siempre buscas excusas para no estar a solas conmigo y te pones nerviosa cuando estoy cerca ¿Por qué? —En su voz se escucho curiosidad finjida

—¿De dónde sacas eso? ¿Por qué tendría que ponerme nerviosa? Estas mal, Nakamoto —Me burle comenzando a caminar más rápido, solto una fuerte carcajada, me di vuelta y lo vi con una ceja alzada— ¿De qué te ríes?