Estaba sentada en un sillón que está en mi sala, tranquila como siempre, no tenía nada que hacer así que revisaba mi celular como era lo habitual todos los días. Mis papás me avisaron que se acababa de mudar una persona a la casa que está a un lado de la nuestra – vecino nuevo- Pensé. La verdad es que no le tome tanta importancia ya que no llamaba la atención conocer al nuevo vecino.
Sali al patio de mi casa, el cual está en un segundo piso, y sin querer logré mirar el patio de la casa de mi vecino por encima de la cerca. Miré que tenía un perro dóberman, me pareció muy lindo el perro, ya que también tengo dos perros y me gustan demasiado ese tipo de animales. El caso es que me quedé un rato viendo como su perro jugaba en el patio. Todo estaba normal, hasta que lo más extraño y horripilante sucedió en ese momento, el perro se comenzó a tambalear de manera extraña, se sacudía de una forma que llegué a pensar que se estaba convulsionando o algo parecido, pero no, su lomo comenzó a contorsionarse y algo dentro de la piel se movía, unas alas comenzaron a brotar de su lomo, era la cosa más asquerosa que jamás había presenciado. Sus alas eran de un material similar a la piel, tenía cartílagos que la dividían y le daban apoyo, y en la punta de estas, tenía garras, se asemejaban mucho a las de los murciélagos. Yo estaba impactada con aquella escena, entré en shock por unos cuantos segundos, después vi a mi vecino salir a su patio, vio que observé a su perro realizar ese acto tan espantoso. Me volteó a ver con un odio que era inexplicable, corrió hacia dónde yo estaba, reaccioné y corrí dentro de mi casa a buscar a mis papás, cuando los encontré les conté lo que vi.
- Vi al perro del vecino sacar alas de su lomo. Les dije preocupada
- Pero ¿Por qué lo dices? ¿es una broma?. Me preguntaron con cierto tono de ingenuidad y burla.
-No,se los juro, el vecino está loco. Replique con gran preocupación.
Cuando mispapás me iban a mandar a mi cuarto a que me tranquilizara, se escuchó un ruido fuerteque provenía de la cocina y corrimos todos a ver de qué se trataba. Era elvecino quien se había infiltrado dentro de nuestra casa, nos comenzó a gritaren un tono de insultos, pero no le entendíamos, ya que lo hacía en una lenguaque nunca jamás había escuchado, todos estábamos desconcertados y asustados, nosabíamos que hacer. Mi mamá tiene una extraña afición, la cual es coleccionarpiedras extrañas, y las lleva a la casa, lo cual me dio una ida, ya que elestante donde coloca las piedras está a unos cuantos pasos de donde meencontraba, entonces corrí y agarré una piedra de tamaño mediano y se la lancéen la cabeza, el viejo se desmayó por unos pocos segundos, en lo que mis papáscorrían a buscar algo con que atarlo o someterlo, yo me acerqué a ver alvecino, tenía un aspecto bastante extraño, tenía arrugas por toda la cara, supelo era grisoso con unas cuantas canas, también tenía inicios de calvicie, esolo notaba por sus entradas, su nariz era larga y puntiaguda, tenía una verrugaentre la mejilla y el labio superior, sus labios eran pálidos y tenía unasojeras oscuras y profundas. En el tiempo en que estuve observándolo, el abriólos ojos, y de nuevo vi esa mirada de odio hacia mí, no tuve tiempo dereaccionar, me tomó muy fuerte de la pierna y la estiró, lo cual hizo que yocayera al suelo con una fuerza que al momento de caer me sofoqué, no podíahacer nada, estaba totalmente paralizada por el horror y el golpe, voltee a verel techo, recuerdo que lo último que vi, fue al vecino dejar caer en mi cabezala misma piedra con la que lo golpee antes. Rápidamente desperté, estaba en mi cama, todo había sido solo un sueño.Pensé. Como estaba tan asustada, me metí a bañar para relajarme, calenté unpoco el agua, y me introduje en la tina de baño. Paso un rato, terminé debañarme, la verdad es que sirvió poco. Cuando salí, vi unos pies cerca de latoalla que está al otro lado de la puerta de baño, pensé que era una malajugada de mi mente con la oscuridad de la noche y mi preocupación, entoncesabrí la puerta, y vi al mismo viejo de mi sueño, me miraba con el mismo odioque en el sueño, pero sus ojos está vez tenían un tono rojo penetrante,sostenía un chuchillo como de carnicero, trate de rodearlo y escapar del baño,unos pasos antes de salir del cuarto de baño, sentí como el metal perforaba mipiel, era demasiado frío, una sensación tan grotesca e indescriptible, sabíaque todo acabó para mí, era mi fin, me atravesó la espalda dos veces más, y yocaí, vi mi cuerpo unos segundos en el suelo, sentía como la sangre recorría mipiel hasta llegar al suelo, quería llorar, solo una lagrima salió de mis ojos,y vi con tanta impotencia al vecino arrastrarme hasta mi patio, ahí, me lanzóhacia su jardín, me dejó caer desde el segundo piso de mi casa para golpear contodo mi cuerpo el suelo de su patio, tenía tanto miedo, pero no me podía mover,después el bajó con tanta facilidad, ahí me tomó de los hombros y me siguióarrastrando hacia su garaje, su perro estaba ahí esperándolo, me amarró en unamesa y sacó varios cuchillos, y al momento en que estaba por desollarme,desperté.
ESTÁS LEYENDO
Cuando no estoy despierta.
General FictionTrata de dos relatos cortos basados en varios sueños contados por una amiga de la preparatoria.