Prologo

21 1 0
                                    

La pequeña rubia albina corría feliz por la calles abarrotadas del pueblo con su rostro cubierto por una pequeña capucha azul marino

Había logrado huir de sus deberes como princesa heredera para salir y conocer el pueblo, ver con sus propios ojos a su gente y los problemas con los que tendría que lidiar una vez pasara a ella el trono

Estuvo toda la tarde recorriendo las calles,viendo las casas,hablando con los lugareños(obviamente estos no sabiendo que hablaban con la princesa)y comprando una que otra artesanía

Cuando se acercó a los barrios más bajos ya era un poco tarde y la gente ya empezaba a guardarse en la seguridad de su hogar , ella llevaba un rato caminando y ya estaba algo cansada

Buscando un lugar donde descansar , encontró lo que ,al parecer,era una laguna completamente congelada,rodeada por árboles secos cubiertos de escarcha y nieve, las estalactitas de hielo que colgaban de los árboles brillaban con la luz de la luna recién salida dándole al lugar un aspecto mágico

Atraída por esto estaba apunto de poner un pie sobre la superficie helada cuando una voz juguetona e infantil la detuvo

–No entres al hielo,es muy resbaloso,te harás daño–

La princesa se alteró al escuchar eso,no sabiendo de donde provenía la voz pues según ella allí no había nadie

Comenzó a mirar hacia todos lados buscando a la perturbación de su paz,unas risitas la hicieron mirar hacia arriba encontrando a un niño albino sentado en uno de los árboles y riéndose de ella

Eso molesto a la futura reina,quien,evidentemente no se iba a quedar callada

–Y quien eres tu para decirme que puedo o no puedo hacer?–con el ceño fruncido la pequeña puso sus manos en sus caderas y miro retadora al niño sobre ella

–Yo vengo aquí todos los días,tu,solo eres una visitante–dijo divertido,dando un salto desde la rama en la se encontraba cayendo con sumo cuidado,casi como si flotara,cosa que la niña paso por alto debido a la cólera que le dio por lo arrogante que según ella el niño era

–Este lugar no es tuyo,así que no puedes decidir eso–firme la rubia se cruzo de brazos,haciendo un adorable puchero

–Nadie viene aquí,solo yo,así que técnicamente es mio–la niña fastidiada se adentro en el hielo dispuesta a encarar al otro niño

Pero al instante se arrepintió pues si resultó ser bastante resbaloso,aun así siguió avanzando pero cuando estuvo apunto de llegar frente al otro resbaló por suerte este la atrapó a tiempo y la ayudo a reincorporarse

–Te dije que estaba muy resbaloso–se burló el niño,Elsa estaba apunto de responder pero el albino la tomó de la muñeca guiandola hacia la orilla,una vez allí se paró a verla con detenimiento

–Tu no eres la princesa heredera? Ehhh Elsa?–recién con ese comentario la aludida se dio cuenta de que su capucha se había caído cuando resbaló

–Sí lo soy,pero eso no es importante,tu como te llamas?–le pregunto para desviar el tema

–Jackson Overland–le respondió extendiendo su mano,la rubia la miro unos momentos para después estrecharla

–Y...que hace la princesa heredera en un barrio tan humilde como este?–pregunto el pequeño burlon

–Bueno...queria ver...como esta el reino...con que tendre que lidiar una ves que sea reina–confeso la princesa,no veia la necesidad de ocultarlo

–Y que te parece lo que has visto?–el albino se sento a la orilla del lago congelado y la princesa al verlo lo imito

–Bueno,en verdad es todo muy hermoso,la gente es muy amable y alegre...pero...hay mucha pobreza...mucha gente no tiene lo necesario–Elsa bajo la cabeza mirando al suelo

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 27, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

 Jelsa <3 ❄️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora