ʀ ᴇ ʜ ᴀ ʙ | Control Z

03 | Dirección

CAPÍTULO TRES
― DIRECCIÓN.

Todos los involucrados nos dirigimos a dirección, nos fuimos ubicando en los sillones. Yo estaba en una de las puntas, a mi lado estaba Javier y a su lado Isabela.
Mi cabeza reposa en el hombro del chico a mi lado, mientras una de mis piernas esta arriba de la mesita, dejando ver mis enormes zapatos con plataforma que con suerte y me hacía medir 1,57 m.

No pasaron ni dos minutos que Sofía había venido a sentarse a un lado de Isabela, con la excusa de venir a investigar.
Ellas se entretuvieron hablando, mientras yo miraba mis uñas y pensaba en la "suerte" que tuve para que sólo se revelará una parte de mi secreto.

― Oye si me hiciste caso ― habla Javier agarrando mi mano y observando mis uñas. Yo sonreí.
― ¿esto lo hiciste tú? ― pregunto señalando el dibujo de mi uña, la uña era naranja y tenía en ella una flama en tono rojo.

― Sip ― contenta lo miré, el dijo que era genial y que tenía talento yo solamente agrande mi sonrisa.

Pablo ya había entrado a hablar con Quintanilla, y yo me paré para ir al baño.

― ¿A dónde vas? ― pregunto Javier haciendo que todos en la sala me miren.

― Al baño.

― Seguro te vas a drogar, ¿No?― molesto Gerry.

― Cerra el orto. Sos insoportable, flaco ― cansada me di media vuelta para ir al baño.

En el pasillo había algunos alumnos,  los cuales se me quedaban mirando y susurraban entre ellos.
Entre al baño y me lave la cara, cuidando de no correrme el rimel, fui a hacer lo que tenía que hacer y salí para lavarme las manos, cuando me estaba secando las manos un grupo de chicas entraron al baño.

― Oye, si te vas a drogar aquí avísanos así nos vamos ― hablo una y  miro de arriba a abajo, yo levanté una ceja ― no queremos que se nos pegue lo drogadicta.

Las que la acompañaban se rieron.

― Si, yo también me voy― me acomode el pelo cual diva― no quiero que se me pegue la estupidez.

Dicho esto tire el papel que tenía en manos y salí dejándolas con la palabra en la boca. Se piensan que me van a rebajar con la mirada y no les voy a decir nada, estúpidas.

Cuando volví a donde estaba la dirección, Javi estaba hablando con Lulú, por un motivo que no conozco.

Me acerqué a agarrar un "vaso" y me serví agua para después sentarme con Sofía.

― Me explicas que es esto ― le pedí señalando el vaso raro.

― Es un vaso ― dijo obvia.

― Sí, pero no es útil, ¿cómo lo apoyas en la mesa? O en cualquier superficie. ― seguí cuestionando indignada tomando agua. Ella subió los hombros e hizo una mueca de que no sabía.