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OO9

CAPÍTULO NUEVE

La escuela desde que Bora Lee se encuentra dentro ha sido un constante escándalo, todos tienen sus ojos puestos sobre ella, la admiran de una forma un poco particular que JiMin no consigue entender del todo. Los chicos se enamoran de ella y dejan cartas u obsequios en su pupitre, la esperan después de terminar las clases afuera del salón para confesarse –siempre son rechazados con una linda sonrisa–, en las últimas dos semanas al menos unos cincuenta estudiantes se acercaron a él pidiendo el número de la castaña. ¡Ni siquiera tiene un teléfono! Ha intentado enseñarle a usar uno, pero parece una tarea difícil, peor que mostrarle a su abuela a hacer una video llamada. Comienza a cansarse del alboroto, tal vez extraña un poco su aburrida vida, donde se levantaba sin nadie en casa, caminaba a la escuela solo y observaba de lejos a la delegada, a quién tuvo que dar por olvidada gracias a la ayuda de su nueva amiga. Exhalando, la observa irse con otras chicas para leerles las cartas.

TaeHyung, que había notado la frustración de su amigo, se sentó en el lugar de la susodicha a frotar la espalda del chico con corazón roto.

—¿Puede que estés un poco celoso de Bora Lee? —cuestionó, haciendo que la cabeza de su amigo girará en su dirección— Es que… ya sabes, ella es popular, sabe leer las cartas del futuro y además ha recibido muchas confesiones de amor. Y tú, bueno, a ti ni siquiera te rechazó la delegada porque no te topa.

—¡No estoy celoso! Joder, eres un tonto. —gruñó cruzados de brazos— Ella siquiera ha aceptado a alguien, es como si viviera en su propio mundo todo el tiempo. Y yo debo hacerme cargo de las partes feas con las que no quiere lidiar.

—¿No ha aceptado a nadie? ¿Por qué? ¿Ya tiene novio?

—¿Y yo qué sé? —bufó.

JiMin no le hacía ese tipo de preguntas a Bora Lee, y ella tampoco hablaba de su vida amorosa, sólo alegaba rechazar a todos los hombres de la escuela porque era estúpido salir con un humano aburrido, ellos trataban de salir con ella por su apariencia física, no porque de verdad les importe conocerla. Era una razón válida. No dijo nada sobre tener pareja, aunque ahora él duda de su estado amoroso, tal vez tiene un extraño pasado con alguien que la hace no poder olvidarlo. ¡Tal vez se va a casar con un hechicero de su dimensión! Mientras sus teorías crecían, las de TaeHyung también.

El rubio comenzó a imaginar que, secretamente, su amigo y su nueva inquilina tenían una relación secreta. ¡Debía ser eso! Formando una sonrisa traviesa, lo miró de vuelta. Tenía su cabeza apuntando en dirección a Bora, ella le leía las cartas a las otras chicas del salón.

Oh, harían buena pareja. En las cuatro semanas que llevan viviendo juntos, podría haber surgido el amor.

—Averígualo. —sugirió.

—Hum, no lo sé. Dudo que quiera hablar sobre eso. Y… ¡Y tampoco me importa!

—Puff, de acuerdo.

Aunque estaba un noventa por ciento seguro que JiMin no se aguantaría la intriga e iría a averiguar sobre aquello.