Cuenta la leyenda que las almas gemelas son aquellas que se cree que antes de nacer ya mantenían una relación íntima en alguna dimensión y en algún tiempo indeterminado...
Porque su encuentro no fue planeado, pero si fue en el momento indicado, provenían de distintos sitios, uno a kilómetros del otro, sus historias eran diferentes, no sabían su pasado, ambos con diferentes metas en la vida.
Fue una madruga de Abril, el día que se conocieron, el reloj marcaba exactamente las 3 a.m, no había una increíble historia atrás de cómo fue este encuentro, simplemente sucedió, el rubio arrastraba su maleta por un vacío aeropuerto, le era difícil estar llegando a un lugar nuevo, donde no conocía a nadie, estaba muerto del cansancio, su cerebro rogaba por algunas horas de sueño, su estómago pedía algo de comida, por lo que haciéndole caso a este, se dirigió al pequeño café del aeropuerto, tomó asiento en una de las tantas sillas vacías de la barra, la chica del mostrador tomó su orden, un café americano, junto a un sándwich, apoyando su rostro en la fría barra, meditaba en su siguiente paso, había dejado toda una vida atrás, queriendo olvidar los miles de problemas que lo hicieron desear estar muerto.
Un movimiento en la banca de alado llamó su atención, un chico con una llamativa cabellera azul tomaba asiento, pero lo que más le llamó la atención eran las marcadas ojeras que tenía su rostro, además de lo hinchados que se encontraban sus ojos, al parecer había estado llorando, se limitó a mirarlo por unos segundos, desviando la mirada cuando este alzó la vista, el chico del pelo azul hizo un gesto con su mano, para llamar la atención de la chica del mostrador, esta enseguida se acercó a él, para preguntarle qué deseaba ordenar, a lo que él pidió un simple té de manzanilla.
Ambos chicos esperaron en silencio, cuando su pedido llegó cada quien consumió en silencio, el rubio tenía perdida su mirada en la ventana que daba hacía el exterior, mientras el peliazul miraba con gran interés el contenido de su taza, un sonoro suspiro hizo que el segundo alzara su vista, en la barra junto a él, un pequeño chico rubio, aplastaba su mejilla en el frío mármol, estaba durmiendo, se veía tan pacifico y en calma, por un momento sintió envidia, si tan solo él pudiera descansar unos minutos, si tan solo pudiera tener un poco de esa paz, tal vez su vida sería diferente, pero lo único que obtenía al cerrar sus ojos, eran los más amargos recuerdos, de algo que jamás podría recuperar.
El peliazul, vacío el contenido de su taza y dejo el dinero de su consumo en la barra, estaba dispuesto a irse, pero algo le decía que antes tenía que despertar al chico rubio, no podía dejarlo allí, alguien podía tomar el equipaje del chico, o tomar su celular que descansaba a un lado de su cabeza, prácticamente en la cafetería solo estaban ellos y la chica del mostrador, se quedó observándolo, pensando en si interrumpir su sueño era lo correcto, después de unos cinco minutos, decidió despertarlo, no quería quedarse con la molestia de no haberlo hecho en su conciencia, avanzó los cinco pasos que lo separaban del chico, estirando su mano derecha, la coloco en el hombro del rubio, lo sacudió, pero este no hizo más que moverse y balbucear unas cuantas palabras, así que lo intento una segunda vez, no pasó nada, ahora poniendo ambas manos en cada uno de sus hombros lo sacudió de nuevo, el rubio salto asustado en su asiento, sus ojos miraban para todos lados, hasta que se posaron en el chico peliazul.
-Disculpa, no te quería asustar- se disculpó el peliazul- pero ya me iba y no quería dejarte durmiendo, supongo que el sueño te venció.
-Oh, gra-gracias- tartamudeó el rubio, sorprendido por la gruesa voz del chico- no me di cuenta, en que momento me dormí.
-Supongo que tu vuelo fue cansado, pero no quería dejarte durmiendo aquí- con su mano hizo un ademán señalando a su alrededor- el lugar está muy solo.
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Siempre las 3 a.m. *VMin* (OneShot)
Fanfiction"Un amigo es la familia que tú escoges, yo te elegí como mi familia, lo haré por el resto de mis días" "Lo mío es tuyo y lo tuyo es mío, emociones y sentimientos incluidos, mi historia se volvió tuya y tu historia la mía, todo lo que antes no compa...