Todo se encontraba vacío, un negro infinito cubría todo hacia donde se observase, almenos eso parecía, deambulo sin rumbo durante un tiempo, cuánto?, no lo sabía, bien podrían haber sido unos segundos o horas enteras en busca de... bueno realmente no sabía que buscaba, de pronto lo vio, una pequeña luz en medio de toda la oscuridad, emprendió marcha con paso firme y decidido, no sabía porque pero sentía que esa luz le llamaba. No estuvo a más de, probablemente, 5 metros de ella cuando lo escucho.
─vuelve, por favor vuelve─ una fina voz, triste y suplicante─ no me dejes sola otra vez
Se acercó con mayor prisa hacia la luz, sentía que debía consolar a aquel melancólico ser, sea lo que sea, lo más rápido que pudiese, no le gustaba escucharla triste esa voz.
Extendió su mano para tocar aquella pequeña luz cuando volvió a escuchar
─vuelve por favor mí querido Shin...
Bip Bip Bip
El sonido del despertador retumbo por toda la habitación, un dormitorio para ser exactos y uno bastante ostentoso la verdad, haces de luz se asomaban por entre las cortinas indicando la llegada del "sol mañanero", uno de ellos dio contra la cama, una clase King para dos personas, y pego directamente con los ojos del habitante de esta, un chico de ojos azules y cabellos del mismo color.
El chico movió rápidamente una de sus manos hacia sus ojos en un intento de cubrirse del haz, incorporo medio cuerpo de la cama y extendió una de sus manos hacia la mesita de noche donde reposaba el despertador que, aun, sonaba de forma estridente, dio una vista rápida a este buscando el botón para apagarlo, cuando lo hubo ubicado procedió a presionarlo cesando el molesto ruido. Se mantuvo un momento con la mano extendida, la devolvió lentamente a su posición original y observo a su alrededor como si buscara algo, la habitación se encontraba completamente iluminada por la luz solar y se podían observar diversas cosas en esta, desde una sencilla mesa decorada con una lámpara de lava y unos cuantos libros en una de las esquinas hasta una computadora gamer de tres monitores en la otra, sin embargo nada de eso era lo que le importaba, más bien era lo que se encontraba justo en medio de estos colgado en la pared.
Una katana
Una vez la vio lanzo un suspiro al aire, si esa espada estaba allí significaba que todo había sido solo un sueño, se levantó de la cama para encaminarse a la puerta de la habitación para salir de esta, llego así a unas escaleras que comunicaban lo que era su habitación con lo que parecía ser el resto de la residencia iniciando por una pequeña sala la cual se conformaba de tres sillones, una mesita de vidrio que se centraba en medio de estos y un gran televisor de 70 pulgadas que se encontraba en la pared. Más allá de la sala y separada por una pequeña pared estaba la cocina, allí se encontraban diversos artilugios destinados a la cocina junto con los respectivos electrodomésticos, finalmente al otro lado de la sala se encontraba la puerta de salida, tal vez el lugar más "normal" que había allí.
El chico volvió a suspirar, hacía ya unas dos semanas que había llegado a este lugar desde el otro mundo y aun así no se acostumbraba a todo esto, era cierto que la maldita esfera luminosa le había dado todos los conocimientos básicos para sobrevivir en este mundo y por ello conocía todo lo que le rodeaba, pero era esto mismo lo que le fastidiaba, todo lo que le había brindado en lo que sería su "hogar" era de lo más caro que podías encontrar y si no fuera poco en la cama encontró una billetera con un montón de dinero, 3 tarjetas de crédito de distintos bancos y un papel que reconoció como una ficha de inscripción a una preparatoria. No sabía si es porque la cosa esa quería que estudiase por alguna razón o por si había sobre exagerado con todo lo que le dio, pero quería matarlo aún más.
En todo caso no podía hacer nada.
No pudo más que resignarse y acudir a la susodicha preparatoria, total no tenía mucho más que hacer para pasar el rato mientras esperaba que se presentara el maldito ancestro.
ESTÁS LEYENDO
[DAL]- New Moon
RandomUna historia puede cambiar bastante si cambias el origen de alguien, y más si ese alguien es quien está destinado a salvar el mundo de la destrucción a causa de los espíritus Lo se es un mal resumen pero la verdad no se me ocurría nada :p solo puedo...