〝「 MAFIA 」〞|+18 | RMxT/N

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7 años antes del atraco

Él seguía penetrando sin compasión a la joven. Ella clavaba sus uñas de gel en la espalda de su cliente, mientras gritaba de placer. Namjoon se sentía cerca del clímax, sentía como estaba apunto de derramarse dentro de la chica.

El sonido de los nudillos golpeando la madera de la puerta lo trajo de vuelta a la realidad. Con algo de dificultad logro pronunciar un leve "Ahora voy". Era su representante, tenía una reunión, y el estaba ahí, follandose a una puta.

Finalmente, acabó. La chica gritó, sintiéndose llena de la esencia del hombre que le pagaba simplemente por un rato de placer. El jefe dio unas cuantas embestidas más, para terminar de llenarla con su esperma.

Retiró su miembro bruscamente y subió sus pantalones. Del armario sacó una camisa azul clara y se la colocó. Abrochaba los botones de su prenda mientras veía a la hermosa dama que subía su vestido.

-Ha estado genial, señor Kim.- Dijo.

-Lo se, siempre estoy genial- Sonrió pícaramente, para después dejar la sala, saliendo por la gran puerta de la habitación en la que se encontraban.

-Señor, tiene una persona esperándolo en su despacho. Dice que quiere hablar con usted.- Intentaba seguir a Namjoon, lo que se le resistía un poco, ya que el iba caminando demasiado rápido, por no decir corriendo.

Los dos se encontraban en la puerta del despacho, el suspiró, y sin hacer contacto visual preguntó:

-¿Sabes su nombre, o quién lo manda?-

-No, me dio ningún tipo de información, más que le buscaba a usted.-

El jefe golpeó levemente la puerta, dando dos pequeños golpes. Para después abrir la ya mencionada.

-Buenos días, ¿para que me buscaba?- preguntó acercándose a la gran mesa que estaba posicionada a unos cuantos metros de la entrada.

-Nada, solamente proponerle a mí querido hermanito un plan que le hará millonario-

-¿Jimin?- Sus ojos se pusieron como platos, su boca quedó entre abierta y se paró en seco a medio camino hacia la mesa.

-¡Bingo!- el chico se dio la vuelta sobre su silla giratoria hasta poder ver a su hermano. Se levantó de la silla y se acercó a él.

-Se ve que aún estás en plena etapa de crecimiento, ¿cuánto mides, medio metro?- Se burló de su estatura.

- Ja- ja, y tú no has cambiado desde lo de padre, aún sigues siendo el mismo capullo que hace quince años.- Contestó, Park estaba harto de las risas sobre su estatura.

-Y bueno, ¿que te trae por aquí?- Se sentó en la enrome silla, esperando a que su prójimo haga lo mismo. -La verdad, tu visita me ha sorprendido un poco-

-Te propongo un atraco que no lo vas a ver en tu vida. Escúchame.- apoyó su codo en el escritorio y su cuerpo se echó para delante. -Entraríamos en el banco de Seúl, robaríamos ochocientos millones de wons coreanos. ¿No te parece grandioso?-

-Sin duda, maravilloso. Pero, ¿como saldríamos de allí? Intentar salir con vida del banco de Seúl es casi un suicidio.- preguntó Kim.

-Por un túnel, hecho con explosivos, en el sótano. Lo tengo todo pensado.- Jimin sonrió.

-Como me quieres, hermanito...- Namjoon se levantó, y se dirigió al minibar que estaba al costado de la mesa. -¿whisky?- Ofreció.

-Por supuesto. Dime, ¿Me harías el honor de compartir conmigo esta experiencia?- Aceptó el vaso con licor que su prójimo le entregó.

-Sin duda, esto es lo mejor que me has pedido. Por su puesto que acepto.- Tomó un sorbo de su bebida.

Esa petición fue lo peor que Namjoon pudo haber aceptado nunca.