Destino Marcado

Capítulo 5

-Te gusta este lugar, ¿verdad?...- Sakura le hablaba a su hija que venia entretenida admirando las calles de Konoha

-Si, es muy bonito... - decía muy admirando todo lo que veía...

Doblaron la esquina y se toparon con una pareja... la señora era rubia y el hombre tenía el cabello de un curioso color rosado grisáceo...

-¿Sakura?...- dijo la pareja al unísono sorprendidos... eran los señores Mebuki y Kizashi Haruno...

-Sakura... oh Sakura...- la señora Mebuki se lanzó a los brazos de una pelirrosa sorprendida

-¿Mamá?... ¿Papá?...- decía sin saber que hacer

Los señores Haruno Vivian en Tokio, y Sakura no sabía que hacían en Konoha...

-¿Qué hacen aquí?...- decía con sorpresa...

-Venimos como turistas, dicen que aquí hay un restaurante muy bueno de Ramen...- decía contenta la señora Mebuki

-Me da gusto volver a verlos...- dijo con una sonrisa

-¿Por qué te fuiste así?...- decía algo consternado el señor Kizashi...- aquel día solo llegamos y vimos una nota y tú ya no estabas...

-Pasaron muchas cosas...- dijo simplemente...- no quería que tuvieran que cargar con alguien como yo...- desvió la mirada...

-¿Mami?...- preguntó Mirai algo desconcertada por lo que pasaba, ella todo el tiempo había estado observando había hablado? por fin

Los señores la voltearon a ver... vieron que la niña no se parecía en nada a su hija excepto en la forma y color de sus ojos...

-Ella es mi hija...- los señores Haruno la miraron desconcertada...- se llama Mirai y acaba de cumplir 5 años...

Los señores Haruno la vieron, no se parecía a Sakura y tenía 5 años, Sakura se había ido de su casa hace seis años, poco después del abuso que sufrió... los señores Haruno procesaron la información y entendieron que aquella niña había sido el producto de la violación que había sufrido su hija.

-Eres una niña muy hermosa...- la señora Haruno se puso a su altura y ella se escondió detrás de su mamá...- no te escondas... yo soy tu abuela Mebuki...- le sonrió...- y él...- señaló a su marido...- es tu abuelo Kizashi...

Hola, princesa...- el hombre se acercó a la niña y sorpresivamente la tomó en sus brazos y la niña se asustó

La niña gruñó... los extraños no le gustaban y quería zafarse de los brazos de su abuelo y le extendía los brazos a su mamá...

-No te asustes...- intentaba calmar a su hija la pelirrosa...- ellos son mis padres, son tus abuelos...

La niña dejó de gruñir y se fijó en los ojos de su abuela, eran verde jade como los de ella y los de su mamá y los ojos de su abuelo eran azules...

-¿No me vas a hacer nada?...- preguntó algo temerosa

-Solo comerte a besos...- le dijo sonriente el hombre... y comenzó a darle besos

-No...- la niña gruñía y le apartaba la cara a su abuelo...- no

-A ella no le gusta que hagan eso...- explicó la madre riendo...

-Ya nos dimos cuenta...- decía la señora Mebuki con tono gracioso

Los cuatro fueron a dar un paseo y a comer ramen en Ichiraku, los rumores eran ciertos... era el mejor Ramen que habían probado... Sakura los invitó a su casa y les dijo que podrían venir cuando quieran...