FALLAMOS/HAMBRE

20 3 3
                                    

No entendía nada, ni siquiera sabía que era una potestad, habían pasado alrededor de dos horas en las que había desinfectado las alas del ángel, que según él no era un ángel era una potestad, para mí era lo mismo, estaba googleando información sobre ángeles mientras el intentaba tomar una ducha, ni siquiera sabía cómo hacerlo, después de 30 minutos explicándole paso a paso lo que haría, acepto.


-Me puedes dar algo con que secarme?- La voz me sobresalto, voltee mi mirada.

-Oh por Dios, estas desnudo...-Dije cuando analice la situación.-No puedes estar así-Dije señalándolo con una mano y con la otra cubría mis ojos-Te deje tres toallas sobre el tocador, tienes que cubrirte.

-No tiene nada de malo, nuestro padre nos creo así, debemos de estar orgullosos de nosotros mismos-Dijo dándose la vuelta.

Con ese cuerpo quien no estaría orgulloso.

Me levante del sofá, me dirigí a la cocina, tenía mucho apetito, ni siquiera alcance a desayunar, sentí la presencia de mi gatito, y lo observe lleno de sangre.

-Oh bebe discúlpame, estuve un poco distraída, te voy a dar un baño.


Lo tome entre mis brazos y me dirigí a la habitación, cuando abrí la puerta me encontré, con la vista más sexy, estaba desnudo, pero cubriendo sus partes intimas, con la toalla.

-Me puedes dar ropa?-Pregunto, mientras Edward saltaba de mis brazos y se acercaba a él, creo que Edward y el inquilino se agradaban.

-Déjame buscar algo que te pueda quedar...-Dije mientras abría el closet.- Shawn dejaba camisetas aquí, mira esta tal vez te queda. - Dije mientras le entregaba una camiseta color rojo.

La tomo entre sus manos y la analizo.

-No- Dijo, mientras me entregaba la camiseta.- Es roja, y no me va a entrar.

-Oh vamos, que tiene de importante el color, y tu como sabes que no te entrara.-Dije entregándosela de vuelta.

-No me va a entrar, y soy una potestad mi color es el azul.-Sentencio sin una pisca de humor.



Ok...No le gustaba el rojo, anotado, seguí buscando camisetas, pero todo lo que le ofrecía me lo devolvía con una mueca, me estaba quedando sin opciones, encontré una bata, era mía pero le podía quedar, era blanca, podría funcionar.

-Esta?...-Le ofrecí una mirada dudosa.

-Si.

Después de bañar a mi gato, Salí de mi habitación, y lo encontré sentado sobre la cama.

-Tenemos que hablar...No puedo tener a un extraño en mi departamento, y ni siquiera me has dicho la realidad de porque estabas en la azotea-Dije sentándome a su lado, el mantenía la vista en un punto de la habitación.

-Me caí-Fin, eso era todo lo que decía siempre.

-Ajá y... ¿de dónde te caíste?-Pregunte sin más.

-Del cielo-Me aseguro, su vista seguía clavada en un punto de la pared.



-Que eres? -Pregunte-Definitivamente no eres un humano, pero me aseguraste no ser un ángel.

-No soy un ángel, no soy un humano, soy una potestad.

-Una potestad...- Repetí- Según Google... eres una clase de ser espiritual, que protege al mundo, y lucha contra los demonios.-Dije citando lo que había leído.

-Correcto, soy un ser espiritual, que protege al mundo de la maldad, tenía una misión, y falle, es el motivo de estar herido en la azotea- Finalizo de hablar, y me mira directo a los ojos.

-Entonces... si vienes del cielo-Asintió-Cual era tu misión?

-Tenía que investigar a unas criaturas malignas, están causando terror al norte de Minnesota.

-Minnesota?-Pregunte extrañada-Que hacen en Minnesota?

-En el Voyageurs national park, ayer captamos señales de una tropa de demonios, entonces teníamos que combatir, fallamos.

-A que te refieres con "Fallamos"?


-La mitad de mi tropa murió, parecerá cobarde, pero teníamos que huir, de lo contrario moriríamos, perdí algunos de mis mejores soldados, no podía dejar morir a los restantes.-Soltó con rabia en sus palabras.

-Lo siento mucho.

-Por qué?-Pregunto-No fue tu culpa, fue mía, tendríamos que estar preparados, les falle, a mi tropa, a mi padre.

-No te culpes-Dije colocando mi mano sobre su espalda desnuda- Donde está tu tropa?

-Después de la pelea, todos nos separamos, era mejor, teníamos que confundirlos, creo que todos estarán ya en el cielo.

-Y tú?-Pregunte-Porque no estás en el cielo?

Titubeo antes de mirarme a los ojos.

-Tengo vergüenza, no tengo el valor de llegar ver a mi tropa, saber que por mi culpa nuestros hermanos están muertos, que mi padre me vea, eso sería una total catástrofe.

Sentía pena por el, sin pensar en la actitud fría que tomo al principio era tan extraño que se desahogara conmigo, una humano que hace algunas horas ni siquiera era consciente de la existencia de todo este mundo, notaba en su mirada el arrepentimiento, era comprensible que se sintiera culpable, pero torturarse de esa manera no era bueno.

-No sé como se comportan las personas allá arriba, estoy segura que son mejores que aquí abajo, tal vez tus...hermanos, y tu padre te comprendan-Dije ofreciéndole una sonrisa.

-No, subiré cuando tenga todo finalizado, cuando acabe con los demonios, lo hare yo solo, para que mi padre se sienta orgulloso de mí, no importara tardarme toda una vida.-Sentencio con voz neutra, se veía seguro de su idea.

-Es una gran idea, pero estas seguro que tú solo podrás combatir a demonios?, bueno... yo no sé que tan...fuertes sean, pero si derrotaron a tu tropa, significa que eran muy fuertes.

-Lo son, pero lo lograre, nuestro padre dijo, que si queríamos algo lucháramos con toda nuestra alma para conseguirlo-Tu me ayudaras a conseguirlo-Dijo levantándose de la cama.

-Disculpa, pero yo no puedo, soy una humana, ni siquiera tengo alas, o algo así.-Dije dubitativa.

Me levante de la cama, y me dirigí a la cocina, él me seguía, llegue al frigorífico y saque una botella de jugo, la destape, y tome un sorbo.

-No, tu solamente tendrás que ayudarme a encontrar un lugar donde poder refugiarme.-Dijo con la mirada clavada en mi jugo-Qué es eso?

-Es un jugo-Dije levantando la botella, fruncí el ceño.

-Y porqué lo estas bebiendo?

-Pues...tengo hambre, no desayune.

-Y para qué harías eso?

-Espera-Dije colocando la botella sobre la isla-No sabes lo que es comer?!-La cara de sorpresa que tenía era majestuosa.

-No-Dijo con una mirada cargada de obviedad.

-Oh por Dios...-Iba a seguir hablando pero su voz me interrumpió.

-Repite lo que dijiste.

-Oh por Dios-Dije con el ceño fruncido.

-Que es eso?!-Dijo con cara de sorpresa.

-No sé que me sorprende más, que no sepas que es tener hambre, o que no sepas que significa "Oh por Dios"-Dije sorprendida.-Pues... "Oh por Dios" es una expresión de sorpresa, es como decir "wow", y pues los humanos comemos...porque tenemos hambre, no sé como explicarlo, tenemos la necesidad de alimentarnos, de lo contrario moriríamos.

-Espera...entendí lo de "Oh por Dios", pero no comprendo lo de comer, sabía que los humano se alimentaban, pero nunca supe porque lo hacían, es extraño.

-Lo hacemos, porque... de lo contrario moriríamos, ustedes no comen?!-Pregunte alarmada.

Negó con la cabeza.

-Esto es increíble-Tome la botella de jugo y se la ofrecí- Toma, pruébalo.

-Qué hago?-Era la pregunta más estúpida que me habían hecho, pero viniendo de él, era del todo comprensible.

-Pues te lo tragas, y ya.

-No tengo que morder?

Solté una carcajada, no podía creer lo que estaba viendo, todavía era difícil de creer que había un ser celestial en mi departamento.

-No, no tienes que morder, es un liquido, solo bébelo.

Tomo la botella, la aproximo a sus labios, y bebió, tuve un momento para analizarlo, era en verdad atractivo, los ojos que tenia eran increíbles, el cuerpo era de infarto, y su voz era melodiosa, no era ronca y rasposa, pero tampona era del todo dulce, era una combinación de ambas, era maravillosa.

-Sabe raro... pero se siente bien, es extraño.

-Pero te gusta?-Pregunte dudosa, asintió.

-Es extraño, pero se siente bien.-Me ofreció la botella, la tome y estaba vacía, solamente bebí una vez, era increíble, lo había terminado.

-Lo terminaste-Dije sorprendida.

-No lo podía terminar?

-Sí, pero usualmente lo tienes que hacer más lento.

-Ohhh, no sabía.

-Quieres comer algo?-Pregunte.

-Sí .-Dijo dudando de su respuesta.

-Tranquilo, preparare algo pequeño, y si no te agrada el sabor solo tienes que decirme, es sencillo.

-Está bien.

-Ve, siéntate-Dije señalando el sofá de la sala.

Camino a la sala, toco el sofá, y se santo, veía todo, lo analizaba rápidamente, Edward se acerco a él y se recostó sobre sus piernas, Jacob se quedo en el mismo lugar, tal vez no se sentía cómodo con su presencia.

Después de preparar unos sándwiches, tomar dos botellas de jugo, me dirigí a la sala, me senté al lado de el, y le ofrece un sándwich y una botella de jugo, las tomo al instante, tome el control remoto y prendí la T.V, se tenso cuando el aparato encendió.

-Que es eso?!-Pregunto alarmado.

-No puede ser, es una T.V-Internamente estaba rogando que el supiera lo que era, sería difícil de explicar lo que era.

-Y que hace?!

-Pues en ese cuadro aparecen videos, de personas, o dibujos animados, es para entretener a las personas, sabes lo que es un video cierto?

-Tengo una vaga idea de lo que es un video, entonces ese cuadro tiene personas adentro?

-No no no, ese cuadrado se llama televisor, hay personas que actúan, y otras personas que graban a esas personas que actúan, y esos videos, se reproducen en el televisor, entiendes?

-Creo que si... entonces no hay personas atrapas en esa cosa?

Solté una carcajada, no podía creer lo que estaba viviendo, yo negué con la cabeza.

-No hay nadie atrapado-Le asegure.- Mírala, tal vez te gusta.

Comenzó una película, el estaba muy concentrado mirando la pantalla, y tomando jugo, el sándwich lo tenía sobre el plato, aun intacto, era el día mas bizarro que había vivido, tenía un ser celestial, sentado en mi sala, que no sabía lo que era la comida, tampoco el televisor, y llevaba mi bata puesta, definitivamente jamás olvidaría este día.

-Cómo te llamas?.-Salte sin más.


EL DELEITE DE CUPIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora