LAS SECUELAS DE UN AMOR

¿Porque él?

LAS SECUELAS DE UN AMOR

Por: Clow Reed.

DOS.

¿Por qué él?

La historia que mi padre me estaba narrando, era por demás interesante. La contaba con gran ternura inmersa en cada palabra, y en sus ojos había un brillo especial, casi mágico.

-Sabes hijo... el concepto de "Amor a primera vista", es demasiado falso. No existe tal cosa. Yo, no me enamore de Louis en el momento en el que lo vi, no te negaré que me era físicamente muy atractivo, aunque habían otros más atractivos que él... el Dr.  Rivas es uno de ellos... y claro, estaba también el hecho de que tenia un sinfín de compañeras muy lindas en la universidad.

Desde el día que hablamos después de ese laboratorio, lo busqué en cada descanso, logrando con esto que se integrara en mi grupo de amigos, Paty, Alexander y los gemelos Al y Ed. Yo en general me llevaba muy bien con todos pero el que yo consideraba de todos mi amigo más allegado antes de relacionarme con Louis, era Alex... podría decirse que el era mi mejor amigo en la universidad.... ah... pero creo que eso no viene al caso ahora.

-Esta bien, papá... cuéntame las cosas como tu creas que debas hacerlo. ¿Quieres más café? –le pregunte tomando la tetera y dispuesto a servir una segunda ronda...

-No... así estoy bien hijo, gracias... mucho café me provoca acidez estomacal... bien... en que estaba... ¡Ah! Si, veras, poco a poco Louis se fue haciendo amigo de todos y se integro de lleno en el grupo. Pero su relación era mejor con Paty, ya que compartían una gran afision por los viedo juegos... y con migo... por que igualmente teníamos el mismo gusto para los animes. Suena tonto... pero eso hizo que nos hiciéramos amigos en corto tiempo. También, se llevaba con Alex... aunque no entiendo como, de por si... Alex era algo así como el punto negro en la hoja blanca... puesto que con ninguno de nosotros compartía realmente gustos en común, salvo los videojuegos... pero no teníamos los mismos gustos en cuanto a música, programas de tv o comida... era extraño...

-Aun así, era tu mejor amigo...

-Si, era raro... aunque en general no discrimino personas por aspecto o por personalidad. –Entonces el viejo tomo el álbum y me mostró unas fotografías, en las cuales aparecía el, junto con las personas que me había mencionado y en distintos lugares... –Estas fotografías, las tomamos durante los viajes de la universidad durante el segundo año... he de decir sin temor a equivocarme que estos viajes también contribuyeron de gran manera a que Louis y yo nos volviéramos más amigos y más unidos.

En una caminata larga por el campo... en la que fuimos lado a lado riendo como un par de tontos, o esta... que fue la visita a una hermosa cascada...

-Papá, en esta foto estas todo sucio, y tienes un raspón en la cara... ¿Qué te paso?

-Ah... es que tu padre, de joven era muy torpe y tropezaba hasta con el aire.  Louis decía que yo era muy distraído y que por eso me pasaban esa clase de accidentes tan inverosímiles, mientras yo alegaba que de seguro tenia una especie de maldición de mala suerte que heredé de algún antepasado. Ese día, tropecé con una minúscula piedrecita y caí estrepitosamente estampando la cara contra el suelo... aun así, nos tomamos esa fotografía. –Entonces mi padre cogió de entre las cosas de la caja, un pequeño cofrecito de madera del cual saco dos caracoles. – Estos,  los cogió Louis en un viaje que hicimos a la costa. Llegamos e hicimos un largo recorrido en bote por los manglares, ahí admirando el paisaje, sintiendo la cálida brisa mareña y el sol quemándome la piel, teniendo siempre cerca a Louis... fue cuando comencé a sentir que me gustaba;  y eso me preocupó.

Te diré algo,  normalmente cuando me habían gustado otras personas antes que él... yo trataba de conocerlos mejor... y conforme los conocía dejaban de gustarme.... con Louis fue diferente, por que a medida que lo iba tratando y conviviendo más tiempo con él, comenzaba a gustarme más y más.