Sinopsis

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En cosas del azar y destino, soy el peor de todas las apuestas.

-Pa-para...- un sollozo salía de los labios del menor mientras apretaba con fuerza el sábanas intentando no perder la conciencia de nuevo

Día tras día, me pregunto qué sería del futuro si fuera mi vida a cambio de la de ellos

-Por fa-favor..- un fuerte dolor hacía imposible hacer cualquier movimiento, los pensamientos no los visualizaba con claridad, débil y frágil, sabía que sus palabras no serían escuchadas por lo que no hubo una sola palabra que pudiera salir de nuevo. 

Solo debo ceder, debo ceder..

-Ah.. pequeño, eres tan bueno.. recuerda que le debes mucho a tu tío Yoon-esa voz grave y ronca que tanto odiaba escuchar, retumbaba en sus oídos una y otra vez- No es así, Taehyung?

-S-sí- un susurro leve y casi ahogado salió sintiendo un fuerte temblor y malestar en todo el cuerpo

-Bien, bien.. ves que no es tan malo cuando me haces caso? Mm?- levantándose de encima del menor, tomó sus pantalones que yacían sobre sus tobillos, acomodandolos nuevamente posó su mirada sobre el cuerpo desnudo que se movía con lentitud- levántate y haz algo de comer, estoy cansado

Con un nudo fuerte en la garganta y asintiendo, el menor tomó sus cosas esperando a que su tío dejara de mirarlo para poder vestirte sin que lo viera llorar o sabría que tendría problemas. Abrazando su ropa contra su pecho y limpiando sus lágrimas con manos temblorosas, se vistió adolorido, sucio, débil

-Sucio- susurro como regañandose a sí mismo por permitir ser abusado de tal forma

Con pasos lentos y obedeciendo a las palabras del mayor, preparó algo con lo que quedaba en la despensa, lo sirvió y como era de costumbre, bajo la mesa, las manos de aquel hombre disfrutaban tocar por encima de la ropa del joven quien mordía internamente su lengua evasivo a la mierda sucia y sexual de su cuidador. Una vez este se sentó nuevamente en el sofá mientras bebía como era de todos los días, Taehyung permanecía a su lado hasta que el hombre perdía la consciencia y caía desmayado en el sofá

Unas ganas enormes de vomitar y una punzada en el pecho acechaban al menor quien contenía la respiración mientras se dirigía a su habitación escaleras arriba. Una vez entró y cerró con seguro, suspiró algo aliviado buscando su celular marcando al único número en su lista de contactos

-Ji-jimin...- hubo un silencio- no.. él sólo..-otro silencio- s-sí p-pero.. está bien -trago en seco mientras movía de arriba abajo su mano contra su pierna asintiendo sin que la otra persona en la línea pudiera verlo- no, yo iré, el no puede verte aquí o despertará- sorbió su nariz escuchado a su amigo para luego asentir y colgar-

Rápidamente y sin hacer ruido tomando una mochila, metió lo primero que vió en la pequeña mesa a su lado: sus documentos y sus llaves, algo ligero como jimin le había dicho hace unos momentos por la llamada. Bajó lentamente revisando que su tío siguiera dormido en el sofá, al notarlo, caminó hacia la puerta sin mirar atrás y salió recibiendo de golpe el frío de la noche, miró a su alrededor metiendo las manos en sus bolsillos emprendiendo su camino hacia la casa de su amigo que había decidido que lo recibiría esa noche para consolarlo y disminuir su dolor que se alojaba no solo en todo su cuerpo, también en su corazón.

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¡¡Hola!! ésta es una de las primeras historias que escribimos (somos dos) espero que les guste. 

otra cosita.. esta historia será omegaverse, para la gente que le guste, sin más preambulo que empiencen los juegos del hambre ahre. 

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Destined 《KookV》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora