"Todos tenemos un propósito en este mundo de infinitas posibilidades".
Emma Stanford. Si no conoces su historia ,dirás que solo es una simple chica.Pero, quizás , para desgracia de ella no lo es,el curso de su vida ya fue profetizado por la "loca...
La persona misteriosa se levanto de inmediato contemplan la mancha color chocolate que ahora poseía su campera ,sin mostrar signo de querer ayudar a levantar a la joven castaña ,que al notar eso se incorporo despacio por cuenta propia.
-¡¿Pero que te pasa ,chiquilla?!,¡Mira lo que hiciste!-Le replica fuerte con voz gruesa ,es entonces cuando Emma se digna a mirar a la persona que la choco,era un muchacho,que aparentaba aproximadamente unos dieciocho años ,quizás menos, su pelo era tan negro como la noche,piel media morocha y sus hermosos ojos grises brillaban con furia y frialdad.
-¡¿Yo?!,¡Pero si tu fuiste él que me choco!-Se defendió Emma.
-Mira, mocosa,yo que tu me quedo callada y la próxima fíjate por donde caminas-
-¿Quién te crees para decirme mocosa,idiota?-La chica no se iba a quedar atrás en la discusión,si algo había aprendido era a defenderse.Y no le importaba que el orangután este midiera como un metro con ochenta y cinco,ella sin miedo le haría frente con su bello metro con cincuenta y cinco.
-Solo quítate de mi camino ,"Petisa" - La desafió con la mirada .Grave error. Emma ya estaba que le salia humo por las orejas. Lo próximo que hizo fue tan rápido que tomo desprevenido al chico.Encajo su pierna con la él y la jalo hacia atrás ,volteándolo en el piso.Y agarrándolo del cuello de su campera se acerco intimidante.
-¿Porqué mejor no te quitas tú?-Dijo "tranquila" pero desafiante,para soltarlo y caminar a Maya,que en toda la discusión no supo que hacer,para seguir el camino. Emma seguía cabreada pero respirando se dijo a si mima que no valía la pena.Volteo hacia Maya que ya la estaba mirando.
-¿Qué...?-Pregunto siendo interrumpida.
-Eso...-La castaña hizo un breve silencio par luego continuar sorprendida y emocionada-¡Estuvo genial!.Como te le enfrentaste y lo dejaste en el piso,tienes que enseñarme a hacer eso-
-¿Qué puedo decir?.Chiquita pero poderosa-Bromeó-Aunque debo admitir que no tuve que alterarme tanto-Reflexiono un poco en voz alta-Emm...¿Vamos a la casa?-Cambio de tema.
-Sí, creo que ya es hora,se preocuparan sino-Le confirmó.
Emprendieron camino hacia la casa Boyce,Maya le ofreció comprar otro helado pero Emma lo rechazo con cortesía,diciendo que no hacia falta y tenían que llegar rápido.Bajaron del taxi que las llevo ,mientras Maya le pagaba ,Emma se agacho en la vereda para recoger una bella flor color amarillo que vio,disfruto un instante de su fragancia ,fue cuando observo un auto estacionado delante de la casa que supo que ellos ya estaban aquí,solo procuraría caerles bien ,trataría de hacerlo por su nueva amiga.
Camino a espaldas de Maya ,que se dirigía a la puerta ,saco un juego de llaves y abrió.
-¡Papá!¡Mamá!¡Ya estamos aquí!-Dijo casi gritando ,se escucho pasos acercándose y de un pasillo salio un hombre alto de piel morocha ,seguido de una mujer de piel clara y ojos no tan oscuros como los de el primero,Emma al instante los reconoció como la pareja que aparecía en los cuadros de la casa.El señor con una sonrisa ,que heredaron sus hijos ,hablo primero:
-Maya,hija,que gusto verte-La salido con un abraso.
-Mi niña ,nos tenias preocupados ,¿Porqué tardaron tanto?-Pregunto repitiendo al acción de su esposo.
-El tiempo se nos paso,Mamá,lo siento-Correspondió su abraso-Mamá ,papá-Les dijo poniéndose a la par de Emma-Ella es Emma ,aparentemente no tiene donde quedarse,y quería pedirles que la dejaran vivir aquí por un tiempo-Dijo esperando una respuesta positiva.Hasta Emma se puso nerviosa por lo que responderían.Los señores Boyce se miraron dudosos ,pero la mujer le pareció mejor presentarse antes de responder.
-Hola ,Emma. Mi nombre es Libby Boyce y él es mi esposo Víctor Boyce ,un gusto-Extendió su mano y la chica se la estrecho gustosa ,al igual que al esposo de esta.
-El gusto es mio ,señores Boyce-Les sonrió a ambos cortésmente-Les juro que no seré un problema si me dejan quedar en su casa,aunque comprendo si no lo hacen-Respondió lo más sincera posible .Ella quería quedarse ,porque ahí tenia a alguien que se preocupaba por ella ,pero también sabia que era una completa extraña para ellos,y,seamos sinceros,<<¿Quién deja que una completa desconocida se quede en su casa?>>...
-Tranquila ,hija,dejaremos que te quedes-<<Quizás unas personas tan amables como ellos>>Termino de pensar.La señora le sonreía a la par de la enorme sonrisa de la ojiverde-Maya ya nos contó de ti por teléfono ,y si ella confía en ti ,nosotros también - Termino de decirles ,las dos jóvenes estaban de lo más contentas.
-Gracias,gracias,gracias-Repetían ,al segundo Emma recupero la compostura un poco avergonzada y le dedico una sonrisa genuina.
Después de los minutos los cuatro se pusieron de acuerdo y se fueron a el patio a pasar el rato.A pesar de que Emma seguía un poco tímida estuvieron conversando en el trayecto.A los señores Boyce les cayo bien la chica,entendiendo por que su hija era amiga suya.Por otro lado,Emma le pareció que eran las personas más simpáticas que había visto,en un momento saco el tema de trabajar para pagar sus gastos ,ellos se negaron diciendo que no era necesario ,pero ella insistió ganando.No le pareció que los Boyce la dejaran quedarse sin que ella ayudara en nada,así que se decidió en unos días empezar a buscar empleo.
Cuando anocheció comieron juntos ,la invitada le agrado estar en un ambiente tan familiar ,al terminar ayudo a lavar y cada uno se fue a su respectiva habitación despidiéndose con un "Buenas noches".Emma ya acostada fue cayendo poco a poco en los brazos de Morfeo hasta envolverse en un gustoso sueño.
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