LA VIDA ES UNA TRISTE REALIDAD

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Empecé a soñar con mi abuelo muy seguido, lo extraño es que siempre en mis sueños sabía que él estaba muerto y lo veía como espíritu y me asustaba.

Se supone que eso pasa cuando quieren que reces por el alma de esas personas, era impactante, uno de los que más recuerdo es que, el aparecía en mi casa y yo sabía que había muerto, me asusté tanto que salí corriendo y por varias de las calles de mi barrio me perseguía y me cogió, me alcanzó y me tocó el brazo, fue lleno de adrenalina, cuando me tocó sentí tranquilidad y decidí dejar que me hablara, que se comunicará, ya estaba tranquila y hablábamos no recuerdo muy bien si lo abracé o no.

El caso es que, rezaba por él, por su alma y se empezaron a ir esos sueños, es muy extraño, ya me a pasado varias veces con seres queridos que se murieron y sueño con ellos, quizá sea por tristeza y quedó con trauma o que tengo algo especial.

Con el paso de los años e ido con mi familia a su tumba, le ponemos Flórez , hablamos con él, la idea es que nos escuché, ojalá que si y ojalá sea mentira esa teoría de que cuando mueres olvidas y que en la muerte no hay reencuentro con nadie.

Hace un año escuché a una profesora que dijo, el infierno lo vivimos acá en la tierra, los asesinos y delincuentes pagan cárcel y la cárcel es un infierno en todos los sentidos y si no los matan o los torturan, todo lo bueno y malo que hacemos lo pagamos y creo que tiene mucha razón y en caso de que si exista un infierno como lo describen también lo merecemos.

Yo no conocí a mi abuelo materno, solo compartí con mi abuela y abuelo paterno y con mi abuela materna, el abuelo materno murió cuando mi mamá era una niña.

Con mis abuelas siempre tuve y tengo una relación excelente, fueron amorosas y perfectas siempre, está historia es un simulacro de recuerdo, para no olvidar, un intento desesperado por hacer un poco más perdurable lo que es irremediablemente finito.

Todas esas personas con las que está tejida la trama más entrañable de mi memoria, esas presencias super importantes en mi infancia y mi juventud, que tanto amé.