Te Ayudaré A Olvidar; Freddica (Freddy x Chica)

Capítulo 11: Cambios Problemáticos.

Aquella mirada característica de Chica había cambiado.

Bonnie sabía que ya no era la misma.

Pero, ¿por qué?

¿Algo la habrá hecho sentirse triste o enojada?

—Chica, ¿te encuentras bien? —preguntó el pelimorado con preocupación.

—¿Uh? Si, si. Estoy bien —contestó sin preocupación alguna, mientras cruzaba sus piernas.

—Chica... —Llamó Freddy.

—¿Q-qué pasa? —preguntó la contraria en un tono de voz cambiante; un poco más nerviosa.

—Supuse que hoy no tenías hambre, pero igual te compre esto —Freddy saca un chocolate de su bolsillo— Para que al menos no te quedes con antojo —sonrió con nerviosismo—. Lo siento... Ya no traía tanto dinero.

—No, no —Chica se entusiasmo un poco por el aprecio, tanto que sus ojos dejaron de tomar ese extraño color— Gracias, Freddy. Eres el mejor.

Bonnie y Fox sonríen sencillamente.

—¿Y por qué están aquí? Pensé que irían a ensayar —comentó el chico de ojos miel mientras le daba un mordisco a su sándwich de carne.

—Ugh... El salón ya estaba ocupado por algunas personas, nos seria imposible ensayar ahí con tanta gente —contestó el castaño.

—Si, pero no hay problema. Con o sin un ensayo antes, estoy segura que podremos ganar —mencionó Joy con cierto entusiasmo para después abalanzarse levemente al castaño para poder abrazarlo—. ¿No es así, osito? —Le preguntó con inocencia.

—Estoy seguro de que eso sucederá, hay que creer —contestó el castaño soltando una leve risa.

Chica sólo optó por soltar un leve gruñido.
Bonnie al ver esto, inmediatamente acudió a preguntarle nuevamente.
—Eh, Chica... —El joven rápidamente fue interrumpido por Chica.

Los ojos de la muchacha nuevamente tomaron el color oscuro.
—Si, estoy bien, Bonnie. ¡Deja de fastidiar! —contestó la de cabellera rubia cabizbaja mientras le daba un mordisco al chocolate que Freddy le entregó.

—Oh, oye, Chica, tranquila —intentó tranquilizar el castaño.

—Bonnie sólo se preocupa por ti —Siguió el pelirrojo.

—Tú no te metas, Foxy —habló con molestia mientras se cruzaba de brazos.

—¿Qué te sucede, Chica? Te vemos algo molesta —justificó la chica de los Toys.

La contraria sólo alzó su mirar con mucho fastidio.
—¿Y tú, qué? Ni siquiera deberías estar aquí.

—¡Chica! —regañó el castaño por el inoportuno y brusco comportamiento que estaba teniendo su mejor amiga.

—¡Oh! Lo siento, no pensé que mi presencia en este grupo fuese a molestar a alguien —habló Joy con cierta pena e incomodidad.

—¡Por supuesto que molesta! ¡Sobre todo en este grupo! —exaltó con enojo.

—P-pero...

—¡¿Pero qué?! —dijo en modo de regaño—. Hazme un favor y vete de aquí ahora, me incómoda que estés en la misma mesa con nosotros.

—L-lo siento...

—No hace falta una disculpa, sólo aléjate de mi Freddy y nunca me vuelvas a ver en la vida, ¿si?