Mi celda eterna

Capítulo 18

Narra Betty:

Ahí estaba, admirando el amor entre un padre e hijo, era simplemente adorable. De repente, me acuerdo que tengo que volver en 5 minutos.

-bueno, me hace muy feliz que hayan hecho las paces, pero me tengo que ir-dije nerviosa, haciendo que llame la atención de ambos

-¿tan temprano?-preguntó Jug confundido

-si, es que mi tutor dijo que hoy cenaremos temprano-dije sonriendo

-si quieres Betty, puedes invitar a tu tutor a comer con nosotros-dijo el señor Jones

-no, gracias pero no, ya tiene todo preparado-dije en un tono amable

-bueno, adiós Betts-dijo Jug y se acercó, nos dimos un pequeño beso y me despedí con la mano. Cuando me aleje lo suficiente, empecé a correr como loca para poder llegar a tiempo. Yo todavía ni me creo que el Hombre haya creído que tenía detención a esta hora, quizás soy la reina de las mentiras.

(*)

Llegué, abrí la puerta y vi a el Hombre sentado en la mesa.

-¿y?-preguntó

-nada, solo estuvimos en un salón encerrados y escribimos el porque estábamos ahí-dije nerviosa

-me refiero si hablaste con alguien-dijo enojado

-no, no hable con nadie-dije tensa

-bien, vete de acá-dijo señalando las escaleras, asentí y me fui a mi habitación. A decir en verdad, pensé que iba a pasar algo peor, pensé que me iba a golpear, pero tal parece que esta de buenas o algo así.

Al llegar a mi habitación, me fui directo a la cama a dormir ya que tenía mucho sueño.

(*)

-despierta mocosa-dijo el Hombre desde afuera, salté de la cama por el susto

-okey-dije en un tono suave. Empecé a vestirme, armé mi mochila y me dirigí a la escuela al terminar

En el camino estaba pensando en lo de anoche, creo que fue innecesario mostrar la muñeca, o quizás fue un poco extraño para el papá de Jug verla, o solo estoy exagerando y fue lo mejor llevarla.

Al llegar a la escuela vi a Jughead apoyado en la puerta de la entrada, sonreí al verlo, empecé a caminar hacia el.

-mira nada más-dijo una voz horrenda..Ethel, me di vuelta y la vi disgustada

-¿ahora que quieres?-pregunté suspirando

-venganza, debes saber que Jughead y yo seremos novios y el te dejara en el olvido-dijo enojada, rodé los ojos, me acerqué a ella, mira todos lados y luego le agarré la muñeca con fuerza

-escucha perra, estas loca si crees que el te quiere, o si mínimo te considera como una amiga, date cuenta que el nunca se va a acercar a vos, así que deja de molestarnos, porque no sabes de lo que soy capaz de hacer-dije en un tono muy brusco, ella tragó saliva

-estas demente-dijo asustada

-tal vez, pero al menos Jug eligió a la demente correcta-dije sonriendo y me fui de ahí, pude ver como ella se quedaba quieta sin poder hacer ni un solo ruido, no me gusta ser así de violenta, pero de verdad no puedo soportarla, esa chica debe aprender que intentar drogar a una persona esta mal-hola Juggie-dije poniéndome a lado de Jug, me miró sorprendido

-Betts, disculpa, estaba en mi mundo-dijo feliz, reí

-tranquilo, no hay problema-dije amablemente

-sabes, me quedé pensando en lo de ayer, si vos no hubieras estado ahí para mi, de seguro mi padre se hubiera ido-dijo tomando mi mano-te debo mi vida entera-dijo

-no seas exagerado-dije 

-es en serio, me ayudaste en mucho Betts, no se como agradecerte-dijo 

-solo con un beso basta-dije riendo, el sonrió

-eso no lo tienes que pedir-dijo y me tomo por la cintura, yo lo agarré por el cuello y nos dimos un beso lento y apasionado. De repente suena el timbre

-¿te parece si algún día rompemos ese timbre con un martillo?-preguntó sarcástico, reí

-sería un placer-dije y ambos reímos, después nos fuimos de ahí

Al terminar la clase, nos dirigimos al recreo con los demás, hablamos de tonterías, también hablamos sobre lo de anoche, todos se quedaron impactados al escuchar eso, pero también les pareció tierno. Después de eso, el día fue normal, clases de nuevo, recreo y la última clase, nada interesante. 

Estaba caminando afuera de la entrada, dirigiéndome a mi casa

-Betty, espera!-dijo una voz por atrás mío, me di vuelta y vi a Jughead

-cierto, se me olvido despedirme-dije sorprendida, el rió

-si, además casi te olvidas de una lapicera que me prestaste-dijo y me dio mi lapicera en la mano

-gracias Juggie-dije feliz

-bueno, nos vemos mañana amor-dijo, me sonroje al escuchar ese apodo

-adiós Juggie-dije y le di un pequeño beso en los labios, pero al instante se escucha la bocina de un auto, me doy vuelta y......veo el auto del Hombre.

Me quedé congelada al verlo, podía sentir como mi piernas dejaban de aguantar el peso de mi cuerpo, sentí como si tuviera lava en mi espalda, e incluso comencé a delirar.

-¿estas bien Betty?-preguntó Jug preocupado

-s-si, es que mi tutor vino por mi-dije con la voz temblorosa,  mi cuerpo estaba gritando por ayuda, sabía que no saldría de esta, así que mi cuerpo hizo lo posible para poder decirle algo a Jughead

-ayuda por favor, ve a la calle ****, mi casa es la última de la cuadra-dije y me fui hacia el auto, sabía que el Hombre tenía una pistola en el auto, así que si no subía al auto de seguro iba a matar a todos. Abrí la puerta y arrancó el auto de inmediato

-vamos a hablar en casa-dijo con una voz gruesa, igual a la que había usado para secuestrarme...

Holiiiiiiii👋👋👋, espero que les haya gustado el capítulo, disculpen por ser tan corto, pero les aseguro que vendrán muchos problemas en el que viene, sin decir nada más, me despido.
Chauuuuuuu😘😘😘