Mis amigas

De paseo

Narra stacey

       Hoy era sábado, ¡¡bien!! Pero me aburro, ¡¡mal!! Por eso decidí llamar a Marie y a Victoria para poder estar juntas y divertirnos. Creo que son las primeras verdaderas amigas que he tenido en toda mi vida. Marqué el número de su teléfono fijo que me dio cuando nos conocimos. La verdad creo que aunque nos conocíamos ahí por primera vez es como si nos conociéramos de toda la vida. Es la verdad.

       -¿¿Hola?? ¿¿Quién es??-Preguntó Marie.

       -Soy yo, tontita, Stacey-Dije mientras me reía entre carcajadas.

       -¡¡Aaaah, vale. Eres tú, Stacey!!-Dijo también riéndose.

       -¡Me aburro!-Dije en un suspiro.

        -¿¿Y qué quieres que haga yo??-Preguntó algo ofendida.

         -Pues... Si quieres podríamos quedar en el centro comercial al lado del parque en donde nos conocimos-Dije cruzando los dedos para que dijera que si.

        -¡¡Claro!!-Dijo Marie bastante emocionada.

        -Invitamos a Victoria-Dije muy feliz.

         -¿¿Cómo no??-Dijo en tono de pregunta-Venga cuelga ya y llámalo, ¡¡tonta!!-Dijo colgando ella.

          -¿¿Diga?? ¿¿Quién es??-Preguntó Victoria.

           -¡¡Soy yo, Stacey!!-Dije gritando de felicidad.

           -¿¿Quieres ir conmigo y Marie al centro comercial al lado del parque??-Pregunté muy, pero que muy feliz.

            -No-Dijo seriamente-Es broma, ¡¡claro que iré!!-Dijo riéndose demasiado.

           -Seguramente Marie ya esté ahí. Así que rápido-Dije  sonriendo aunque no lo notara.

           -Pues estoy ahí en nada-Dijo Victoria colgando.

         Después de llamarlas decidí ponerme una camisa ajustada de color azul celeste, unos pantalones ajustados de color blanco y unas playeras de color blanco. Me fui a la entrada del centro comercial y ellas ya estaban ahí esperando y hablando. Como la última vez Marie tenía una bolsa de papás y disfrutaba muy de las papas.

       -¡¡Hola!! ¿¿Qué tal??-Dije muy feliz.

      -¡¡Hola!! Estamos bastante bien-Dijo Victoria y Marie sonriéndonos.

      Como habían bastantes rebajas, nosotras muy listas fuimos a comprar, como si fuéramos bestias en plena caza. Casi todo estaba rebajado. Fue como el paraíso, era todo tan barato.

      Mientras nosotras estábamos ahí comiendo un helado, notamos que un chico estaba mirándonos fijamente. Nos miramos algo confundidas y se nos notaba en la cara expresión de "ay, mi madre".

      -¿¿Qué deberíamos hacer??-Preguntó Marie en voz baja e intentando disimular.

      -Pues, cuando terminemos el helado, que ya casi está terminado, huímos hasta alguna de nuestras casas-Dije también en voz baja-Pero, ¿¿cuál es la casa que está más cerca??-Pregunté desconcertada.

         -La casa de Marie es la que está más cerca-Dijo Victoria mirándonos con un poco de miedo.

         -Vale-Dijimos decididas.

         Terminamos de comer el dichoso helado y cogimos todas las bolsas y echamos a correr como si no hubiera un mañana. Entramos a la casa, pero no estaba sus padres excepto nosotras. Llamé a mi madre para decirle que no iba a venir porque voy a dormir a casa de Marie. Dormimos y me fui a casa bastante feliz. Como siempre.