Otro Problema #2#

CAPÍTULO 2: PEQUEÑO IMPREVISTO

-Din don- sonaba el timbre de la casa de Isabella, estaba cagada de miedo, no paraba de temblar y sudar-.

-abrió la puerta- Corre, pasa- me dijo haciendo señales con la mano- Vamos para arriba.

-Vale- le dije siguiéndola-.

- ¿Amanda? - apareció una señora que recordaba perfectamente, eran la madre de Isabella-.

-Hola Claudia- le dije yendo a dale un abrazo, al principio siempre la llamaba señora Parker, pero ya teníamos mucha confianza-.

- ¿Qué tal? ¿Cómo estás? - me preguntó en mitad del abrazo-.

Y yo sin despegarme de ella miré a Isabella, simplemente con esa mirada ya sabíamos lo que pensábamos ambas, "si supiera ella", y mientras Isabella se reía yo le mentí diciendo:

-Muy bien, ¿Y tú? - le pregunte amablemente-.

-Bien, todo el día aguantando a este par de monstruos, pero bien- no pude evitar reírme, con "monstruos" se refería a Isabella y a Fox, su pequeño perro salchicha, era una ricura-.

- Que graciosa mamá- dijo Isabella un poco molesta- Pero tenemos que hacer cosas, ¿verdad Amanda? - me amenazó con la mirada-.

-Sí, es verdad, ya nos vemos luego- le dije a su madre-.

-Hasta luego- me dijo sonriendo-.

Subimos las escaleras rápidamente hasta llegar a su habitación, nos encerramos en ella, yo cada vez estaba más y más nerviosa.

-Bueno, ¿te has traído el test de embarazo? - preguntó Isabella empezando a entrar en el cuarto de baño de su habitación-

-No, pensé que tú tendrías.

- ¿Cómo voy a tener yo? - dijo poniéndose una mano en la frente-.

-Y yo que sé- nos estábamos empezando a poner nerviosas-.

-Bueno, calma, tiene solución, no tenemos porqué alterarnos, bajamos a la farmacia y compramos uno.

-Vale- dije suspirando para intentar calmarme-.

Bajamos a la planta de abajo y seguidamente salimos de su casa para ir a la farmacia de la esquina, había cola, por lo que estuvimos un buen rato esperando. Cuando ya era nuestro turno me puse muy nerviosa, como si estuviera en el médico y era ya mi turno para vacunarme, apenas me salían las palabras.

-Ho... hola... ¿tienen... test... de- pero al estar hablando tan despacio Isabella se puso nerviosa y me cortó-.

-Mi querida amiga quería saber si tienen test de embarazo- le dijo a la farmacéutica-.

-Sí, claro- la mujer se adentró en los almacenes, y mientras, Isabella me echó la bronca, se le notaba nerviosa, pero no tanto como yo-.

- ¿Qué te pasa? ¿Por qué no hablabas?

-No sé, no sé, es que estoy muy nerviosa, ponte en mi lugar, estoy cagada- ahí se le pasó un poco el "enfado"-.

-Tranquila, va a salir bien- dijo agarrándome de los brazos-.

-Vale- le dije algo más calmada-.

Unos minutos después la farmacéutica llegó con el maldito test en la mano.

-Tomad chicas, ¿queréis bolsa?

-Si, por favor- le dije amablemente-.

-Tomad- la bolsa con el test dentro lo cogí yo-.

-Muchas gracias- dijo Isabella-.

-A vosotras- era muy maja, que cayó bien-.

Salimos de la farmacia y fuimos directas a la casa de Isabella. Cuando llegamos subimos corriendo a el cuarto de baño que había en su habitación.

Cuando llegamos empecé a sacarlo de la caja, una vez fuera mi mano empezó a temblar mientras lo miraba aterrorizada.

-Te espero fuera, ¿vale? - le respondí que sí moviendo la cabeza, no podía apartar la vista del test-.

Al poco de salirse empecé manos a la obra, leí un poco las instrucciones, aunque ya más o menos me las sabía. Pero decidí seguir paso a paso lo que ponía.

No tardé mucho, cuando terminé me subí las braguitas y el short, después tiré de la cadena, dejé el predictor en el lavabo y abrí la puerta.

-Pasa- le dije a Isabella que me esperaba impaciente sentada en su cama-.

Se levantó corriendo y entró al cuarto de baño. Ambas nos sentamos en el suelo a esperar a que el test realizara su función.

Estaba temblando del miedo, blanca como la nieve. Ese test determinaría mi futuro.

-Isabella me cogió de la mano- salga lo que salga yo voy a estar ahí apoyándote.

-Gracias- le abracé, es la mejor amiga del mundo-.

Se escucharon unos pasos que venían hacia arriba. Seguramente sería su madre, bueno, que digo, seguro que es su madre, era la única que estaba en la casa aparte de nosotras.

Así que nos levantamos corriendo por si decidía venir a vernos, Isabella se encargó de coger el predictor y guardárselo en la espalda. Cada vez se le escuchaba más cerca.

Tocó a la puerta y sin ninguna respuesta nuestra entró, nosotras disimulamos fatal, lo que hicimos fue quedarnos mirándola con una sonrisa falsa en la cara, tiesas como palos, y para colmo Isabella tenía las manos en la espalda con el predictor entre ellas.

-Chicas...- dijo su madre mientras entraba, pero se impresionó al ver como estábamos- ¿Qué hacéis así?

-Em..., nada mamá, solo hablábamos- intentó disimular Isabella-.

- ¿y que escondes ahí detrás?

-Nada..., solo es un regalo para Amanda- estábamos sudando de la tensión-.

- ¿y por qué se lo das aquí?

-Em., porque el baño mola mamá- dijo medio riéndose, y yo iba por el mismo camino-.

-Cada día entiendo menos a las adolescentes- dijo negando con la cabeza-.

-Bueno mamá, ¿querías algo?

-Ah sí- dijo recordando a lo que venía- Que me voy a trabajar ¿vale?, os quedáis solas en casa, portaros bien.

-Sí mamá- dijo poniendo los ojos en blanco-.

-Adiós Claudia- le dije amablemente, aunque por dentro me estaba muriendo-.

-Adiós, os quiero- dijo empezando a cerrar la puerta-.

-Y nosotras- dije en nombre de la dos-.

Cuando cerró la puerta por completo una tranquilidad inundó mi cuerpo, por lo que suspiré.

-Amanda...

Me giré, estaba Isabella observando el test entre sus manos, descompuesta totalmente, parecía que había visto un fantasma.

Me fui acercando poco a poco, con miedo, y cuando llegué a su lado ....

Siento muchísimo dejar este capítulo así , pero para averiguar el resultado del test tendréis que esperar al siguiente capítulo, porque con Isabella siempre es todo  impredecible, espero que os haya gustado y tengáis ganas de más, porque el siguiente viene cargadito de sorpresas. Espero que os esté gustando esta segunda parte y un besazo queridos lectores míos, hasta el próximo capítulo   💕❤