Capitulo 17

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Ya era hora de ir a clases, Minaki y yo estábamos paradas en el límite de la casa, esperando que todo resulte bien, Akane nos daba ánimos al igual que Kasumi.

-¡Despejado!- grita Ranma apareciendo en el techo.

Minaki y yo nos miramos, tomo todas mis fuerzas y salimos a la calle, Nabiki nos acompañaría hoy, dijo que quería comprobar que todo saldriá bien.

-¿Lista?- susurra Ranma cayendo a mi lado.

Yo niego con la cabeza, estoy aterrorizada.

Ranma toma mi mano y me da una sonrisa calida, la cual me reconforta.

Caminamos con normalidad, el problema iniciaría cuando lleguemos a la escuela.

A unos metros de la entrada puede ver a la tía Joshimi en ella, mirando con sumo cuidado a cada chica que pasaba a su lado.

-Muy bien Akane, es tu turno, se la distracción- dice Ranma divertido.

Akane lo mira furiosa, pero luego suspira, sabe que está vez, por raro que suene Ranma tenía razón, ella es la distracción. Akane camina a la entrada y el habitual caos de chicos empieza.

Aprovechamos el desconsierto y entramos corriendo por la otra puerta, mientras lo hacemos creo ver al señor Takimoto, pero parece no reconocernos.

Ranma me deja en el salón y se sienta en la mesa de mi escritorio, Seinya y los demás me miran sorprendidos.

-¿Tn eres tú?- dice Seinya sorprendida.

Yo solo le sonrió, todos me rodean y me miran emocionados. 

-Te ves increíble, ¿quién es tú estilista?!- dice otra de las chicas.

Miro a Nabiki, esperando a que me de su autorización para pronunciar su nombre, está me sonríe.

-Es Nabiki- sonrió.

Todos la miran ahora a ella, en un parpadeo salen corriendo hacia ella y la inundan de alagos y preguntas, se ve que disfruta de esa atención.

Miro a Ranma, el cual también la mira divertido.

Rápidamente mi nueva apariencia paso a segundo plano, siendo el examen sorpresa de álgebra la nueva sensación, cosa que no me importo en lo más mínimo, pues solo me importa una opinión.

Cuando podía miraba a Ranma de reojo, aveces era yo la que sentia su miraba y cuando concidiamos ambos sonreímos, me gusta sentir esa complicidad entre los dos.

La campana del almuerzo sonó más rápido de lo normal, sin dudarlo Ranma y yo salimos corriendo al cerezo, cosa que no sorprendido a Seinya, la cual solo me dio ánimos a la distancia, no pude evitar sonreír, es una gran amiga.

Ranma me ayuda a subir al cerezo.

-¡Esto es tan emocionante, ni siquiera me reconocieron!- digo ansiosa.

Ranma me da un beso en la mejilla y me toma de la mano.

-Te dije que todo estaría bien- sonríe.

Lo miro emocionada y le doy un beso, casi caemos por el impulso que llevaba, Ranma me suelta para agarrarse del cerezo y no caer, me separó rápidamente.

-Lo siento mucho, es solo que estoy tan feliz- digo ayudando a Ranma a estabilizarse.

-No te preocupes, me agrada tu entusiasmo, es tierno- dice feliz.

Me acerco un poco más y me recargo en su hombro, Ranma pone su mejilla en cabeza y vuelve a tomarme de la mano.

-Oye, se que no es mejor momento para decir esto, pero no veo otra oportunidad- suspira.

Sus palabras me confunden, así que me separó un poco de él, se ve claramente nervioso.

-¿Recuerdas eso de mudarnos?- yo asiento con la cabeza -Bueno... Creo que debemos aplastarlo un poco más, ya sabes hasta que todo se calme.

Suspiro profundamente y trato de pensar bien lo que voy a decir; por un lado es comprensible, los Tendo nos ha ayudado tanto estos días que irnos sería como una apuñalada en la espalda, y por otro, yo de verdad quiero estar con él y formalizar.

-Tienes razón, algo de paciencia no estaría mal- digo finalmente.

Eso parece sorprenderlo.

-¿Enserio?- dice sorprendido, yo le sonrió.

Es como si hubiera esperado otra clase de reacción.

-¡Eres la mejor!- sonríe para darme un beso en la mejilla.

-Eso ya lose- digo divertida -Por ahora, hay que empezar a comer, el receso terminara en cualquier momento- sonrio.

Ranma y yo comimos alegres, la campana no tardó en sonar y volvimos al salón, la profesora todavía no había llegado, así que Ranma aprovecho y se puso a hablar con sus amigos, yo fui con Seinya y las demás.

-¿Y ya nos dirás el porque de tu nueva apariencia?- pregunta curiosa Seinya.

No puedo evitar ponerme nerviosa, no sé si sera buena idea comentarles, pero entre más personas sepan, más ayuda tendremos.

Suspiro y les cuento todo, les cuento sobre mis padres y la tía Joshimi, y también sobre sus planes y su repentina llegada. No dudaron en ofrecer su ayuda, cosa que me alegro profundamente, y les agradecí.

-Entonces nos vemos mañana- digo despidiendome de las chicas.

-¡Hasta mañana!- dicen para alejarse.

No puedo evitar sonreír, y me abrazo un poco más fuerte del brazo de Ranma mientras caminamos al Nekohanten.

-Esas chicas fueron muy amables al distraer a tu tia para que pudiéramos escabullirnos- dice girando a verlas a lo lejos.

-Si, así son ellas- digo apoyando mi cabeza en su hombro.

-Ya casi llegamos, sera mejor si te dejo aquí, no quiero crearte problemas- dice deteniéndose.

Algo en mi no quería dejarlo ir, pero tiene razón, si Shampoo nos ve juntos, no dudará en declararme la misma guerra que Akane, cosa que no necesitó ahora.

-Esta bien, nos vemos- digo para darle un beso rápido.

Ranma me sonríe y sale corriendo en dirección a la casa Tendo. En cambio yo, cruzo la calle y entro en la Nekohanten.

-¡Buenas tardes!- digo con ánimos para tomar mi delantal.

Shampoo me mira extraño, al igual que todos en el lugar.

-¿Tn, eres tú?- pregunta nerviosa.

Le sonrio y asiento con la cabeza.

-Me hice un cambio de look, ¿Te gusta?- digo nerviosa.

Ella sonríe y va corriendo conmigo a la cocina.

-¡Me fascina!, te vez tan diferente, las chicas comentaron algo, pero no creí que te vieras tan bien- dice animada.

-¡Ya dejen de hablar, y pónganse a trabajar!- grita la anciana saliendo de la nada.

Ese gritó, nos hace dar un pequeño brinco, pero luego nos saca una risa.

-¡En seguida!- decimos ambas para volver a trabajar.  

Mal Tercio (Ranma x Tn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora