No te alejes de mi lado

2

LOUIS

Todo el salón estalló en risas.

—Por favor, Styles; busque una buena excusa la próxima vez—bufa el profesor

—Trato—le contesta, comenzando a caminar hacia mí, al llegar al banco se sienta sin prestarme la más mínima atención

Lo primero que me había llamado la atención del chico eran sus rulos; al igual que sus tatuajes. Quiero decir; ¿por qué se habrá hecho tantos? Aunque le sentaban bien, lo hacían parecer un chico rudo, pero en realidad no sé ni cómo era su actitud, por ende no podría saber.

—¿Qué onda?—lo saluda Liam volteándose mientras el profesor comenzaba a escribir en en el pizarrón

—Normal—se encoge de hombros

—Payne, Styles presten atención—les llama el profesor

—Si solo está escribiendo, no está diciendo nada—se queja Niall con un paquete de papas, las cuales no había visto cuando la sacó.

—Horan, guarde su alimento, por favor.

—Es que tengo hambre, pero por usted lo guardo—le contesta con un toque de coqueto.

—Una pregunta...—le susurro al chico a mi lado, causando que volteara a verme con confusión

—¿Y tú quien eres?

—Louis, el nuevo—me presento

—Va, me alegro—contesta con sequedad, volviendo su vista al pizarrón, aunque el profesor aún seguía discutiendo con Niall, parece ser que ahora había sacado algo de bebida.

—¿Puedo...?—él me interrumpe

—Pregunta.

—¿Lo del pájaro era verdad?—le pregunto con curiosidad

Éste me mira, alzando una de sus cejas.

—No, niño, no fue verdad.

—¿Niño?—pregunto mirándolo interrogativo—, tengo dieciocho.

—Me alegro por ti.

Va, su actitud era una mierda. Parece que su aspecto le queda realmente bien junto con su personalidad.

—Styles, trata bien a sormudo—le habla Niall con voz amenazante; la cual fue fingida.

—¿A quién?—pregunta éste con confusión a causa del apodo extraño

—Pues te explico—comienza a hablarle, pero antes de que pueda seguir, el profesor lo interrumpe

—Horan, o deja de hablar o sale de mi salón.

—Esta bien, me callo—dice, acomodándose en su asiento, cuando el profesor se dió vuelta para seguir escribiendo, Niall vuelve a voltearse a nosotros—; como te decía—susurra, aunque al decir verdad no era para nada un susurro—, cuando lo conocí creí que era sordo, luego también creí que era mudo, pero resultó ser que no, me mintió—le cuenta—; al final decidí apodarlo así, lo cual es una mezcla entre sordo y mudo.

—Bien—responde

—Aburrido—le contesta mostrándole el dedo medio

—Bien, Horan, afuera—le ordena el profesor con seriedad

—No, no, no, lo siento, profesor, no hablaré mas.

—Nada de disculpas, afuera—le ordena señalando la puerta