- Déjame ver si entendí; tú quieres que YO sea más romántica en la relación, por lo cual DEBO pagarte con MÍ propia plata una CENA para DOS -.
- Correcto, tu llevas los pantalones después de todo y- -.
- Me chupa un huevo llevar los pantalones, ¿Tienes idea de lo muy poco que pude dormir por el mísero trabajo, donde cada día me alcanzaba apenas para cocinarme a mí misma unas milanesas? ¡Y-Y debo compartirtelas! ¡Gasto más! Arroz, aceite, ajo, cebolla ¿Es que quieres que venda mis riñones? -.
- P-Pero es nuestra cita... Prometiste que saldríamos a comer. "No importa lo que pase haremos esa salida sí o sí" Fue lo que dijiste mientras hablabamos en la cama... -.
- ¿Eso dije?... Vaya, si tu lo dices, que se haga -.
Se encontraban frente al repostero de comiada, mostraba todas las delicias del momento. Pelaban porque según la mayor que según el "trabajo de porquería" que consistía en trabajo de mesero, del cual solo duraba desde las 12am hasta la 1pm y donde la paga era la cantidad mencionada por la reclamadora; pero solía gastar lo que le quedaba en chocolates, alfajores, empanadas y hasta cajas de chocotejas por montón, ni ella misma se creía lo mucho que ahorraba, en fin.
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Si quiero continuar esto aaA