LVI

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     Querida Inexistencia:

Nos encontramos,

fue cosa de suerte.

Hablamos,

tu madre dijo que yo era especial para ti,

que solías nombrarme,

          ¿aún lo haces?

te sonrojaste.

Te fuiste por un momento,

cuando volviste lo note,

te gustaba,

de alguna manera lo hacía.

No pude hacer nada,

sabes que no soy buena en eso.

Quizás fue solo un instante,

pero te aseguro que soy feliz por eso.

Querida InexistenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora