𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 1

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𝔽𝕖𝕝𝕚𝕔𝕚𝕕𝕒𝕕𝕖𝕤, 𝕕𝕖𝕤𝕓𝕝𝕠𝕢𝕦𝕖𝕒𝕤𝕥𝕖 𝕦𝕟 ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠

En las oscuras y silenciosas calles, se podía ver a simple vista un muchacho de traje completamente negro como el mismo carbón como al igual que la camiseta se podía comparar como la Blanca nieve; no es solo por ser algo blanco, si no, por ver como el color era extremadamente pulcro y liso. Podías decir que el muchacho cuidaba su aspecto como si su vida dependiera de ello, el motivo, era desconocido.

Sus pasos sonaba como si se tratase de una película de terror, con sigilo, como si se tratase de un asesino o secuestrador, buscando con su mirada a una presa, algo con que divertirse en esa misma noche. Ya que, no tenía nada que hacer, su vida no tenía sentido alguna ¿Objetivo? Por ahora ninguna ¿Una idea alguna? No. Simplemente no, solo quería ver ese exquisito líquido que recorría con total lentitud en el cuerpo del ser humano. El color carmín y el sabor a metal, joder... como extraña esos momentos.

En sus manos jugaba con un cuchillo mediano, dándole vueltas con los dedos sin importar en cortarse, en más, prefería eso pero sería un problema para su presa. El frío metal del cuchillo se podía reflejar la luz del faro. Dejando a simple vista su aspecto y su traje bien pulcro, sin arruga o una mancha, simplemente perfecto. Silbó por unos segundo, pensando cosas de la vida.

Iba seguir así si no fuera por otra compañía en la oscuridad, bueno, casi en la oscuridad. Sus manos detuvo el movimiento que hacía con el cuchillo, apuntando hacia la silueta que estaba apoyada en una pared. No podía decir quién era, ya que, en donde se encontraba no había luz, solo sombra.

Suspiro, solo quería tener unos minutos a solas y ni eso podía hacer.

El chico se acerco a Luis con total confianza sin miedo de ver como el chico poseía un cuchillo en su manos.

Luis escondió el cuchillo en uno de sus bolsillo para posteriormente sacar unos guantes blancos, donde no dudo en ningún segundo en ponérselo; se cruzó de brazos a la vez cambiando su expresión a una completa seriedad al frente del chico. Sabia perfectamente quién era al ver como se acercaba a la luz.

— ¿No vas a ponerte su mascarita? — El chico fue el primero en romper el silencio. Donde Luis frunció su entrecejo; en más, no se llevaban bien, tampoco podía decir que se llevaban mal. Simplemente eran conocidos o menos que eso.

El chico soltó una suave risa, intentando ocultar sus labios encurvado con sus manos.

Luis rodo los ojos con fastidio, ya sabía lo que quería y por supuesto que se lo dará. No pensaría lo mismo si no estuviera amenazando con algo bastante patético a su al parecer. Tosio falsamente intentando recuperar al chico, donde este estaba pensando en la misma nada.

— Ya he visto, y créeme que lo observé como si fuera un maldito acosador — Añadió. Intento aparentar de lo más tranquilo que pudiera.

Era lo primero que le enseñaron; Que no te pisoteen.

Bueno en eso falle.

El chico sonrió con calidez intentando calmar a Luis, sabía perfectamente que este estaba a la defensiva que no confiara en él con un simple "hola" se acerco hacia el chico del traje, quería tener confianza. Oh eso quería intentar, ya que Luis es como un cubo de hielo, sin sentimiento y si pudiera decir, sin calidez.

— Deja de sonreír como un lunático — Añadió con rudeza.

— Eh... vamos, era mi mejor arma.

— ¿Una sonrisa? ¿Enserio? — Cuestiono indignado. Tenía un montón de armas en su casa y coche, hasta en su propio tobillo guardaba una pistola. Y su "compañero" decía que su mejor arma era una puta sonrisa.

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⏰ Última actualización: Jun 20, 2020 ⏰

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