Era la tercera vez que cambiaba de posición en la cama, no podía dormir. Lo único que quería era descansar, pero aquel chico que vio a través de la ventana no dejaba de dar vueltas en su mente. Era raro, tenía curiosidad por ver su rostro, su cuerpo. El color de su sangre, sus expresiones de dolor y miedo. Normalmente hacia una obra por semana, pero Yoongi no estaba seguro de poder esperar una semana, tal vez podría hacer una excepción y trabajaría dos veces, solo por esta vez.
Sin embargo no lograba dormir, el sueño abandono su cuerpo en el momento que estuvo frente a la ventana. Tal vez solo eran las ganas de probar experimentar con lienzos nuevos, usualmente sabía todo de la persona que sería su víctima, su edad, su lugar de nacimiento. TODO.
Después de unas cuantas horas de descanso, se levantó de su cama y realizo su rutina. Se dio un baño con agua caliente, eligió su conjunto de ropa y desayuno un poco de cereal con leche. Cubrió la mitad de su rostro con un cubre bocas y salió de su casa. No sabía que es lo que haría, pero quería hacerlo. Camino hasta la casa del chico que había mirado horas antes y se quedó parado unos segundos. Sonrió relamiendo sus labios mientras se acercaba a la puerta de color marrón.
Con su mano en puñado dio dos timbrazos a la puerta. Apenas habían pasado 7 segundos y él ya estaba desesperado. Quería destrozar la puerta, y tal vez también el cuerpo del hermoso joven que se asomó, sus ojos eran de un color café, un café brillante y precioso. Sus labios eran delgados y rosados.
-¿Te puedo ayudar en algo? –Pregunto el joven con una expresión de confusión en su rostro-
-Si... -carraspeo, suavizando su voz y fingiendo nerviosismo- E-estoy perdido y necesito un teléfono para llamar a mi madre.
Yoongi mintió, pues su madre estaba muerta desde hace mucho tiempo, a causa suya.
-Oh! Por favor pasa, te prestare mi teléfono –despejo la entrada, abriendo la puerta dando paso al lindo chico de tez blanca-
Yoongi sonrió mentalmente y entro a la casa dejando sus zapatos en la entrada, dio una reverencia de agradecimiento y sonrió levemente.
-Mi nombre es Yoongi, gracias por su ayuda.
-No agradezcas, también me he perdido en lugares desconocidos. Por cierto, mi nombre es Jin.
Yoongi sonrió amablemente acercándose a Jin.
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ESTOCOLMO /YJ/
FanfictionEl síndrome de Estocolmo es una reacción psicológica en la que la víctima de un secuestro o retención en contra de su voluntad desarrolla una relación de complicidad y un fuerte vínculo afectivo con su captor. Principalmente se debe a que malinterp...