Labios temblorosos [geraskier]

Prefacio

[Dijo que no podía amar a alguien porque podría romperme..]

Una ráfaga de gélido viento abraza sus cuerpos y les cala hasta los huesos. Ni siquiera la fogata ardiente les mantiene suficientemente cálidos. Un manto azabache cubre el cielo, y señala una hermosa luna vistosa, aunque eso no le quita lo cruel que es la noche, si hablamos respecto al despiadado frío que suelta en ventiscas; señal de que el invierno está avisando su llegada.

Geralt lo sabe, y odia aquella estación del año. El invierno significa hambruna y dificultosa presencia de buenos y fértiles terrenos y cultivos. El invierno es, si le preguntan a él, inhumano y feroz.

El bardo, acompañante de Geralt, resopla audiblemente, y con los dientes apretados.

Geralt de Rivia mira, de reojo y con disimulo, a su compañero. El bardo está frotando sus manos y sus brazos en busca de calor, su rostro se encuentra lívido, y sus labios están demasiado resecos, y el brujo, observa cómo tiemblan un poco. Sus mejillas están algo rojas del frío.

—Vaya, el clima ya está empezando a cambiar, ¿no? — afirma Jaskier, con voz tremulante.

Geralt piensa que esas son las primeras palabras que dice en dos horas, lo cual es simplemente impresionante.

El brujo frunce el puente de su nariz. Su bardo está demasiado callado.

—No menciones lo obvio.— responde, observando fijamente a su acompañante.

—Odio el invierno.— dice Jaskier, importandole poco lo antes dicho por Geralt.

Geralt desvía la mirada y no responde. Aunque mueve su cabeza un poco; el bardo toma aquello como un signo de que él también está de acuerdo, e inevitablemente se siente orgulloso de sí mismo, al ver que el brujo acepta lo que dijo. Es algo estúpido, pero Jaskier siempre interpreta esos gestos a su manera, y se ilusiona, pensando de que Geralt ya no considera su presencia tan molesta ni abrumante.

Lo soporta, o eso piensa Jaskier. Han pasado 2 años y un par de meses desde que habían decidido formalizar su relación. Bueno, Jaskier lo había decidido.

"Somos novios", le dice Jaskier a Geralt muchas veces. Lo hace para molestarlo. Ya sabe su respuesta.

"Hmm" , responde siempre el brujo. Esa respuesta sigue intacta, pero está bien para Jaskier, está acostumbrado. Jaskier siempre le sonríe cuando dice esas palabras. Geralt no entiende porque lo hace. Después de algunas sesiones de sexo salvaje y muy caliente, Jaskier pensaba en lo bien que iban como una pareja.

Jaskier desea pensar de que son una pareja. Mira a Geralt y sonríe un poco.

"Sip, lo somos", piensa, antes de que su expresión se endurezca al sentirse invadido por otra oleada de viento helado.

Jaskier, a pesar de estar cerca de Geralt, desea acercarse más, con el fin de sentir un poco más de calor en el cuerpo de Geralt, y usurpar su espacio personal , que siempre el brujo insiste en remarcar, pero al bardo no le puede importar menos lo que piense Geralt, así que se acerca poco a poco, con disimulo. Se arrastra cuidadosamente al lado de su compañero.

El brujo le mira, enarcando una ceja.

—No te acerques tanto, Jaskier— advierte Geralt, dándose cuenta de sus intenciones.

—Vamos, hace frío, ¿sabes que se me están congelando las jodidas piernas? Hay que mantener un poco de calor— explica el bardo, que ahora está casi posando su cabeza en el pecho del brujo. El aliento de Jaskier está cerca de su nuca, y le da un escalofrío a Geralt.

Geralt se tensa y, furibundo, pero no lo aleja.  

—Bien, pero no intentes nada—

El bardo extiende la comisura de sus labios, formando una cálida sonrisa que no pasa desapercibida por los ojos atentos de Geralt. Su temperatura aumenta, está nervioso. Jaskier está tan cerca de él...

Sangre sube e invade a sus pálidas mejillas. Geralt puede sentir su corazón acelerarse un poco. No le gusta la sensación.

Jaskier se acomoda mejor contra su cuerpo. Consigue un poco de calor, y gime de satisfacción, mientras cierra los ojos. Tiene unas expresiones tan ajenas a las de Geralt ahora mismo.

El brujo se sobresalta un poco, sin embargo, vuelve a estar demasiado quieto como una estatua en pocos segundos. 

—Geralt, te quiero ¿lo sabes, verdad?— Jaskier sigue manteniendo sus ojos cerrados, pero se mueve un poco. 

El ambiente ahora tiene algo romántico que a Geralt simplemente le agobia y le hostiga. Nunca le ha gustado este tipo de situaciones, porque no sabe como lidiar con ellas. Sólo las evade, pero tal parece de que no podrá hacerlo en esta ocasión.

—Calla, ya es muy tarde para que empieces a hablar tonterías— le recrimina a Jaskier. 

El bardo suelta una risita dulce casi inaudible, que perturba los oídos del brujo.

—No son tonterías— Jaskier levanta la mirada y observa a Geralt con detenimiento. Se incorpora mínimamente y le planta un beso en la mejilla con rapidez.

El brujo frunce la nariz y se le dedica una mueca de molestia, y una mirada de hastío y disgusto. 

Y es en ese momento, cuando Geralt toma a Jaskier de los hombros, y lo aleja. No es brusco, pero es evidente de que el atrevimiento que tomó el bardo no le gustó. Aún así, no está del todo molesto con su compañero, pues es consciente de que no es culpa suya el querer un poco de afecto; la culpa es de él. No le alegra el recibir arrumacos o darlos, pero más que eso, es que simplemente no sabe hacerlo. 

—¡Oye!— se queja Jaskier, en un gemido lastimero. Ahora está frío nuevamente.—¡Estaba muy cómodo allí!—dice refiriéndose al pecho del brujo. 

Geralt se levanta, y se va a ver a Sardinilla por unos minutos, quién está atada al tronco de un árbol, y relincha cuando ve al brujo. Jaskier jadea, indignado.

Rebusca en la alforja que lleva en su lomo, y saca una tela que no es muy visible por la oscuridad, mientras Jaskier no despega su mirada penetrante de él.

Cuando regresa, trae consigo una manta de color pardo. Es larga y de algodón. 

"Se ve acogedora", piensa Jaskier.

El brujo se acerca a él, y le tira la manta, que cae en la cara del bardo.

—Cúbrete con eso. No quiero que te enfermes— Geralt ni siquiera le mira, y se sienta nuevamente.

—Bien— dice secamente. Se levanta y se va hasta el otro extremo de la fogata. Su pecho se infla de molestia, pero no pronuncia una palabra más. La manta puede ser suave y acogedora, pero no se compara a estar cerca de Geralt y encontrar calor en él. Así que ni siquiera rodea su cuerpo, a pesar del frío. Está molesto.

Geralt resopla, sintiéndose más cómodo y tranquilo cuando Jaskier está alejado de él. No le gusta. Alza la mirada y ve a su compañero algo resentido y cruzado de brazos, pero viéndose extrañamente adorable. Geralt sonríe un poco. 

"Es un imbécil muy tierno"

El brujo ve que se está quedando dormido, y que la manta está siendo apretujada por una de sus manos. 

Se acerca a Jaskier, toma la manta y le cubre con ella hasta su cuello.

"Pero eso no le quita lo imbécil"

Geralt cierra un poco sus ojos, mientras la hoguera se extingue con lentitud.

Vi una imagen en Pinterest de ello, y se me ocurrió hacer esto xd. Tendrá 2 o 3 capítulos, y está inspirado por una canción. ¿Saben que es estúpido? Hacer una historia de estos dos, cuando ni siquiera he terminado "Alone and with you"