Carta XVI

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¿Nunca has sentido que estás al borde del colapso?

Porque yo me siento así.

Siento como si me estuvieran ahogando, como si mi vida ya no tuviera un rumbo preciso, como si solo viviera por vivir y no para disfrutar la vida.

No creas que esto se debe a ti, no. Últimamente mi vida estaba decayendo, llegaste tú y me hiciste subir, pero tú mismo me bajaste de esa inefable nube de espléndidos sueños.

Es muy sencillo: Ya había una herida, tú ayudaste a que me olvidara de ella, pero fuiste tú quien la intensificó.

Sé que esto es algo pasajero, y que en algún momento dejara de doler, qué en algún momento la herida que olvidare serás tú...

Pero mientras tanto puedo desahogar mis tristezas en este escrito, el dolor se alivia pero no desaparece...

En otra cartas he dicho que mi mente, mi alma y mi corazón te siente de maneras distintas. Pero me doy cuenta que ellos están sincronizados y siente el mismo dolor juntos y lo intensifican... lo que lo hace aún más agonizante.

Cartas de Dopamina (Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora