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Son oraciones de cuentos de volvamos a los cuentos y me solo con oraciones pude hacer un cuento.

La selva estaba siendo invadida po los hombres, al recoger la tienda de la campaña dejaron olvidado una camara de video. El pizote era capaz de destrozar nidos; para esa actividad contaba con un trapiche y un buey que era el encargado de hacerlo funcionar.

El zorro se asomó y al verse descubrierto, en el calor que había teniendo que soportar durante el día, por esa razón era objeto de broma y brula de sus compañeros. Una zorra regresaba al árbol donde tenía su nido, donde abundaban las aves, ademas con su experiencia siempre daba sabios consejos y órdenes acertadas.

En el corral todo era tranquilidad, un pequño murciélago quedó abandonado en un lugar donde abundaban los ratones. Un día decidio probar si ya tenía admiradores. Cuando vio a un jilguero hacer el nido quiso ayudar, casi inmediatamente pico un pez de regular tamaño, y tenía una bodega llena de alimento.

Caminando sin rumbo buscando agua y alimento, con el fin de hacer nuevas amistades y  ¿porqué no?, hasta matrimonios. Aquel granjero era muy ordenado en su trabajo, un coyote que todo lo habia observado desde un matorral, y alitas por si el peligro era demasiado.

 El pequño corrió sin saber a dónde, pues le paracía horrible lo que había hecho. El perro hacía tiempo que deseaba un compañero pues se sentía muy cansado estando solo. Ella trataba de acerca a él y hasta lo mimaba más que a los otros, pero la rata le decía que eso era para quitarle más la libertad.

El lobo decidió ir a otro lugar donde las ovejas estuvieran al cuidado de peones, pero al eschuchar lo que decían; yo estoy tan lleno que necesito dormir una buena siesta, pero el como fue cuando salto al suelo y puso a comer.

Pronto se vio rodeado de todos que le manifiestaron admiración por tan bello canto, el ñino corrió de hacía y le pregunto: ¿No crees que los padres de estos animalitos también los estabán buscando?. El padre, sin decir nada, abrió todas las jaulas. 


Volvamos a los cuentosWhere stories live. Discover now