;; - Roberto trata de buscar amor y apoyo en su compañero de streaming, Barca.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
💣- Ésto es un OneShot, o sea, solamente es una extensa historia ó relato publicado en una sola parte.
💣- Contendrá contenido +18, leer bajo propio riesgo.
[· · ·]
Era una tormentosa noche de finales de Agosto, las lluvias atascaron al país por lo tanto no era recomendable el simple hecho de salir.
Bueno, eso le valió mucha madre a Diego.
Puesto a que días atrás había quedado con su mejor amigo Roberto a quedarse en su casa ya que harían un chupistream ellos dos solamente.
Sus compañeros y también amigos Ded y Juan no podrían acompañarlos, ya que a Victor se le jodió su PC -en la que hacía streams- y no podría estar conectado varios días; Juan tenía una cena familiar con sus suegros y familia en general y no podía posponerse, vaya, era importante el asunto.
Por eso, entre Barca y Roberto decidieron y quedaron en juntarse y hacer sus pendejadas juntos, ¿Y qué mejor que un Chupistream, eh?
Un mojado Barca llegó y tocó la puerta de su destinado amigo, quien lo recibió con un choque de palmas y haciéndose a un lado para dejar pasar a su humedecido amigo.
Barca soltó la mochila que tenía cargando en su espalda y se quitó la pesada y negruzca sudadera que traía encima, se paró frente a Roberto mirándolo con certeza y pasó su gran mano por su cabello para hacerlo hacía atrás mientras aclaraba un poco su voz.
ㅡ Wey, ¿me prestas tú baño un momento? Llegué todo mojado por la chingada lluvia y no quiero tener una puta pulmonía. ㅡ
Roberto rió y asintió.
ㅡ Claro wey, está arriba, segunda puerta a la derecha. Dame tú sudadera, está toda húmeda, yo me hago cargo de ella. ㅡ
Barca le entregó a Roberto la dicha sudadera, volvió a tomar su mochila y aclaró su garganta de nuevo.
ㅡ Gracias wey, al rato iniciamos el desmán. No tardo. ㅡ
Roberto asintió con la cabeza y fue directo al cuarto de lavado mientras escuchaba las pisadas de Barca por sus escaleras y segundo piso hasta escuchar una puerta abrirse y cerrarse; al entrar a dicho cuarto cerró la puerta detrás de sí y con pestillo para qué su amigo no interrumpiese.
