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Sofialjm256
Feel special
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Byungjae era alguien que se manejaba con muchas inseguridades, las cuales comenzó a trabajar cuando comenzó a salir con Haon, su novio de hace año y medio.
Hace algunos meses Haon se había encaprichado con la idea de querer lucir sexy, como un "hombre", porque estaba harto de ser considerado lindo o un niño, ya no, quería ser como su hyung Minsik. Por ello se inscribió en el gimnasio y trabajo duro los músculos de sus brazos y espalda, estaba listo para dejar a todos con la boca abierta.
Una de esas personas fue Byungjae que fue ajeno a ese cambió constante, de hecho no supo cuando paso, una vez fue a buscarlo a su casa y notó como la camisa le apretaba y todos esos detalles que demostraban el esfuerzo de su novio, se sintió cohibido.
Él considera a Haon hermoso desde antes de su cambio y después lo seguía viendo igual, pero sabía que la atención que comenzó a recibir el menor era diferente, podía ver como las chicas en tiendas coqueteaban con él o sus mismas vecinas, la naturaleza de Haon era ser tímido e inocente, no podía darse cuenta de ello, eso lo aliviaba pero no dejaba de molestarle.
No era envidia, eran celos, lo sabía y no quería sentirse así porque no quería discutir con Haon, odiaba hacerlo y que lo hicieran por esa tontería sólo seria innecesario, así que se tragaba todos sus pensamientos.
Pero una vez una de esas chicas llegó más lejos que otras, habían salido a cenar con otros amigos, estos llevaron a otros amigos y entre ellos estaba esa chica que no quiere siquiera recordar su nombre. Estuvo toda la noche robándose la atención de Haon, haciéndole ojitos e incluso tocando sin permiso del mencionado sus brazos y manos, Byungjae se sentía listo para masticar clavos pero sólo ignoró todo, lo hizo porque captó que su novio se mostró incómodo en todo momento y no halagado, incluso hubo veces que se apoyó sobre él para alejarse de ella.
No estaba molesto con Haon, en lo más mínimo, pero a la vuelta a su casa no quiso hablar con él, no tenía ganas, el menor lo intentó demasiado, sacando charlas de lo que sea obteniendo en respuesta monosílabos, jugaba con su mano para llamar su atención y hacia chistes pero nada.
—Lo siento —dijo después de intentarlo tanto, soltó su mano y guardó las suyas en los bolsillos de sus jeans, eso atrajo su atención—. No sé que hice mal pero lo siento, no fue mi intención.
—Si sabes que no hiciste nada, ¿para qué lo sientes? —preguntó y su tono sonó duro aunque no quiso.
—No lo sé, no me gusta que no me hables y fue lo único que se me ocurrió decir —admitió mirando el suelo—. ¿Hice algo mal?
—No.
—¿Entonces por qué no hablas conmigo? —inquirió nervioso—. Algo tuvo que haber pasado, no sé que fue.
—¿De verdad no lo sabes?
—¿Eso significa que si hice algo? —contestó mirándolo otra vez.
Byungjae se giró a verlo por fin.
—No, Haon —repitió harto.
—Entonces dime qué ocurre si no quieres que me ponga a adivinar —mandó, lo había dicho muy tranquilo aún para Byungjae que creía que el menor tenía todo el derecho para molestarse.
—Son sólo estupideces mías, no tengo ganas de hablar, es eso —juró mirando hacia el frente otra vez.
Haon avanzó unos pasos para adelantarse y pararsele enfrente, eso ocasionó que el mayor se detuviera de golpe.
