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El pequeño príncipe se encontraba corriendo hacia el comedor principal, el motivo, un pequeño de orejas grandes. Desde la primera vez que lo vió presentarse junto a su padre no pudo soportar verlo derramar lágrimas, se sentía tan impotente, mientras ellos los entretenían las damas y los duques de la corte se reían de ellos junto a su padre, odiaba eso, no sabía que era tan divertido de toda esa situación; al principio le había parecido muy lindo ver a su rechoncho amigo con ese traje de rayas y una pequeña guitarra, desde los 6 años había querido tocar la guitarra ya que el observaba a los bufones poseer una y tocarla para el rey y le pareció maravilloso cuando descubrió que su nuevo amigo lo podía hacer, el le podía enseñar, pero todos esos pensamientos se fueron al caño cuando miró como su rostro cambió completamente. Al empezar a tocar el pequeño instrumento tenía una sonrisa resplandeciente en su lindo rostro, pero al notar como todos reían su cara empezó a llenarse de miedo y tristeza, eso le causó mucha furia al pequeño castaño, ya que no entendía el por qué de las acciones de su padre. Pero esperaba que eso cambiase hoy.

— ¡Papá!- gritó al entrar al comedor interrumpiendo el discurso del señor Park que al parecer era muy divertido.

— Oh mi Baekkie, te esperábamos hijo, pero este- miró al hombre- nos estaba contando algo muy gracioso- rió por lo bajo.

— No quiero que estén ellos aquí papá- dijo sin despegar la mirada de su padre por miedo de ver a su amigo como las últimas veces, tan vulnerable.

— P-pero hijo...

— ¡Dije fuera!- les gritó a los Park.

— E-enseguida majestad- declaró el hombre para luego retirarse a su alcoba.

Baekhyun no esperaba mucho de parte de Chanyeol, tal vez lo saludara o le sonriera y nada más, pero no, ni siquiera le dió una mirada, simplemente pasó con la cabeza gacha y eso lo enfureció mucho.

— Oye tú- se dirigió al pequeño que iba de salida.

— ¿S-si?- se volteó tímido.

— Te veo mañana en el jardín, llega temprano- dijo fríamente.

— P-pero yo...

— Nada de peros, ¡¿no sabes quién soy? yo te doy órdenes, tu obedeces!- le gritó.

— S-si alteza- dijo por último para luego retirarse.

— Ese es mi pequeño, ya era hora de que lo pusieras en su lugar, todo el rato ha estado lloriqueando y no ha hecho bien su trabajo, siempre es lo mismo, bueno ¿qué se esperaba de él? es un simple pueblerino.

¿Qué acabo de hacer?

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Esa noche Chanyeol no pudo dormir muy bien, la única persona que lo trataba bien (además de su padre, claro) le acababa de gritar frente a muchas personas, eso lo ponía muy triste, había creído que por fin alguien quería ser su amigo pero parece que estaba equivocado.

A la mañana siguiente tuvo que levantarse más temprano de lo usual para encontrarse con Baekhyun, hoy no desayunaría ya que sus alimentos llegaban hasta las 8:30 am y el se había despertado a las 7:00 am. Pero eso no importaba porque no es como si lo que comía era muy bueno, casi siempre le daban una masa viscosa de distintos colores (dependiendo el día), así que no estaba al tanto de qué era lo que entraba a su organismo exactamente. Se encontraba caminando hacia el jardín cuando unas voces provenientes de un cuarto al lado de las escaleras principales llamó su atención.

— ¡No hacen nada además de comer, dormir e ir al baño! no nos sirven de nada, hay que deshacernos de ellos.

— Está bien está bien, dime qué números de cuarto- se escuchó una voz femenina

Bufón || ChanbaekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora